Cómo eliminar el moho blanco en la tierra de las plantas

El moho blanco se genera por condiciones de humedad excesiva en la tierra. Aunque una pequeña cantidad no es perjudicial, la propagación del mismo puede afectar la salud de tu planta.

Es común que aparezcan manchas blancas en la tierra de tus plantas. Si has notado que una especie de pelusa con ese color se instaló cerca de las raíces, lo más probable es que se haya generado moho blanco. Puede suceder con plantas de exterior o de interior, pero es más probable que ocurra en el segundo caso.

El moho blanco debe eliminarse lo más pronto posible, ya que es negativo para la planta y también para el ambiente hogareño en general. Afecta a la vegetación de diferentes maneras, pasando por las hojas, el sustrato e incluso a toda la maceta.

¿Qué es el moho blanco y por qué se genera?

En primera instancia, hay que tener en cuenta que una cantidad mínima de pelusa blanca es normal y no representa daños para la salud de las plantas. Esta pelusa se trata de hongos o moho blanco que aparece por la temperatura ambiental alta y el porcentaje elevado de humedad.

Sin embargo, su presencia también es parte del sustrato orgánico de la tierra, al igual que otras bacterias. Por lo tanto, el problema aparece cuando existe un exceso de moho blanco en la maceta.

En ese caso, se deben tomar acciones inmediatas para quitarlo, ya que puede dañar al vegetal. Además, se propaga con rapidez hacia otras vegetaciones y puede influir de manera negativa en la salud de las personas.

¿De qué forma se previene?

Como en muchos otros aspectos, el mejor tratamiento posible es la prevención. Por este motivo, conocer las posibles causas que favorecen la generación del moho blanco ayuda a evitarlo.

Los motivos específicos pueden ser algunos de los siguientes:

• Cercanía a la calefacción: hay que mantener las plantas alejadas del calor que transmiten los hogares, los calefactores o las estufas.
• Riego excesivo o insuficiente: una de las típicas causas de la aparición de hongos es la humedad acumulada. En ocasiones, causada por un riego excesivo.
• Poca ventilación en el ambiente: un problema frecuente para las plantas de interiores es este. En el caso de contar con un jardín, sacar las plantas a airearse durante algunas horas al día es lo recomendable.
• Drenaje deficiente: en cuanto al agua, es posible que la maceta no tenga un buen drenaje. Esto se puede solucionar colocando grava o piedras pequeñas en la base.
• Exceso de restos: parte de cuidar las plantas es retirar las hojas caídas de la maceta. Si bien en pequeñas cantidades no generan problemas, un exceso puede favorecer la producción de moho blanco.

¿Cómo eliminar el moho blanco?

Terminar con este problema que afecta la salud de tus plantas es una tarea sencilla, pero depende del sector donde se genere el moho blanco. No es lo mismo si se encuentra en la tierra, en las hojas o en la maceta. Para cada espacio se recomienda tomar acciones distintas.

En las hojas

Unas de las partes de la planta en donde puede aparecer este hongo es en las hojas. Se trata de un sector sencillo de curar, ya que basta con pasarle un paño suave y seco para retirar las manchas. En el caso de que no sea suficiente, es recomendable obtener productos específicos.

Se deben conseguir en tiendas especializadas y tienen que estar destinados al problema del moho blanco en las hojas. Los fungicidas ecológicos son efectivos y amigables con el medioambiente. Siempre hay que aplicarlos con precaución y a través de un pulverizador.

En la tierra

Tal vez el espacio más común donde suele aparecer la pelusa es en la tierra de la maceta. En ese caso se debe retirar la capa afectada con una pala pequeña. Cuando ya no esté la capa de hongos sobre la tierra, removerla un poco para airearla y quitarle humedad.

Es importante hacerlo con mucha precaución, para no afectar las raíces ni contaminar al resto de la maceta. Antes de colocar una nueva capa de abono, deja que la planta se airee durante algunas horas.

En la maceta

El caso más grave ocurre cuando la cantidad de hongos es tan grande que afecta a toda la planta, e incluso a su maceta. Es recomendable realizar un trasplante, es decir, cambiarla de recipiente. Sin embargo, si se trata de una maceta valorada, también es posible salvarla mediante una desinfección y una renovación de la tierra.

La misma debe realizarse de forma específica y detallada, para que sea segura y no vuelva a afectar la salud de tu planta. El primer paso es retirarla y quitar la tierra infectada con moho blanco. Al mismo tiempo, lavar bien la maceta con agua tibia y jabón neutro.

Es recomendable agregar unas gotas de vinagre de manzana o una pizca de bicarbonato de sodio. Son productos que aportan propiedades desinfectantes.

Refregar la maceta con un trapo o cepillo para remover los restos de bacterias. Hacerlo también en su cara externa. Por último, enjuagarla bien y dejarla secar al sol durante algunas horas.

Identificar el moho blanco a tiempo

Si bien una pequeña capa de este hongo no perjudica la salud de tu planta, es importante revisarla con una frecuencia semanal. El moho blanco detectado a tiempo no presenta mayores inconvenientes, pero si se deja, se puede expandir con rapidez y dañar otras plantas cercanas.

Si la capa blanquecina es seca y quebradiza, es probable que se trate de restos de sales que la planta descarta del agua. En ese caso, se pueden retirar de manera sencilla con las manos.