Garbanzos con calamares: receta sencilla y saludable
La receta de garbanzos con calamares consigue aportar nutrientes esenciales de gran calidad, por lo que está recomendada en el contexto de una dieta saludable. Es importante introducir productos del mar con cierta frecuencia. También las legumbres son aconsejadas por los expertos.
Lo que hay que tener en cuenta es que uno de los pilares de la dieta saludable es la variedad. Cuanto mayor sea el espectro de alimentos introducidos, mejor. Así se reduce el riesgo de presentar déficits de nutrientes esenciales, lo que puede condicionar el buen funcionamiento del organismo.
Garbanzos con calamares
Antes de introducirnos de lleno en la preparación de la receta vamos a hablar de algunos de los beneficios derivados de su consumo. En primer lugar hay que destacar lo positivo que resulta consumir legumbres con regularidad. Estos productos aportan carbohidratos de la más alta calidad.
Además, los garbanzos se caracterizan por la presencia de fibra en su interior. Dicha sustancia consigue modular el apetito, reduciéndolo. Así lo evidencia un estudio publicado en la revista European Journal of Clinical Nutrition. De este modo, es más sencillo plantear un plan hipocalórico que permita un control efectivo del peso corporal.
Por otra parte, las legumbres destacan por su concentración en micronutrientes. De entre todos ellos sobresale el hierro, ya que es un elemento clave para prevenir la anemia. De todos modos, su absorción es limitada. Más si se ingiere con fibra. Por este motivo, se recomienda su consumo junto a vitamina C para potenciar su disponibilidad, según una investigación publicada en JAMA.
De los calamares se puede remarcar la presencia de proteínas de alto valor biológico. Dichos nutrientes son indispensables para la correcta recuperación de los tejidos.
Además, la mayor parte de los productos marinos aporta una ración significativa de yodo. Este mineral interviene de forma determinante en la fisiología de la glándula tiroides. Así lo confirma un artículo publicado en la revista Biological Trace Element Research.
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Ingredientes
- 2 patatas.
- Vinagre de Módena.
- 300 gramos de garbanzos.
- Aceite de oliva virgen extra.
- 1/2 kilo de calamares limpios.
- Condimentos: laurel, orégano, sal, perejil, ajo en polvo, azafrán.
Paso a paso
Hay que comenzar poniendo los garbanzos en remojo durante 24 horas. La otra opción es comprarlos ya en conserva con el proceso de cocción listo.
Una vez superado el remojo se introducirán las legumbres en una olla exprés durante 15 o 20 minutos desde el momento en el que la válvula sube. A partir de aquí se reservan los garbanzos.
En paralelo se cortan los calamares en trozos medianos y se sazonan, para posteriormente saltearlos en una olla con aceite de oliva virgen extra. Cuando empiezan a coger color se echan los garbanzos, un par de hojas de laurel, ajo al gusto, una pizca de azafrán y un par de cucharadas de vinagre.
Por encima se vierte el caldo de la cocción de los garbanzos hasta que se cubra el contenido de la olla. Se pelan las patatas y se cortan en trozos pequeños, introduciéndolas también en el recipiente de cocción. Se cierra la olla exprés y se cocina unos 4 minutos desde el momento en el que sube la válvula. En el caso de cocinar en olla tradicional se precisará media hora más de cocción.
Una vez que pase el tiempo, los garbanzos con calamares estarán listos para su consumo. Funcionan bien como plato único, ya que aportan una buena cantidad de nutrientes. También se pueden comer como segundo plato, planteando un entrante de verduras.
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Prepara garbanzos con calamares
Preparar garbanzos con calamares es sencillo. Se trata de una combinación muy nutritiva que no llevará mucho tiempo si se dispone de una olla exprés.
Además, siempre existe la opción de comprar los garbanzos ya cocidos y en conserva. En este caso habrán de incorporarse al final del proceso de cocción, dejando todo el contenido a fuego lento durante unos 5 minutos para que se integren los sabores.
Recuerda que la inclusión de legumbres y de productos procedentes del mar en la dieta está recomendada. Es bueno que al menos un par de veces por semana se consuman estos alimentos.
Por último, ten en cuenta que los calamares se pueden intercambiar por otros alimentos similares, como las sepias, los chocos o los chipirones. Se modificará ligeramente el sabor del resultado final, pero el proceso es el mismo, salvando el hecho de que las piezas más pequeñas requieren una cocción más corta.
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