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La espirulina y sus propiedades

4 minutos
A la espirulina se le atribuye una serie de propiedades para la salud. En este artículo, te contamos si tienen base científica y cómo podrías incorporar la espirulina a tu dieta.
La espirulina y sus propiedades
Maricela Jiménez López

Revisado y aprobado por la médico Maricela Jiménez López

Última actualización: 24 mayo, 2023

Hemos oído hablar mucho de los beneficios de la espirulina, por ejemplo para subir las defensas, mejorar los trastornos cardiovasculares o prevenir múltiples enfermedades como el cáncer, pero ¿Qué tienen de cierto estas afirmaciones? ¿Realmente la espirulina cuenta con tantas propiedades para la salud?

A continuación te explicamos qué es la espirulina, cuáles son las propiedades que se le atribuyen y por qué. Además, compartimos tres recetas verdes y originales para incluirla en tu dieta sin apenas darte cuenta.

¿Qué es la espirulina?

La espirulina es un alga de agua dulce considerada un superalimento gracias a sus aportes nutricionales, ya que, según datos de U.S. Agriculture Department, cuenta con alto contenido en:

  • Proteínas.
  • Enzimas.
  • Clorofila.
  • Ácidos grasos esenciales.
  • Vitaminas (A, B, E y H).
  • Minerales (hierro, calcio, fósforo, magnesio…).

Es consumida desde la antigüedad por múltiples culturas y se suele recomendar especialmente a mujeres embarazadas, niños, deportistas y a todo el que quiera tomar un suplemento natural completo y sin contraindicaciones.

Beneficios para la salud

A continuación compartimos contigo los supuestos beneficios de la espirulina para la salud.

Según un artículo publicado en Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine, la espirulina:

  • Mejoraría las defensas al cubrir deficiencias nutricionales.
  • Tendría propiedades antiiflamatorias.
  • Ayudaría a combatir virus, según señalan diferentes estudios in vivo.
  • Sería útil para perder peso debido a su poder saciante. No hemos encontrado evidencia concluyente al respecto.
  • Ayudaría a prevenir el cáncer debido a su alto poder antioxidante. De hecho, algunos expertos han señalado en el pasado que ayudaría a destruir tumores. Esta información no ha sido comprobada, por ende se necesitan nuevos estudios.
  • Prevendría las enfermedades cardiovasculares, al reducir el colesterol en sangre y los triglicéridos y aumentar el colesterol bueno o HDL, según un estudio de larga data. Más investigaciones serían necesarias.
  • Se cree que aumentaría la vitalidad, por ende se recomienda para la fatiga. No obstante no hay datos concluyentes al respecto.
  • Su contenido en triptófano mejoraría los estados de ánimo como la depresión y la ansiedad

La espirulina puede consumirse en comprimidos, cápsulas o en polvo. Algunas personas la han dejado de tomar en polvo debido a su sabor, pero a continuación detallamos tres recetas para incluirla en la dieta de manera original y multiplicando así los beneficios de estos alimentos.

Consulta con tu médico antes de incluir la espirulina en tu dieta. Recuerda que los remedios naturales pueden actuar como un complemento del tratamiento recetado por un profesional pero de ninguna manera, como un tratamiento en sí mismos.

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Empieza el día con un batido verde

 

Los batidos verdes son famosos entre las personas que se alimentan principalmente a base de vegetales crudos. Aunque por su aspecto pueden causar rechazo, ya que no estamos acostumbrados a un batido dulce de color verde, lo cierto es que tienen un sabor delicioso. Además, sería una manera energética y saludable de empezar el día.

Con un batido diario nos aseguramos ya de mañana una buena dosis de vitaminas y minerales y, en poco tiempo, podemos notar una gran mejora en cuestiones de salud y belleza.

¿Qué ingredientes usaremos para 2 o 3 personas?

  • Una cucharada sopera de espirulina en polvo.
  • Un puñado de espinacas crudas.
  • Dos piezas de fruta: manzana, pera, fresa, plátano, etc.
  • Frutos secos molidos: almendra, avellana.
  • Frutas secas: dátiles, higos, orejones, coco.
  • Un vaso de líquido: zumo de naranja, agua, bebida vegetal.
  • Endulzante natural al gusto: sirope de agave, estevia, miel.
  • Una cucharada de aceite de lino o de sésamo.

Trituraremos bien los ingredientes hasta que quede un batido de textura homogénea, y a medida que vayamos tomando los batidos nos sorprenderá lo deliciosos que pueden ser con nuevos ingredientes. Idealmente deberíamos quitar cada vez más el endulzante e incrementar el vegetal verde.

Disfruta una sopa verde de cebolla

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La sopa de cebolla es un alimento tradicional a la que se atribuyen muchas propiedades. De hecho, muchas personas sostienen que sería un buen remedio para resfriados y gripes.

Sofreímos cebolla con aceite de oliva, ajos, una pizca de comino, una pizca de ají o cayena y sal al gusto. Cuando esté dorado le añadimos un caldo casero o comprado y lo dejamos hervir 15 minutos. Cuando esté a punto de finalizar le añadimos clara de huevo y vamos revolviendo bien.

Antes de servir, para que no pierda sus propiedades con el calor, añadimos la espirulina en polvo. También podemos añadir algunos trozos de pan tostado y frito.

Prepara una tortilla verde sin huevo

Hacer una tortilla sin huevo es posible, y la recomendamos especialmente para aquellos que no pueden comerlo. Sustituiremos el huevo por harina de garbanzo y de maíz a partes iguales que iremos batiendo con agua hasta conseguir una textura similar a la del huevo batido. A esta tortilla le añadiremos espirulina en polvo y un sofrito de verduras al gusto.

La espirulina, un alimento prometedor

A pesar de que muchas de sus propiedades no han podido ser evidenciadas hasta la fecha, la espirulina es un alimento que destaca por su elevado valor nutricional. En este sentido, puede incluirse en el contexto de una dieta equilibrada para mejorar así el aporte de muchos micronutrientes esenciales.


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