Adoptó a un niño enfermo: padre soltero crió un campeón
Muchos hombres solteros viven con el deseo de convertirse en padres en algún momento de su vida. Debido a ello, la adopción es un gran camino para que cumplan su sueño y llenen de amor verdadero a un niño que lo necesita.
Así le ocurrió a Jerry Windle, un hombre estadounidense que siempre se enfrentó a que le dijeran que no podía tener un hijo solo por ser homosexual. Sin embargo, él siguió con su esperanza intacta.
Ese sueño se intensificó en el año 2000 cuando Jerry estaba leyendo una revista de paternidad y descubrió un artículo que hablaba sobre un hombre que había podido adoptar a un niño. En ese momento, consiguió el número del orfanato y se puso en contacto.
Ahí contó su situación, preguntó si era posible que le dejaran adoptar un niño y recibió la aprobación. Debido a ello, a los pocos meses emprendió rumbo hasta Camboya para finalizar los trámites con los funcionarios y conocer a su hijo.
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Jerry adoptó a Jordan, un niño de 18 meses que estaba en el orfanato porque sus padres biológicos habían fallecido. Además, en ese momento se encontraba en estado de desnutrición y tenía múltiples infecciones en la piel.
Juntos tuvieron un buen vínculo desde el principio, retornaron a Estados Unidos e iniciaron los tratamientos correspondientes para salvar la vida del pequeño. Así, con el paso del tiempo lograron superar todas las dificultades y Jordan quedó con un excelente estado de salud.
Los comienzos en el deporte para Jordan Windle
A la edad de 7 años, Jordan le comentó a su papá que le gustaría practicar buceo en sus tiempos libres. De acuerdo con ello, Jerry buscó una buena academia, inscribió a su hijo y siempre estuvo presente para brindarle apoyo.
En ese lugar, el talento de Jordan Windle llamó la atención de Tim O’Brien, el hijo de un reconocido entrenador de buceo. A causa de ello, lo comenzaron a inscribir en competencias y durante los próximos años logró ganar varias medallas.
Además, a sus 16 años decidió volver a Camboya para realizar unos clavados de exhibición frente a los niños huérfanos del país. Con este acto, su intención fue motivarlos a encontrar inspiración y cumplir sus sueños.
Los juegos olímpicos
El esfuerzo y la preparación de Jordan Windle le permitieron clasificar para competir en los Juegos Olímpicos desde 2020. De ese modo, se convirtió en uno de los deportistas que representa a Estados Unidos en la disciplina de clavados.
No obstante, ha afirmado que también se siente un representante de Camboya. Por esa razón, se tatuó la bandera de ese país en uno de sus brazos para darles visibilidad durante la icónica competencia mundial.
En la actualidad, Jerry no ha podido acompañar a su hijo en las tribunas debido a las restricciones que existen por la pandemia. Sin embargo, Jordan manifiesta que él sigue siendo su hincha número 1 y que siente el frenético apoyo desde la distancia.
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El amor de los padres es incondicional
El amor de un padre con su hijo es intenso, sincero e irrompible, por esa razón se encargan de guiar a sus hijos para que puedan cumplir sus sueños. Asimismo, están dispuestos a llenarlos de motivación y apoyarlos sin importar la hora, la fecha o el lugar.
Un padre llena de autoestima a su hijo, le fortalece la confianza y lo convence de cada uno sus talentos. De esa manera, le aporta todas las bases para que logren ser personas felices y resilientes.
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- Sesé Alegre, José María, LOS JUEGOS OLÍMPICOS DE LA ANTIGÜEDAD. Cultura, Ciencia y Deporte [Internet]. 2008;3(9):201-211.