Distensión en los isquiotibiales: causas y tratamientos

La distensión de los isquiotibiales es una lesión frecuente en ciertos deportistas. Por ejemplo, en aquellos que realizan atletismo, fútbol o baloncesto. Te explicamos por qué.
Distensión en los isquiotibiales: causas y tratamientos
Leonardo Biolatto

Escrito y verificado por el médico Leonardo Biolatto.

Última actualización: 24 octubre, 2022

La distensión en los isquiotibiales es una afección frecuente. Estos son 3 músculos que se sitúan en la parte posterior de la pierna. Se originan en la pelvis y se insertan en la articulación de la rodilla. Mediante ellos se puede realizar la flexión de la pierna.

Lo que ocurre en la distensión de los isquiotibiales es que se elongan demasiado las fibras musculares. Esto puede provocar que la movilidad se altere. Además, es una lesión que causa dolor e incapacidad funcional.

¿Qué son los isquiotibiales?

Como hemos señalado en la introducción, los isquiotibiales son 3 músculos diferentes: el bíceps femoral, el semitendinoso y el semimembranoso. Todos están situados en la parte posterior del muslo.

Cuando se habla de distensión de los isquiotibiales, a veces se hace referencia a la lesión de los tendones. Sin embargo, es más correcto reservar este término para referirse a un desgarro o rotura de las fibras musculares.

Los músculos isquiotibiales permiten el movimiento de flexión de la pierna. Es decir, como si tiráramos de las pantorrillas hacia arriba y hacia atrás, acercando el talón al glúteo. Esta acción es un un gesto fundamental para realizar actividades como correr o saltar.

Cuando se produce una distensión en los isquiotibiales suele aparecer un dolor repentino y agudo. Además, se agrava al intentar contraer o estirar. Según afirman los especialistas de KidsHealth, otro de los signos es una sensibilidad inusual al tacto en la zona posterior de la pierna. Puede haber hematomas y debilidad, la que dura mucho tiempo.

Diagnóstico para la lesión de los isquiotibiales.
La distensión y la diferencia entre que suceda en músculos o ligamentos es muy fina y puede requerir estudios de imágenes para la confirmación.

Causas frecuentes de distensión en los isquiotibiales

La distensión en los isquiotibiales es una lesión muy frecuente en atletas. Sobre todo en personas que suelen realizar actividades que incluyen sprints y saltos. Por ejemplo, en deportes como el atletismo, el fútbol o el baloncesto.

Aunque puede aparecer a cualquier edad, la mayor incidencia se encuentra en adolescentes que están en pleno crecimiento. Esto se debe a que suelen participar más en este tipo de deportes. Otra razón es que, en algunos casos, los huesos de la pierna crecen a mayor velocidad que los músculos.

La distensión en los isquiotibiales puede estar relacionada con el hecho de no calentar de forma adecuada antes del ejercicio. También puede deberse a un sobreesfuerzo muscular que haga que los músculos estén agarrotados o cansados.

Otra causa es la debilidad intrínseca. Si se somete a un esfuerzo brusco o exhaustivo, es usual que se produzca daño. Incluso puede aparecer si no se deja suficiente tiempo de recuperación entre las sesiones de entrenamiento.

Grados de lesión y diagnóstico

La distensión en los isquiotibiales se puede clasificar en función de su gravedad en 3 grados:

  • En el grado 1 tiene lugar es una distensión muscular leve, tal y como explica un artículo publicado en NHS.
  • El grado 2 supone un desgarro muscular parcial.
  • El grado 3 tiene un desgarro completo.

Esta clasificación también ayuda a orientar el tiempo de recuperación de la lesión. Cuanto mayor sea el grado, más tiempo se requerirá para la curación.

Los síntomas también varían en función de esta clasificación. Una distensión en los isquiotibiales de grado 1 produce dolor al intentar flexionar o estirar esos músculos. Sin embargo, la lesión es leve, por lo que no se suele afectar la fuerza como tal de la pierna.

En el grado 3, por el contrario, sí que se afecta de forma notable la movilidad. Además, tanto en el grado 2 como en el 3 suelen aparecer hematomas e hinchazón en la zona.

Tratamientos para la distensión en los isquiotibiales

El tratamiento para la distensión en los isquiotibiales va a depender de la gravedad de la lesión. Sin embargo, hay una serie de medidas que se instauran en el momento en el que se produce el desgarro para evitar el dolor o las molestias.

Lo primero es mantener la pierna en reposo, evitando cualquier actividad física que implique forzar los músculos. Además, se pueden aplicar compresas frías en la zona posterior del muslo varias veces al día.

En algunos casos se recomienda utilizar muletas para evitar la sobrecargar. Incluso se pueden emplear vendajes de compresión para disminuir la hinchazón. No obstante, lo más adecuado para el dolor son los medicamentos analgésicos recetados por un profesional.

Cirugía

Según explican los especialistas de la Clínica Mayo, en algunos cuadros de distensión en los isquiotibiales puede estar indicada la cirugía. Sobre todo si el desgarro muscular es muy grave. También se emplea para tratar los casos en los que el músculo se ha soltado de su inserción.

Fisioterapia

La fisioterapia es uno de los pilares del tratamiento de la distensión en los isquiotibiales. Ayuda a fortalecer los músculos y a mejorar su flexibilidad. De esta forma se reduce el riesgo de que vuelva a producirse una lesión igual o similar.

El programa de ejercicios debe estar supervisado. Además, la vuelta al deporte debe hacerse de forma gradual. Lo ideal es comenzar con estiramientos suaves cuando comiencen a disminuir los síntomas de la distensión.

Mujer con dolor en los iquiotibiales.
El dolor en el muslo es el síntoma primordial de esta afección, así como la posible aparición de hematomas en los grados más severos.

¿Cómo se previene la distensión de los isquiotibiales?

La distensión de los isquiotibiales puede ser prevenida. Para ello debemos recordar que una de las causas relacionada es la falta de un calentamiento adecuado. Por eso, es fundamental dedicar tiempo a calentar los músculos y el cuerpo antes del ejercicio.

Del mismo modo, hay que evitar hacer entrenamientos bruscos o demasiado intensos. La rutina debe ajustarse a nuestra forma física y a las condiciones de salud.

Las sesiones de entrenamiento deben incrementar su intensidad de forma gradual. De esta manera se evita someter a los músculos a un sobreesfuerzo brusco. Otra medida importante es realizar estiramientos después de cada sesión.

Por otra parte, no se debe tratar de volver a realizar ejercicio de forma muy rápida tras esta lesión. El periodo de recuperación puede llegar a durar meses y es esencial tratar de volver poco a poco a la rutina.

La distensión en los isquiotibiales puede ser muy incapacitante

La distensión en los isquiotibiales es una lesión que afecta a la parte posterior del muslo. Estos músculos están implicados en numerosas actividades diarias, ya que permiten la flexión de la pierna.

El dolor y el tiempo de recuperación van a depender de la gravedad de la lesión. No obstante, hasta en los casos leves suele haber una limitación de la movilidad. Por eso, es fundamental intentar la prevención siempre.

Para ello hay que fortalecer la musculatura y tener cuidado a la hora de ejercitarse. Es esencial realizar siempre un buen calentamiento antes de una actividad física. Del mismo modo, si existe algún tipo de molestia o sospecha, hay que consultar con un especialista.

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