8 errores que debes evitar al aromatizar tu hogar
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¿Alguna vez has entrado a un lugar que huele muy bien y de inmediato sientes que estás en un espacio agradable? O por el contrario, los lugares con malos olores te hacen querer huir. El sentido del olfato es muy potente e importante. Por eso, en este artículo te enseñaremos algunos consejos y errores que no debes cometer para aromatizar tu hogar.
Aunque no sea tan evidente, el aroma es un factor fundamental para crear un ambiente ameno. Pese a que no se vea, tal como sucede con la decoración y el mobiliario, afecta la forma en la que se perciben los lugares. De hecho, los aromas ayudan a cambiar la sensación y las emociones que se desarrollan.
A continuación te hablaremos de ciertos errores y comportamientos que debes evitar en el momento de aromatizar tu hogar. De esta forma, podrás tener más consciencia sobre esta realidad invisible.
1. No abrir las ventanas
Que en las casas entre aire fresco es fundamental y produce un cambio importante en el aire. Asimismo, permite que los olores que se encuentran dentro fluyan y no se retengan al interior de la vivienda, por ejemplo cuando se cocina.
Por ello es clave tener una rutina de abrir las ventanas, por lo menos 15 minutos al día. Asimismo, hay que asegurarse de que la casa tenga una buena ventilación general.
2. Descuidar los olores de la cocina
La cocina es un lugar que cambia de olor todo el día. De hecho, los aromas que de allí salen pueden ser deliciosos y abrir el apetito de quienes están en casa.
No obstante, también pueden convertirse en olores incómodos, en especial cuando duran más allá de la hora de la comida. Por lo tanto, es fundamental que el extractor funcione bien sobre la estufa.
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3. No hacer un buen manejo de las basuras
Es evidente que las basuras son una fuente de malos olores. Por lo tanto, hacer una gestión adecuada de ellas es fundamental para evitar que la casa huela mal.
Además, es clave para evitar la presencia de plagas o de malas condiciones de salubridad. Para ello es conveniente no dejar acumular mucha basura dentro de casa. Además, al hacer el manejo de los desechos orgánicos conviene recibir capacitaciones y usar los implementos adecuados.
4. Mezclar muchos olores
Es común que en una misma casa las personas tengan varios ambientadores. Sin embargo, esto puede resultar contraproducente, porque los espacios se pueden tornar difíciles de habitar si las fragancias se mezclan.
Asimismo, cuando se trata de darle olor a la vivienda, conviene utilizar fragancias que no sean muy dulces ni fuertes. De esta forma, se permite que el ambiente sea cómodo y no asfixiante. En especial cuando viven o visitan muchas personas el mismo hogar.
No obstante, también puede ser un error tener el mismo ambientador por muchos meses, pues con el tiempo se deja de percibir su fragancia. Es bueno variar, pero no mezclar.
5. Utilizar productos malos para la salud
Ciertos productos con fragancia tienen componentes nocivos para la salud. De hecho, varios de ellos pueden ser cancerígenos o agravar enfermedades como el asma.
Una investigación realizada por el Royal College of Physicians sobre el impacto de la contaminación del aire sobre los seres humanos indicó que ciertos elementos cotidianos para aromatizar (esencias, velas o varitas de incienso) son potenciales fuentes de polución en las viviendas. La razón es que cuando interactúan con otros elementos, como el fuego o el ozono, liberan tóxicos.
6. Descuidar a las mascotas
Los animales pueden desarrollar olores desagradables. Sin embargo, cuando estamos mucho tiempo percibiendo la misma fragancia, después tendemos a no sentirla.
De esta forma, las personas se acostumbran al olor de sus mascotas. No obstante, cuando alguien entra a casa puede notarlo.
En este sentido, hay que tener en cuenta que a las mascotas hay que bañarlas, limpiarles los dientes y las orejas y encargarse de que estén limpias. De hecho, estas acciones también garantizan mejor salud para el animal.
Asimismo, es necesario lavar con frecuencia sus juguetes, recipientes de alimento, cobijas y cama. Limpiar sus pelos de los lugares en donde queden acumulados, como los sofás, los tapetes o las camas, es imperativo.
7. Cubrir olores
Tratar de enmascarar un olor con otro es una decisión fatal. Si en tu casa tienes una fuente de mal olor, como una cañería averiada o humedad, lo que debes hacer es solucionar el problema de raíz. Si tratas de enmascarar un mal olor con un buen olor, la mezcla no será nada positiva.
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8. Olvidar limpiar los textiles
Por lo general, el aseo se hace sobre la superficie de los muebles y el piso. Sin embargo, con menos frecuencia se limpian los textiles que recubren los muebles o las cortinas.
Al igual que sucede con el resto de superficies del hogar, los tejidos también acumulan suciedad. En consecuencia, tendrán malos olores.
Elige el artefacto que mejor se adapte para aromatizar tu hogar
En el mercado existe una inmensa variedad de utensilios y artefactos para aromatizar tu hogar, así que puede resultar difícil elegir el mejor. Al momento de comprar, evalúa tu espacio, cuáles son las necesidades de tu familia y qué tipo de aromas son los preferidos.
De esta forma, si tienes zonas grandes y techos altos, necesitarás una herramienta que tenga gran potencia y no unos palitos de incienso. Por otro lado, si prefieres tener una vida amigable con el medio ambiente y cuidas tu salud con productos naturales, preferirás un difusor de aceites esenciales artesanales.
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