6 recetas con leche materna para darle a tu bebé

¿Te suena extraño preparar recetas para bebés con leche materna? Aunque es necesario superar la sorpresa inicial y quizás algunos prejuicios, es una buena opción para seguir ofreciendo sus valiosos nutrientes.
6 recetas con leche materna para darle a tu bebé
Anna Vilarrasa

Revisado y aprobado por la nutricionista Anna Vilarrasa.

Escrito por Anna Vilarrasa

Última actualización: 25 mayo, 2023

Las recetas con leche materna son una buena forma de ofrecerla más allá de los 6 meses, momento en el que muchas mujeres abandonan la lactancia. Esto suele suceder con la reincorporación al trabajo y la introducción de nuevos alimentos en la dieta del bebé.

Además, resulta muy interesante pues en ella se encuentran muchos de los nutrientes que el bebé sigue necesitando aún pasados los 6 meses cuando se inicia la alimentación complementaria.

Utilizar leche materna en lugar de fórmula

6 recetas con leche materna para darle a tu bebé
La leche materna puede incorporarse a las papillas del bebé para aprovechar, así, sus múltiples nutrientes.

Según los organismos oficiales, se recomienda amamantar de forma exclusiva hasta los 6 meses de vida, ya que la leche materna aporta todos los nutrientes necesarios para un correcto desarrollo del bebé. A partir de entonces empieza la complementación alimentaria durante la cual se ofrecen al bebé nuevos alimentos que acabarán formando parte de su dieta habitual.

Las leches de fórmula o de sustitución son adecuadas cuando existen problemas o impedimentos para poder llevar a cabo la lactancia materna con éxito y satisfacción. Por otra parte,  suele ser una práctica común ofrecerlas en el momento de introducir nuevos alimentos, ya sea en biberón o para preparar otros platos.

Ahora bien, ¿sabías que la leche materna se puede usar de la misma manera que las de fórmula? También es apta para preparar algunas recetas y comidas para los niños y, como se ha visto, sigue siendo una fuente de nutrientes de especial interés. 

Recetas con leche materna para intentar cocinar

Asegurar que el bebé la recibe sin darle el pecho implica buscar nuevas fórmulas de poder ofrecerla. Por esto, se puede intentar la preparación de algunas recetas con leche materna que la incorporan entre sus ingredientes principales. 

1. Puré de aguacate

Esta es una preparación muy sencilla que no precisa de ningún utensilio de cocina. Solo es necesario machacar en un bol pequeño medio aguacate maduro y un poco de leche materna con la ayuda de un tenedor. Se puede batir si se quiere más fino. 

2. Gachas de avena

Las papillas de cereales son uno de los primeros preparados que se ofrecen a los bebés. En muchas ocasiones, se les añade agua o caldo pero no hay ningún motivo para no probar con un poco de leche materna. 

Para cocinarlo, solo son necesarios unos copos de avena bien finos o un poco de harina de avena apta para preparar papillas. Calentar un poco la leche sin llegar a hervir y añadir el cereal mientras se mezcla para que  no se pegue. 

3. Papilla de avena y plátano

Una variación de la receta anterior es esta papilla a la que se le añade el plátano. Es perfecta para el desayuno o la merienda y su textura se puede ajustar a las preferencias de cada niño al añadir más o menos cantidad de leche.

Con un tenedor, machacar medio plátano maduro; introducir en un cazo con un vaso de leche y calentar. Remover de forma enérgica con unas varillas y añadir entre 3 y 4 cucharadas de copos de avena. Dejar al fuego hasta que adquiera una textura más espesa. 

Papillas para bebés
Se recomienda utilizar leche recién extraída, aunque también puede usarse leche materna refrigerada o, incluso, congelada.

4. Puré de verduras dulces

Las zanahorias, el boniato o la calabaza son vegetales bien aceptados por los pequeños por su especial sabor dulce. Además, son alimentos muy suaves y digestivos perfectos para un organismo más delicado. 

Para preparar esta papilla se necesita 1 zanahoria pequeña, medio boniato, medio puerro y 1 vaso de leche materna. Los pasos a seguir son los siguientes:

  • Lavar y pelar muy bien todas las verduras.
  • Trocear y hervir en agua durante 15 minutos.
  • Retirar del fuego y eliminar el exceso de agua para que las hortalizas queden secas. 
  • Triturar con una batidora o con un tenedor. Añadir la leche poco a poco hasta obtener una crema fina. 

5. Papilla de pollo y verduras con leche materna

La incorporación de la leche en esta receta se hace en sustitución del caldo. Por esto, no solo cambia el contenido nutricional del plato sino también su textura que se vuelve un poco más untuosa. Así, es necesario seguir el siguiente método de preparación:

  • Lavar y cortar las verduras en trozos grandes: 1 zanahoria, 1 puerro pequeño y medio calabacín. 
  • En una cacerola, hervirlas junto con 20-30 gramos de pollo o la cantidad adecuada a la edad del bebé. 
  • Cocinar 20 minutos hasta que todo quede tierno. Después, poner los ingredientes en un vaso de batidora (sin el agua) y triturar para obtener una mezcla espesa. 
  • Agregar poco a poco la leche materna (unos 200 mililitros) con el fin de obtener la textura deseada. 

6. Pancakes

Esta receta requiere un poco más de tiempo pero resulta un desayuno o merienda perfecto para niños pequeños y un poco más grandes. Los ingredientes necesarios para prepararla son:

  • Un plátano maduro triturado.
  • Una taza de leche materna.
  • 1 huevo.
  • 2 cucharadas de aceite de oliva.
  • 1 taza de harina integral de trigo.
  • 1 cucharadita de polvo para hornear.
  • 1/4 de cucharada de bicarbonato de sodio.

En una batidora o máquina para triturar, combinar el plátano, la leche, el huevo y el aceite. En un bol, mezclar la harina con la levadura y el bicarbonato.

A continuación, mezclar los ingredientes húmedos con los secos para obtener una masa homogénea. Según el gusto de cada uno, se puede añadir un poco de canela o zumo de limón.

Acto seguido colocar una sartén o plancha al fuego con un poco de aceite y verter 1 o 2 cucharadas de la preparación por cada pancake. Dejar cocer hasta que aparecen pequeñas burbujas en la superficie. Entonces, se puede girar y tostar 2 minutos más. 
Gracias a su textura húmeda, se conservan bien unos días en el frigorífico aunque existe la posibilidad de congelarlos. Se pueden degustar a temperatura ambiente o pasados por la tostadora.

El plátano aporta el sabor dulce sin necesidad de añadir azúcar pero también se puede usar boniato, mango triturado o compota de manzana.

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Para usar la leche materna en la preparación de platos, es imprescindible disponer de un sacaleches. Si el proceso de extracción es sencillo y cómodo para la madre, existen más posibilidades de seguir ofreciendo la leche al bebé bajo la forma de recetas de cocina.

Además, los hábitos de higiene son de extrema importancia mientras se extrae, manipula y conserva la leche. En un principio, no es necesario hervirla para eliminar patógenos pero si ser cauto durante el proceso. 

La mejor opción es cocinar con leche materna recién extraída. Si esto no es posible, se almacena en el frigorífico para usar el mismo día. Otra alternativa es disponer de pequeñas cantidades de leche congelada teniendo en cuenta que no se puede volver a congelar con posterioridad. 

En un principio, se puede usar la leche de la madre para sustituir a la de vaca en cualquier receta o preparación. Sin embargo, se recomienda adaptarse a las preferencias del bebé y a los alimentos que ya han sido introducidos de forma segura en su dieta habitual. 


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  • American Academy of Pediatrics. Breastfeeding and the Use of Human Milk. Section on Breastfeeding. Febrero 2012. 
  • Heymann J, et al. Breastfeeding policy: a globally comparative analysis. Bulletin of the World Health Organization 2013.91:398-406

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