Aspectos legales sobre los deportes extremos

No es posible encontrar, de momento, una legislación clara aplicable a los deportes extremos. Será necesario entender una serie de variables y, además, contemplarlas país por país.
Aspectos legales sobre los deportes extremos

Última actualización: 30 mayo, 2023

¿Cuál es la legalidad en los deportes extremos? En la práctica, no es sencillo encontrar una legislación aplicable al cien por cien. Aquí entran en juego leyes, reglamentos, empresas, países, asociaciones y un conglomerado de factores difíciles de entender.

En realidad, podríamos decir que la mayoría de estas prácticas alternativas no son consideradas por muchos como ‘deporte’. La complejidad de este tema aumenta según la realidad de cada actividad.

Por ejemplo, el skateboarding apenas fue reconocido por el Comité Olímpico Internacional en el año 2016. Claro que, para los practicantes de cada disciplina, tener una normativa aplicable es un objetivo importante que se busca conseguir.

¿Qué se considera deporte?

La conceptualización de lo deportivo es un primer obstáculo en el caso de los deportes extremos. La Real Academia Española define el ‘deporte’, como cualquier cualquier actividad física reglamentada. Este concepto es compartido por las organizaciones deportivas nacionales e internacionales del mundo.

Por su parte, la Carta Europea del Deporte enfatiza que las actividades deportivas generan mejoras en la condición física y mental.

Claro que todas las actividades deportivas suelen pasar por este duro proceso de institucionalización. Es así como los conceptos tradicionales suelen ser una dificultad para los deportistas extremos.

Una actividad física extrema puede considerarse ‘deporte’ entre sus seguidores mediante su popularización. Sin embargo, muchas veces, su práctica va en contra de los conceptos, estándares y reglamentos de las disciplinas tradicionales; a esto debemos sumar también las leyes de cada nación.

Los primeros pasos de los deportes extremos

Muchas prácticas deportivas nacen sin apenas tener un reglamento. El solo hecho de comenzar la elaboración de este documento puede ser problemático: cada actividad se hace a su forma en cada país. La necesidad de institucionalización de un deporte es lo que lleva a sus practicantes a formar asociaciones nacionales.

El canotaje en aguas bravas demanda ciertas medidas de seguridad.

Podemos ver este proceso cuando estudiamos prácticas como el salto de base. En España existe la Asociación Española de Salto Base, que congrega a sus practicantes. A la par, también comienzan a organizarse los primeros eventos y competiciones internacionales.

En el caso de los deportes extremos, existen empresas que se encargan de guiar a clientes en cada disciplina. Esto ocurre mucho, por ejemplo, con el paracaidismo; los emprendimientos que se encargan de esto deben tener en cuenta un conjunto de normativas diferentes en cada país.

Las empresas de deportes extremos

Las leyes nacionales suelen establecer condiciones para la seguridad de las personas y consumidores. En el caso de los deportes extremos, las exigencias de seguridad suelen implicar gastos extraordinarios.

El pago de seguros médicos especiales, contar con personal capacitado e implementos de seguridad implica una inversión sustanciosa. Esto significa una elevación del 20 o 30 % de capital, en comparación a casi cualquier negocio tradicional.

Los materiales y el equipamiento juegan un papel central dentro de muchos deportes extremos. Por lo general, la reglamentación mínima de estos establece cómo deben ser los accesorios de protección práctica. En el caso de las empresas, estas deben utilizar implementos homologados y en buen estado.

Estableciendo responsabilidades

Otro aspecto fundamental tiene que ver con el establecimiento de responsabilidades en caso de accidentes. Por lo general, las empresas dedicadas a deportes de alto riesgo preparan contratos en los que responsabilizan al propio cliente. En otros casos, utilizan figuras jurídicas y laborales para conciliar el negocio con las leyes.

No obstante, no en todas las situaciones la responsabilidad es sencillamente del personal o del cliente. Cada deceso o accidente por estas disciplinas implica, de igual forma, una investigación penal.

Otro aspecto a considerar tiene que ver con las diferencias que existen entre las leyes de cada país. Por eso, las asociaciones y empresas que fomentan y trabajan con deportes de alto riesgo deben estar constantemente actualizadas. Si un ente gubernamental prohíbe hacer saltos en determinada zona, los deportistas y las empresas deben estar al tanto.

Estatus de algunos deportes extremos en España

En la actualidad, este es el cuadro de situación de algunas de estas disciplinas en España:

  • Salto Base: existe una asociación de sus practicantes y en el país se han celebrado incluso campeonatos mundiales. No obstante, se exige el cumplimiento de paramentos de seguridad y legislaciones de protección. El Estado regula los sitios en donde es peligroso realizar los saltos.
El salto de base es, sin dudas, uno de los deportes menos seguros.
  • Deportes de nieve: en España, existen estaciones especiales para la práctica del esquí y el snowboarding, entre otros. Estas tienen una reglamentación de funcionamiento.
  • Senderismo: hay una legislación aplicada a los senderos y el senderismo. También existe el Comité de Senderos de la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada.

Como vemos, hay una gran variedad de preceptos y criterios diferentes a la hora de considerar los aspectos legales sobre los deportes extremos. Sin dudas, se trata de un campo en el que los especialistas y los gobiernos todavía tienen que poner más atención, para proteger así a quienes deciden experimentar con estas apasionantes actividades.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.