12 métodos naturales que te ayudan a quedar embarazada

Revisado y aprobado por el médico Nelton Abdon Ramos Rojas

Escrito por Daniela Echeverri Castro

Última actualización: 06 agosto, 2024

La búsqueda para quedar embarazada se puede convertir en una experiencia tanto emocionante como desafiante. Si bien en cuestión de fertilidad cada mujer tiene sus necesidades específicas, se sabe que poner en práctica algunos métodos naturales puede incrementar las probabilidades de concebir.

Desde la práctica regular de actividad física hasta evitar el alcohol y el cigarrillo, el manejo del estrés y algunos remedios naturales son varios los ajustes del estilo de vida que pueden promover ciclos menstruales regulares, una ovulación saludable y un estado de salud idóneo para alcanzar un embarazo exitoso.

¿Te sientes lista para experimentar la maternidad? ¿Tus deseos de concebir aumentan, pero aún no lo logras? En el siguiente espacio te contamos con más detalle qué te puede ayudar en este proceso, cómo potenciar tu fertilidad y cuándo buscar ayudar profesional.

1. Hazte chequeos previos

Los estudios preconcepcionales que se realizan en muchos centros médicos son una gran ayuda para quedar embarazada de forma segura. Estos chequeos incluyen una serie de análisis clínicos y ginecológicos para determinar si el cuerpo está preparado para procrear.

Su práctica está recomendada en todos los casos, inclusive cuando no hay problemas de fertilidad. Estos, de paso, ayudan a establecer si existen riesgos para el feto, si hay complicaciones que dificultan la concepción o si existe el riesgo de problemas durante y después del embarazo.

Los especialistas consideran a la atención previa a la concepción como un parte fundamental del embarazo planificado. Gracias a ella no solo se pueden mejorar las posibilidades de un embarazo exitoso, sino que también se controlan las variables que inciden en que este sea saludable.

2. Conoce tus días fértiles

Uno de los métodos más eficaces para quedar embarazada es tener pleno conocimiento de cuándo es el periodo fértil. La idea es que, durante estos días, las relaciones sexuales sean una constante. Para ser más precisos, corresponde a los tres o cuatro días previos a la ovulación, el día de la ovulación y el día posterior.

Su duración es de alrededor de seis días, en los cuales hay más probabilidades de que ocurra el encuentro entre óvulo y espermatozoide. Si bien el ovocito sobrevive durante unas 12 a 24 horas tras ser ovulado, los espermatozoides permanecen entre cinco y siete días en el tracto reproductor de la mujer. Así, durante este lapso, pueden llegar a producir la fecundación.

¿Cómo calcularlos?

Este proceso ocurre alrededor del día 14 del ciclo menstrual, cuando la menstruación es cada 28 días. Sin embargo, para simplificarlo aún más, hay herramientas tecnológicas que lo facilitan. Basta con ingresar en el navegador las palabras «calculadora de ovulación» para acceder a opciones útiles.

Ahora bien, algunos cambios corporales también sirven como señal para identificar esos días. Por ejemplo, la presencia de moco cervical espeso (a veces similar a la clara de huevo), el aumento de la temperatura basal y, algunas veces, un dolor en la región de los ovarios, bien sea en uno o ambos lados.

3. Alterna los días para tener relaciones sexuales

En torno a la cantidad necesaria de sexo durante los días fértiles existen varios mitos. Mientras que algunas parejas llegan a obsesionarse al punto de mantener relaciones sexuales varias veces al día, solo durante el periodo de ovulación, otras tienen la creencia de que los hombres necesitan ‘acumular’ o ‘ahorrar’ su esperma.

Pero ni lo uno ni lo otro. A menudo, se recomienda alternar los encuentros sexuales en el periodo fértil para incrementar las probabilidades de concepción. La eyaculación infrecuente puede generar un efecto negativo en la calidad de los espermatozoides; sin embargo, también conviene un breve periodo de descanso entre eyaculaciones para un óptimo recuento de espermatozoides.

4. Evita el uso de lubricantes (o cámbialos)

Algunas parejas incorporan lubricantes vaginales en sus relaciones sexuales para combatir la sequedad vaginal; sin embargo, algunos llegan a afectar la calidad del esperma debido a su composición química y a la forma en como interactúan en el ambiente vaginal.

En general, se desaconseja el uso de lubricantes con glicerina, parabenos, propilenglicos y otros aditivos químicos. Se postula que su uso puede impactar sobre la movilidad y viabilidad de los espermatozoides. En su lugar, es preferible el uso de aquellos a base de silicona, hidroxietilcelulosa o ciertos aceites minerales.

5. Consume ácido fólico

No es que el ácido fólico tenga un efecto directo sobre la fertilidad en el sentido de incrementar las probabilidades de quedar embarazada; sin embargo, su consumo desempeña un papel importante en la salud reproductiva y en el desarrollo de una gestación saludable.

Por un lado, este nutriente, también llamado vitamina B9, interviene en la síntesis y reparación del ADN, que es relevante en la formación de óvulos y espermatozoides sanos. Por otro lado, la suplementación con este se asocia a un riesgo disminuido de defectos congénitos como la espina bífida y la anencefalia.

En mujeres que buscan quedar embarazadas se sugiere una ingesta de 400 microgramos (mcg) de ácido fólico al día, desde al menos un mes antes de iniciar los intentos por concebir. Una vez se logre el embarazo, la dosis suele aumentar de 600 a 800 mcg. El médico será quien establezca la cantidad adecuada.

Cabe destacar que este nutriente está presente de forma natural en una amplia variedad de alimentos. De estos, puedes elegir los siguientes:

• Hígado
• Verduras de hoja verde oscura (espinaca, espárragos, brócoli)
• Levaduras
• Legumbres (garbanzos, lentejas)
• Fruta
• Cereales
• Frutos secos (cacahuetes y avellanas)

Nota: tu médico te indicará todos los detalles que debes saber en torno a la suplementación con ácido fólico.

6. Adopta una dieta sana y equilibrada

No hay alimentos que, por sí solos, aumenten la fertilidad de forma directa; aún así, mantener una dieta sana y equilibrada contribuye a incrementar las posibilidades de concebir.

La evidencia recopilada hasta el momento sugiere que una alimentación que favorezca el consumo de pescado, aves, cereales integrales, frutas y verduras está relacionada con una mejor fertilidad en las mujeres y una mejor calidad del semen en los hombres.

Otras pautas asociadas a la dieta que también se pueden considerar son las siguientes:

• Consumir menos grasas trans y más grasas monoinsaturadas (de alimentos como el aguacate y el aceite de oliva).
• Reducir las fuentes de proteína animal y priorizar más la proteína vegetal.
• Consumir alimentos con alto contenido de fibra y bajo índice glucémico (incluidos los cereales integrales).
• Ingerir más fuentes vegetales de hierro y calcio.
• Optar por productos lácteos grasos en lugar de light o bajos en grasa (siempre que no exista intolerancia).
• Incrementar el consumo de frutas y vegetales como fuentes de antioxidantes.
• Consumir más fuentes de ácidos grasos omega 3 (pescados, frutos secos, semillas y algunos aceites).

7. Procura mantener un peso sano

De todos los métodos naturales para quedar embarazada, este es uno de los más relevantes. ¿El motivo? El exceso de peso y la obesidad puede afectar la fertilidad tanto de las mujeres como de los hombres.

En ellas, el sobrepeso está asociado a problemas con la ovulación y la regularidad menstrual. De hecho, es un factor de riesgo de síndrome de ovario poliquístico (SOP) que puede influir en la infertilidad. En los hombres, estar por encima de un peso saludable compromete la calidad del esperma y la función hormonal.

Cuando el peso es bajo, también hay dificultades. No solo porque interfiere en la ovulación saludable, sino porque disminuye las reservas de energía necesarias para un embarazo sin complicaciones. Dicho todo esto, tener un peso corporal sano (con rangos de índice de masa corporal dentro de lo considerado normal) genera un entorno más favorable para la reproducción.

Hay que destacar que alcanzar un peso saludable requiere un proceso individualizado que debe abordarse de la mano de profesionales de la salud (médicos, nutricionistas, psicólogos, entrenadores).

La dieta, la actividad física y el manejo del estrés son claves. Sin embargo, la edad, la presencia de condiciones médicas preexistentes y otros factores pueden hacer que sea fácil o no alcanzar el objetivo.

8. Realiza ejercicio físico

Si quieres quedar embarazada, es buena idea que tanto tú como tu pareja tengan un estilo de vida activo. La práctica de ejercicio físico regular está relacionada con beneficios para la fertilidad, tanto de las mujeres como de los hombres.

En primer lugar, porque ayuda a mantener un peso sano que, como ya lo mencionamos, es clave en este proceso. Por otro lado, porque ha exhibido efectos positivos en el equilibrio de hormonas y la disminución del estrés, todo lo cual contribuye a incrementar las posibilidades de concebir.

En los hombres, la actividad física se asocia a una mejor calidad del esperma y a un aumento de los niveles de testosterona. Esta última, entre otras cosas, posibilita una mejor movilidad y morfología del esperma.

De cualquier modo, en el caso de la mujer, se recomienda que la actividad física sea moderada. El ejercicio intenso regular puede tener un impacto negativo en la fertilidad, de acuerdo a la evidencia disponible.

Se recomienda dedicar al menos 150 minutos de ejercicio moderado a la semana, distribuidos en sesiones de 30 minutos al día, 5 días a la semana. Algunos ejemplos incluyen caminar rápido, nadar a un ritmo tranquilo, montar en bicicleta a una velocidad moderada o practicar yoga.

9. No te preocupes demasiado por las posturas sexuales

En la cultura popular existe la creencia de que algunas posturas sexuales son mejores para quedar embarazada; no obstante, hasta la fecha no hay evidencia científica que lo respalde. Más que preocuparse por la postura sexual, hay que tener en cuenta que la concepción depende principalmente de la capacidad de los espermatozoides para alcanzar y fertilizar el óvulo.

Que el coito ocurra en una posición u otra no tiene relevancia en esto; lo que sí aumenta las probabilidades de lograr concebir es hacerlo en el periodo fértil de la mujer. Así pues, no te limites con tu pareja; disfruta las posturas en las que ambos estén cómodos.

10. Remedios naturales para quedar embarazada

En varios sistemas de medicina holística se alienta al consumo de una serie de remedios naturales para aumentar las probabilidades de concebir. Infusiones de plantas, suplementos herbales y algunos aceites se asocian a un aumento de la fertilidad. Pero, ¿funcionan? ¿Son seguros?

Al considerar este tipo de complementos para quedar embarazada es conveniente saber, de primera mano, que la mayoría carecen de respaldo científico sólido. Gran parte de las afirmaciones en torno a sus beneficios provienen de la tradición popular.

Si pese a esto tienes interés por probarlos, procura consultar al médico antes de elegir una opción u otra. No hay que ignorar que, en ciertos casos, el riesgo de efectos secundarios es mayor. También pueden estar contraindicados.

Algunas opciones son las siguientes:

• Raíz de maca
• Coenzima Q10
• Aceite y semillas de linaza

11. Practica técnicas de relajación

Aunque a menudo se ignora, el estrés tiene un impacto negativo en la actividad hormonal. La exposición prolongada a este puede alterar los niveles de cortisol y de la hormona leuteinizante, generando dificultades tanto para la ovulación, como en la producción de esperma en el caso de los hombres.

Todo ello aunado a que disminuye el deseo sexual. Por eso, si buscas quedar embarazada, controlarlo es clave. Para ello, asegúrate de poner en práctica alguna técnica de relajación, como la meditación, el yoga, los ejercicios de respiración profunda, la aromaterapia, los masajes o cualquier otra.

El adecuado manejo del estrés no solo favorece la concepción, sino que promueve el bienestar general que es crucial durante el embarazo y la crianza.

12. Evita el alcohol y el cigarrillo

Las bebidas alcohólicas y el cigarrillo son enemigos de la fertilidad. Su consumo tiene efectos adversos en el sistema reproductivo tanto de las mujeres como de los hombres. El alcohol afecta la producción de hormonas sexuales, disminuye la calidad del esperma y tiende a incrementar el tiempo que tarda la mujer en concebir.

Entre tanto, las sustancias químicas tóxicas que contiene el cigarrillo tienden a generar daños en los óvulos, los espermatozoides y el revestimiento del útero. Su consumo prolongado está asociado a la amenaza de aborto.

Por todo lo anterior, es fundamental evitar estos malos hábitos si es que se tienen. También conviene evitar el humo de segunda mano, así como drogas recreativas y exceso de cafeína.

¿Hay medicamentos o pastillas para quedar embarazada rápido?

Sí. Cuando el médico o el especialista determina que hay problemas de fertilidad, puede sugerir otras modalidades de tratamiento para aumentar las probabilidades de quedar embarazada. Esto puede abarcar el uso de inductores de ovulación o tratamientos hormonales. Sin embargo, solo deben ser prescritos y administrados bajo la supervisión del profesional.

Algunos de los más utilizados son los siguientes:

• Citrato de clomifeno. Medicamento oral que estimula la ovulación.
• Gonadotropinas. Tratamientos inyectados que induce al ovario a la producción múltiple de óvulos.
• Letrozol. Utilizado si la infertilidad está asociada al síndrome de ovario poliquístico (SOP).

Dependiendo de la posible causa de los problemas de fertilidad, el médico puede sugerir otros fármacos como la metformina, la bromocriptina (Cycloset, Parlodel) u otros.

¿Qué debes recordar si quieres quedar embarazada?

En resumidas cuentas, si lo que buscas es concebir, procura mantener un estilo de vida saludable, que priorice una buena alimentación, ejercicio físico, una adecuada gestión del estrés y, por supuesto, una buena rutina sexual con tu pareja. Además, ten en cuenta cuál es tu periodo fértil, que son los días claves para que se dé la fecundación del óvulo.

Aun así, considera que el proceso puede tomar tiempo y debes procurar encontrar un equilibrio entre la esperanza y la paciencia. En la medida de lo posible, busca acompañamiento profesional, sea por parte del médico, el ginecólogo o el especialista en salud reproductiva y fertilidad.