Estantes que puedes poner en tu biblioteca
Si eres amante de los libros, seguramente tengas en casa muchas estanterías repletas de ellos. Las bibliotecas les dan a las casas unos toques estupendos, aportan color, calidez y buen gusto. Hoy te proponemos ideas para renovar los estantes de tu casa. ¿Te interesaría descubrirlos?
Aunque es cierto que la era del libro digital es ya una realidad, aún quedan personas que disfrutan del tacto, del olor y la sensación de leer un buen libro en papel.
En este artículo te enseñamos cómo puedes darle una vuelta a tu biblioteca, ya que existen numerosas formas de transformarla para que sea más moderna, original y, al mismo tiempo, funcional. Lo importante es tenerla organizada para que encuentres con más facilidad los libros que busques en ese momento.
¡Elige las que más se adapten a tu estilo de casa y prueba a hacerlas! Son consejos sencillos que te permitirán disfrutar de tu espacio de lectura.
Ideas para hacer estantes en tu biblioteca
Muchas veces no tenemos el hueco que necesitamos en casa para organizar todas nuestras cosas, entre ellas, nuestros libros. Queremos proponerte espacios que quizá no hayas pensado que pudieran servirte para guardarlos y crear bibliotecas nuevas a base de estantes y de otros materiales.
1. Estantes en el salón
Los salones suelen tener huecos y espacios muertos que no llegamos a utilizar nunca. Por ello, te proponemos que en una esquina coloques unas baldas para poder apoyar los libros que quieras.
Aprovéchate de la arquitectura de la casa y de la construcción de las paredes para hacer muebles a medida. ¡Serán más originales y más bonitos!
Por otro lado, si tienes chimenea en el salón, aprovecha los huecos vacíos de pequeños tamaños. Estos son perfectos para colocar ahí nuestros libros. Puedes improvisar una biblioteca en un momento. Tan solo necesitarás unos estantes o baldas para que tengan un soporte.
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2. Estantes en el dormitorio
En los dormitorios también es muy común tener libros: no hay mayor placer que leer un buen libro antes de dormir plácidamente.
Si contamos con un armario empotrado, seguramente encontremos un hueco en la pared que se ha quedado sin uso. ¿Por qué no aprovecharlos para instalar unos estantes para guardar nuestros libros? Aunque no solo pueden sustentar los libros, también velas aromáticas, lámparas o un jarrón con una flor.
También, puedes crear un cabecero de libros y darles protagonismo a tus novelas de aventuras para que te acompañen en tus sueños.
3. Estantes en las habitaciones de los niños
Nada mejor que el hecho de que nuestros hijos se críen en un ambiente rodeado de cultura, libros, música y arte. Sus habitaciones tienen que tener un sitio especial donde poder desarrollar sus capacidades de la mejor manera posible.
Una idea es que coloques muchas estanterías y baldas en la habitación de los niños para que puedas almacenar todo lo que ellos necesitan: peluches, libros, juguetes, muñecas o pinturas son los accesorios imprescindibles.
4. Estantes en el baño
De igual modo, seguro que en tu baño encuentras ese espacio especial para que puedas depositar unos buenos libros. Aunque dependerá del gusto de cada uno, puede que si el baño es muy húmedo y no tiene buena ventilación, no sea recomendable dejarlos porque pueden estropearse con el tiempo.
Consejos para tener una buena biblioteca
- Reúne todos tus libros, límpialos y revisa su estado. Haz una selección de los que más te gusten o quédatelos todos. Sin embargo, no está de más donar los que ya no quieras.
- Aprovecha para limpiar las estanterías.
- Piensa cómo los quieres organizar, ya sea por temáticas, por autores, por orden alfabético o por los colores de las portadas.
- Haz un inventario de todos tus libros.
- Si tienes muchos libros, puedes añadir una banda identificativa en el dorso.
- Procura que el mueble o estante que utilices para guardarlos no quede tapado por otro mueble. Tienes que tener fácil acceso a tus libros.
- Una vez meditada la idea que quieres llevar a cabo, hazla realidad.
Los libros son piezas preciadas por los lectores, por lo que hay que tener cierto tipo de cuidado para mantenerlos en buenas condiciones. Para ello, se debe evitar que el sol incida sobre ellos durante un periodo de tiempo muy largo.
La luz hace que las portadas varíen en tonalidades. Por otro lado, límpialos del polvo de manera regular. Evita que haya humo u olores muy fuertes cerca de ellos, como por ejemplo el humo del tabaco, ya que hará que ese olor se impregne en sus páginas.
Además, evita que se humedezcan y ventila de vez en cuando tu casa para que los libros respiren. Y, por último, disfruta de la lectura siempre que puedas.
Estas son algunas de nuestras ideas. Con estantes colocados en sitios que quizá no hubieras imaginado puedes hacer pequeñas bibliotecas en casa. Ahora es tu turno, piensa qué hueco puedes alimentar con novelas y ¡a leer!
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