Principales causas de las lesiones al correr
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El running se encuentra en pleno auge y pese a ser un ejercicio muy sano en general, es cierto que pueden aparecer numerosas lesiones al correr. A continuación, vamos a analizar por qué se producen estas patologías que pueden alejarte de la práctica deportiva a mediano plazo. Al conocer las principales causas, también te resultará más sencillo saber cuáles son las mejores maneras de prevenirlas.
Exceso o sobreentrenamiento
Como con cualquier deporte o ejercicio físico, la primera causa de lesiones al correr es hacerlo de manera excesiva y sin una planificación progresiva.
Desde todo punto de vista, correr es bueno para la salud. Es que tenemos todos los beneficios de caminar, pero además trabajamos el sistema cardiovascular de una manera más intensa. Así, por una parte, ayudamos a prevenir enfermedades relacionadas con la circulación. Y por la otra, al trabajar más a los músculos, fortalecemos grandes segmentos corporales ganando resistencia física.
Sin embargo, el problema, como la propia palabra indica, es cuando hacemos una actividad que genera una carga excesiva en el organismo, sostenida en el tiempo. En este caso, el sobreentrenamiento puede referirse a dos situaciones:
En primer lugar, correr más de lo que nuestro cuerpo está acostumbrado. Es decir, queremos empezar a correr y al primer día ya intentamos progresar varios kilómetros sin parar. O llevamos un tiempo corriendo, pero la confianza juega una mala pasada e intentamos hacer una distancia mucho mayor de la que hemos hecho hasta la fecha. El consejo siempre es el mismo y consiste en aumentar la carga gradualmente. Nuestro cuerpo se tiene que acostumbrar poco a poco como forma de adaptación al estímulo físico. Si no le damos ese tiempo, los problemas musculares, articulares y (sobre todo) tendinosos, entre otros, no tardarán en aparecer.
En segundo punto, dedicar una vida a correr largas distancias. Querer correr maratones durante muchos años es un objetivo loable, pero debes saber que lo más probable es que tenga consecuencias a largo plazo. Incluso en cortos tiempos, lo más seguro es que sufras algún problema relacionado con las contracturas, alguna tendinitis o lesiones de ese tipo debido a la sobrecarga articular. Simplemente, debes aceptar que si te dedicas exclusivamente a correr largas distancias todos los días, te estás exponiendo a una gran variedad de lesiones.
Correr sobre terreno duro
Volvemos al supuesto anterior. Correr por la calle no es malo por sí mismo. Pero, si nos dedicamos a ello y siempre salimos a cubrir kilómetros sobre asfalto, todos los días, durante meses y años, esto aumentará el riesgo de lesión.
Si es el único deporte que te gusta y quieres salir a correr cuatro o cinco veces por semana, debes encontrar la manera de hacerlo sobre un terreno que absorba parte del impacto. De lo contrario, la carga la absorberá el componente articular con todo los riesgos que ello conlleva. En efecto, procura buscar una zona de césped, una pista de atletismo, correr por la playa para que el suelo sea un aliado a la hora de la prevención de lesiones.
Material deportivo inadecuado
Esta es una causa común a muchas lesiones, y en este caso tiene un culpable muy claro: las zapatillas. De nuevo, lo primero que hay que recordar es que si corres esporádicamente, mientras sean zapatillas deportivas, no tendrás mayores problemas. Salir una vez o dos por semana entre media hora y una hora no nos causará inconvenientes físicos. Pero, si vamos a salir tres veces o más por semana más de una hora, nuestras articulaciones y tejidos blandos van a sufrir demasiado.
En este segundo caso necesitamos asegurarnos de utilizar un calzado deportivo adecuado. Debe absorber parte del impacto, ajustarse bien al pie y seguir el movimiento del mismo en todo el recorrido. Para comprobar esto último, si cogemos la zapatilla, la suela debe poderse doblar de tal forma que la punta casi toque el talón. Si la suela es rígida y no se dobla bien, la calidad es peor.
Patologías estructurales
Como causa final en este artículo vale la pena mencionar un apunte sobre la importancia de hacerse un examen biomecánico. Tener una pisada incorrecta significará que, aunque tengamos la mejor zapatilla del mundo y corramos siempre sobre blando, nos lesionaremos. Si una pierna es más larga que la otra, también. Si tenemos un poco de escoliosis, las probabilidades de lesión serán más elevadas. Incluso si la técnica de correr es incorrecta, debemos saberlo antes de empezar a entrenar de manera frecuente.
Hay que tener cuidado con las lesiones al correr
De todo lo anterior se desprende que si vas a correr de una manera seria debes tener en cuenta muchos aspectos para evitar lesiones. Es decir, si tienes objetivos importantes y vas a entrenar con una alta frecuencia, debes asegurarte de hacerlo bien antes de comenzar.
Para prevenir lesiones es realmente valioso que analices tu pisada y tu marcha. Consulta con el especialista con el que te hagas este examen sobre qué zapatillas comprar de acuerdo a tu pie. Y busca un lugar apto para realizar actividad física para no correr siempre sobre asfalto. También es recomendable hacer otro tipo de deporte para no estar exclusivamente machacando el tobillo, la rodilla y la cadera. Incluso se ha demostrado que mezclar tai-chi y correr es positivo para la salud.
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