5 modos de optimizar el funcionamiento del hígado
Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater
¿Es posible optimizar el funcionamiento del hígado día a día y de modo sencillo? Desde luego. Debes saber que, en ocasiones, muchas enfermedades hepáticas cursan apenas sin síntomas. No tenemos pistas de que nuestro hígado se está inflamando o llenando de grasa, hasta que es demasiado tarde.
Vale la pena poner en práctica las siguientes estrategias. Con ellas, mejorarás tu salud hepática y tu calidad de vida. Conoce los datos a continuación.
1. Rutina en tus mañanas
Un vaso de agua tibia con limón:
- El limón es rico en fotoquímicos, en especial, el d-limoneno, que actúa como tónico para el hígado y nos permite desintoxicarlo, aumentando además la producción de bilis.
- Debes saber además que este tipo de fitoquímicos elevan la producción de ciertas enzimas capaces de optimizar el funcionamiento del hígado, que además previenen la aparición de elementos cancerígenos.
- El d-limoneno también promueve la salud del intestino delgado, ya que consigue que se obtengan mejor los nutrientes, que se reduzca el colesterol y que además, se disuelvan los cálculos biliares.
- Recuerda utilizar siempre limones recién exprimidos y mezclar el jugo de medio limón con agua tibia, nunca fría.
Una cucharada de aceite con el jugo de medio limón
- El zumo de un limón combinado con aceite de oliva extra virgen (que sea de buena calidad) es ideal para optimizar el funcionamiento del hígado. Estimula la producción de bilis, lo limpia y lo tonifica.
- Evita además la producción de piedras en la vesícula.
- Basta con tomar una cucharada (unos 10 gramos) con el jugo de medio limón. Bebe poco a poco. Puedes seguir, por ejemplo, una semana el tratamiento de agua tibia con limón y, a la siguiente, utilizar este tratamiento de aceite de oliva.
2. Infusiones para después de tu almuerzo
Existen dos infusiones medicinales excelentes para optimizar el funcionamiento del hígado. También puedes combinarlas a lo largo de la semana, o consumir cada día aquella que más te apetezca. Toma nota:
- Infusión de cardo mariano: Puedes encontrarlo en tiendas naturales e incluso en farmacias. Verás que lo suelen comercializar tanto en comprimidos como en infusiones. Si lo deseas, puedes hablar con tu médico si quieres tomarlo en comprimidos. No obstante, un modo sencillo es beberlo en una rica infusión. Es una de las plantas más efectivas para la limpieza del hígado y su protección, que trata muy efectivamente, por ejemplo, el hígado graso. Es interesante saber también que el cardo mariano puede reducir la inflamación del hígado e incluso regenerar las células hepáticas.
- Infusión de cúrcuma y limón: Esta bebida medicinal es muy saludable para el hígado. Podrás desintoxicarlo e incluso eliminar posibles sustancias cancerígenas.
3. Jugo de arándanos rojos
Sabemos que no son fáciles de conseguir, pero si en alguna ocasión encontraras arándanos rojos en tu mercado, no dudes en llevarte unos cuantos a casa, lo suficiente para tomarlos a lo largo de una semana. Te explicamos por qué son tan buenos para optimizar el funcionamiento del hígado.
- Beber jugo natural de arándanos rojos nos va a permitir limpiar el sistema linfático, bajando además la grasa más persistente.
- Lo ideal sería tomar unos 20 gramos al día de arándanos rojos. Los limpiamos, los pasamos por la licuadora y los mezclamos con agua.
- Los arándanos rojos son ricos en fitonutrientes, tales como las antocianinas, catequinas, luteínas y quercetina… Maravillosos para cuidar de nuestro hígado.
4. Cuida tu peso, pero nunca adelgaces muy rápido
Sabemos que bajar de peso es un modo eficaz de mejorar la función hepática, pero ten cuidado: si perdemos kilos de un modo muy rápido. el hígado no puede adaptarse bien a ese cambio metabólico. Podemos correr el riesgo de que se inflame y de que se formen cálculos biliares, así que lo mejor es hacerlo de modo saludable y con equilibrio.
También sería necesario que eliminaras de tu dieta los siguientes elementos:
- Evita la fructosa y la sacarosa, además de los refrescos o bebidas carbonatadas. A largo plazo enferman mucho el hígado.
- Evita el alcohol y el tabaco. Hábitos dañinos que erradicar.
- Ya sabes que alimentos como los precocinados o la bollería industrial no son nada saludables, así que no los incluyas en tu carrito de la compra. Prescinde de las pizzas, de las sopas instantáneas, de las carnes muy grasosas… y ojo, también debemos tener mucho cuidado con tomar demasiados medicamentos. Ya sabes que el hígado es el encargado de procesarlos, de eliminarlos. Y en ocasiones se satura. Así que toma aquellos que sean imprescindibles y que te prescriba el médico, nunca te automediques por tu cuenta.
5. Remedio sencillo para tres veces por semana
Agua de alcahofas con el jugo de un limón
Nada tan fácil como hacer una decocción de una alcachofa. Cuando veas que ya se ha quedado blandita, retírala y reserva. Lo que vamos a beber a lo largo del día es precisamente el agua resultante de esta cocción. Lo ideal es obtener al menos 3 vasos (entre 400 y 500 ml). Añade el jugo de un limón y bebe a lo largo del día.
Muy fácil. Esta bebida nos va a permitir ir depurando toxinas, a la vez que actuará como un tónico excelente para optimizar el funcionamiento del hígado. ¿Te lo vas a perder? Pruébalo.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.