4 tipos de sensaciones y qué información captan en el deporte
Conocer los tipos de sensaciones y la información que captan es una enseñanza muy importante en el deporte. Las sensaciones tienen una doble función, por un lado, informan y a la vez comunican un mensaje que la persona debe saber comprender para responder de manera adecuada.
Es una práctica habitual que los deportistas ignoran sus propias sensaciones pensando que no tienen mayor importancia. Sin embargo, hacer esto puede ser peligroso, por ejemplo ignorar el dolor es la antesala para sufrir una lesión.
La conciencia sensorial es una habilidad que poco a poco se va desarrollando. Para ello el primer paso es poder identificar las sensaciones de manera correcta, y distinguir unas de otras. Por tanto, a continuación veremos qué tipos de sensaciones existen y qué información dan en el deporte.
1. Incomodidad
En lo que se refiere a diferenciar las sensaciones positivas y negativas, estas últimas llaman más la atención a los deportistas. Como resultado, es posible utilizar este poder como punto de partida para aprender a detectar los mensajes de las sensaciones.
La incomodidad es una sensación muy común en el deporte, de hecho aparece en casi todos los entrenamientos. Es algo inherente a cualquier disciplina, ya que implica forzar el cuerpo o sacarlo de su estado de reposo para hacer una actividad que termina cansando. Aun así, que sea algo propio de la actividad física no significa que en todos los casos sea inofensiva.
La incomodidad también puede referirse a sentir que algo no va bien, o que lo que es fatiga normal deja de serlo para convertirse en señal de peligro. En cualquiera de estos dos casos hay que responder a la incomodidad parando la actividad tan pronto como aparezca. Ignorar esta sensación no hará que se resuelva por sí sola, sino que irá en aumento.
2. Dolor o tensión muscular
Una de las sensaciones con un mensaje más potente es el dolor o la tensión muscular. El mensaje en este caso es inequívoco, avisar al deportista que está en riesgo de sufrir una lesión inminente. No obstante, muchos deportistas hacen caso omiso de este mensaje hasta que el presagio se acaba cumpliendo.
El dolor es una sensación provocada por múltiples causas. Puede ser por fatigar al músculo demasiado, por repetir mucho un mismo gesto, por empezar la actividad física sin calentar… independientemente de su causa el resultado siempre será el mismo, un parón temporal en el entrenamiento.
El problema con la sensación de dolor en el deporte es que, según un artículo publicado en la Revista Ars Brevis, es que muchos atletas la experimentan como algo reforzante. Es decir, equiparan al dolor con el progreso, o incluso disfrutan esa sensación, por lo que les cuesta cesar la actividad física.
3. Concentración o estar centrado
Hasta ahora solo hemos mencionado sensaciones negativas en el deporte, pero también existen aquellas que potencian el rendimiento deportivo. Entre estas, cabe destacar las sensaciones que el deportista experimenta cuando está centrado en la actividad física.
Cuando un deportista está concentrado siente un estado mental que es muy identificable. Su mente está despejada, puede tomar decisiones rápidamente y trabaja de manera eficiente. Llegar a este estado no tiene mucha dificultad, pero no es cuestión solo de voluntad. Hacer un calentamiento mental es clave para hacer que la mente entre en calor.
4. Empatía
Un aspecto interesante de las sensaciones es que no es algo que se limite a la vida individual, sino que hay sensaciones que se experimentan en la colectividad. Este es el caso de la empatía, o los sentimientos que se despiertan en interacción con otras personas.
La empatía es la capacidad de poder leer los sentimientos de los demás y saber regularlos eficientemente. Cobra mucha importancia en los deportes de equipo, aunque en lo individual también tiene su utilidad, por ejemplo leer el estado mental de un rival.
Aprende a leer las sensaciones para tener un mejor rendimiento
En el deporte existe un lenguaje especial que, aunque no utilice palabras, transmite un mensaje muy claro. Este lenguaje es el que hablan las sensaciones.
Sensación y emoción son dos palabras que van de la mano. Las emociones dan lugar a sensaciones corporales, y, por otro lado, la lectura de ellas da lugar a diferentes estados emocionales. De lo anterior se deduce que las emociones son algo inevitable en cualquier deporte, por lo que tratar de evitarlas no hace bien a la persona.
Con todo esto, el mejor ejercicio que podemos recomendarte es el hábito de reflexionar qué se está sintiendo, y no solo importa el qué, también el dónde se ubica la sensación.
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- Turró Ortega, G. (2004). Algunas consideraciones en torno al deporte, el placer y el dolor. Ars Brevis, 2004, Núm. 10.