Autoconocimiento: ¿por qué conocerte mejora tu entrenamiento?
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Una de las tareas que potencia el entrenamiento deportivo es el autoconocimiento. La capacidad de saber reconocer las fortalezas y debilidades de uno mismo se relaciona muy estrechamente con el éxito deportivo.
Muchos deportistas creen que se conocen en profundidad, cuando en realidad lo único que hacen es poner su atención en la carencia o en la debilidad. Conocerse implica adoptar una visión holística de uno mismo, sabiendo reconocer los aspectos buenos y malos en las diferentes facetas vitales. Y es más, también la visión integral implica que la persona es más que la suma de las partes que la componen.
Un ejercicio tan sencillo como puede ser definirse a uno mismo a veces supone un gran esfuerzo para los deportistas. Esto refleja una falta de habilidades de autoconocimiento. Si a ti como deportista se ocurre, este artículo te interesa, pues a continuación veremos por qué el autoconocimiento mejora el entrenamiento.
Permite establecer objetivos más realistas
El establecimiento de objetivos es una técnica indispensable para cualquier deportista, pero no siempre se realiza adecuadamente. Por ello, una de las ventajas más salientes del autoconocimiento en el entrenamiento es que permite establecer objetivos más realistas, y, por tanto, aumenta las probabilidades de conseguirlos.
A través de conocerse a uno mismo el deportista puede detectar qué es aquello que necesita potenciar. Y no solo eso, sino que dentro de todo aquello que necesita mejorar puede establecer diferentes prioridades, desde lo más urgente hasta lo más secundario.
Por otro lado, también el ejercicio consiste en detectar las fortalezas. De esta manera, se pueden programar sesiones o ejercicios para potenciarlos y saber cuándo aplicarlos para tener un mejor rendimiento. Cuando los objetivos se establecen siguiendo una estrategia, el trabajo efectuado será más eficiente.
Ayuda a relativizar los malos momentos
En el deporte, como en la vida, existen los buenos y los malos momentos. Los buenos momentos se celebran y se saben delimitar bien, sin embargo, muchos deportistas encuentran problemas para desengancharse de los malos momentos, dándoles más importancia de la que a priori tienen.
El saber relativizar es una tarea estrechamente relacionada con la flexibilidad mental que consiste en darle a cada acontecimiento su justa importancia, evitando engancharse en aquellas cosas que son motivo de preocupación. No es tarea sencilla, pues es una tendencia general el rumiar sobre lo negativo, pero que se puede conseguir gracias al autoconocimiento.
El deportista que se conoce a sí mismo no duda de sus capacidades, a pesar de que a veces las cosas no salen según lo que esperaba. Cuando aparece un mal momento no se deja llevar por las dudas y el autodesprecio, sino que es capaz de aceptar el fallo y sigue trabajando para corregirlo. En este sentido, el conocerse a uno mismo es una de las mejores decisiones que se pueden tomar para superar los malos momentos.
Organizarse mejor siguiendo una estrategia personal
La forma de concebir los entrenamientos ha cambiado en los últimos años. Antes se entendía como un mismo método para todos los deportistas, esperando que se consiguiesen resultados parecidos. Hoy en día se sabe que cada persona es un mundo, y, por tanto, la tendencia se dirige más a diversificar o personalizar los entrenamientos.
Este punto de vista más acertado va muy de la mano del autoconocimiento. Si el deportista se explora en profundidad sabrá como hacer sus entrenamientos más dirigidos a potenciar sus puntos fuertes y suplir los débiles.
Lo anterior también implica que hay que abrazar la diferencia. La comparación con otros deportistas no tiene sentido, pues en lo que uno es bueno es algo concreto y específico. Cada persona es valiosa con sus virtudes y defectos.
El autoconocimiento es un pilar fundamental de la mejora
El astrónomo italiano Galileo Galilei decía: “conocerse a uno mismo es el mayor de los saberes”, y la verdad es que no podía tener más razón. Ya sea en el deporte o en la vida en general, el autoconocimiento es una de las mejores virtudes que puede tener una persona.
Hasta aquí solo hemos hablado cómo el autoconocimiento mejora el entrenamiento, pero hay otros beneficios añadidos. Según un estudio de la Universidad Pedagógica Nacional de México, el autoconocimiento influye de manera positiva en la confianza del deportista. Esto es, aquellos atletas que le dedican más tiempo a conocerse a sí mismos también tienen una confianza más alta.
Con todo esto, no podemos recomendarte más la práctica del autoconocimiento, seguramente en ese proceso descubras cosas asombrosas de ti mismo que antes pasabas por alto.
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