Efecto de la música en el deporte
Escuchar música es un potente estimulante que aumenta el rendimiento en el deporte. No solo en el ámbito deportivo, cuando se escucha música el cerebro libera sustancias que elevan el estado de ánimo e inducen sensaciones de bienestar.
La música tiene efectos ergogénicos en el rendimiento deportivo. Esto significa que permite al deportista realizar más trabajo físico del que sería posible sin su ayuda.
Asimismo, escuchar música durante el entrenamiento influye positivamente en otras variables psicológicas como la motivación. Aun así hay que destacar que este efecto no permite superar las capacidades fisiológicas de cada uno, pero sin dudas que ayuda.
La relación entre música y deporte ha interesado mucho a los psicólogos. Se ha estudiado el efecto que tienen en el rendimiento deportivo diferentes tipos de música. Además, se evaluó en diversas oportunidades si estos efectos se aplican a un solo tipo de ejercicio o si aparecen en la actividad física en general.
Efectos de la música en el deporte aeróbico
Durante el ejercicio aeróbico, la demanda se produce sobre todo en el sistema cardiovascular. Ejemplos de ejercicios aeróbicos serían correr, nadar o montar en bici.
En primer lugar, la música puede actuar como distractor mientras se realiza ejercicio aeróbico, con lo que disminuiría la sensación de fatiga. Esto es debido a que la mente se centra en el ritmo o la letra de la canción, y no en las sensaciones físicas desagradables cuando se realiza un esfuerzo físico intenso.
En un estudio realizado con ciclistas publicado en la Revista Internacional de Medicina Deportiva se descubrió que la velocidad y la cadencia de pedaleo en una prueba contrarreloj fueron mayores en aquellos ciclistas que realizaron la prueba escuchando música.
Estos hallazgos son importantes para entrenadores y preparadores físicos. Teniendo en cuenta que la música puede disminuir la sensación de fatiga y hacer que el deportista sea más veloz, es positivo incorporar de alguna manera este componente en los entrenamientos para optimizarlos.
Efectos de la música en el rendimiento en el ejercicio anaeróbico
El principal ejemplo de ejercicio anaeróbico es el entrenamiento de fuerza. Ya sea levantando pesas o trabajando con el propio peso corporal, se produce un intenso trabajo en los músculos y articulaciones.
En un estudio similar realizado por la Universidad de Kansas, la capacidad anaeróbica, medida con el Test de Wintage, fue mayor en el caso de aquellas personas que escucharon música en comparación con las que escucharon un ruido blanco.
Por último, el efecto ergogénico de la música no solo es capaz de aumentar la fuerza, sino también afecta a la resistencia muscular. Según un estudio publicado en la Revista de Habilidades Motrices y Perceptivas , las personas que escucharon música durante una tarea de resistencia muscular aguantaron mayor tiempo en comparación con las que no escucharon nada.
Escuchar música aumenta el rendimiento deportivo
Resulta increíble cómo con un pequeño gesto como escuchar música el rendimiento deportivo se ve beneficiado. No existe acuerdo, sin embargo, sobre los mecanismos por los cuales se produce este fenómeno. Los psicólogos se han centrado más en estudiar la relación que en las causas subyacentes.
No obstante, es importante tener en cuenta que no todos los géneros musicales funcionan. El aumento de la potencia aeróbica y la fuerza se produce principalmente al escuchar música vigorosa. Es poco probable que la música tranquila provoque un incremento en las capacidades físicas.
Por último, cabe mencionar otros beneficios de la música en el deporte a nivel psicológico: mejora el estado de ánimo, reduce el estrés y aumenta la motivación para realizar un esfuerzo físico. ¡Pon tu canción de rock favorita la próxima vez que entrenes y compara los resultados!
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