Hija se molesta con su madre por haber tenido gemelos a sus 59 años y además no le deja ver a su nieta

Es una realidad que una gran cantidad de personas esperan encontrar el amor de sus vidas a cualquier edad y tener hijos con aquel ser que les hace sentir un bienestar inigualable. Pues quieren contar con compañías que los amen y los hagan felices para el resto de la vida.

La mayoría cree que la llegada de un nuevo ser es una de las mejores alegrías para todos los miembros de una familia. Sin embargo, lastimosamente, la situación no es así en todos los casos.

Esto, debido a que hay personas que permiten que los celos se apoderen de ellas y no aceptan el nacimiento de otros niños. Por lo tanto, toman decisiones drásticas y deciden romper los vínculos familiares.

Tal como lo hizo una hija que no quiso saber nunca más de su madre después de que ella tuvo dos hijos más en su nuevo matrimonio. En este artículo te compartimos todos los detalles de esta historia.

El instante en el que la madre volvió a encontrar el amor

Lauren Cohen es una mujer que se enamoró cuando era joven, se casó con esa persona y tuvo la fortuna de traer una hija al mundo a causa de ese amor. Sin embargo, con el paso del tiempo la relación se deterioró y concluyó para siempre.

No obstante, ella siguió adelante con su hija y le brindó un amor de calidad día tras días. Además, nunca perdió la esperanza de encontrar a una pareja que la quisiera para el resto de la vida.

Debido a ello, a sus 50 años conoció el alma gemela que tanto estaba anhelando. Un hombre llamó su atención en una clase de baile que se estaba llevando a cabo en New Jersey.

Por tal razón, ella lo sacó a bailar y el enamoramiento fue inmediato, a pesar de que él era 20 años menor. A raíz de esa situación, siguieron haciendo muchos más planes y con el tiempo tomaron la decisión de formalizar la relación.

Así mismo, desde el primer instante ambos tenían el sueño de tener hijos y conformar una gran familia. La edad de Lauren no era un impedimento porque estaban dispuestos a asistir a especialistas que los ayudaran.

Fue así como acudieron a una gran cantidad de hospitales, pero muchos les cerraron las puertas. Sin embargo, una clínica de Virginia (Estados Unidos) los apoyó desde el 2004 y la pareja logró tener a una hermosa niña que llamaron Raquel. Pero para sorpresa de todos, Lauren y Frank García —el esposo— tendrían la dicha de tener 2 hijos más en 2006.

El nacimiento de los gemelos

Lauren volvió a quedar en embarazo a sus 59 años y dio a luz a 2 gemelos llamados Giselle y Gregory. Por tal motivo, su alegría fue inmensa al poder volver a ser mamá a esa edad.

En consecuencia, pensó que toda su familia iba a sentir la misma felicidad. Por tal razón, le compartió la noticia con mucho agrado a su hija del primer matrimonio —la cual tenía 32 años en ese entonces—.

No obstante, en ese momento se enojó por la llegada de los 2 gemelos y le dijo que no quería saber nunca más de ella. De igual manera, le manifestó que jamás le permitiría volver a ver a su nieta Hannah.

En vista de esa inesperada reacción, Lauren sintió un profundo dolor en su corazón. Puessu intención era agrandar la familia y no perder a ningún hijo.

Sin embargo, nunca se arrepintió de haberse casado con Frank y de haber tenido otros 3 hijos. Entendió que no había hecho nada malo, que sus intenciones no eran las de excluir a nadie y que tenía derecho a cumplir sus sueños.

Por lo tanto, ese núcleo familiar se ha encargado de brindarle mucha fortaleza y de hacerla muy feliz. Además, de llenarla de motivación para seguir adelante día tras día.

Desde la redacción de Mejor Con Salud deseamos que Lauren y su hija puedan aclarar la situación en el futuro y se recuerden todo lo que se aman.

Reflexión final

Esta historia demuestra que las emociones negativas pueden causar que las personas pierdan a sus seres más queridos si no saben gestionarlas. A causa de ello, es fundamental que nadie deje progresar estos sentimientos para prevenir conflictos que solo terminan en fuertes heridas emocionales. Por eso, recuerda: ¡siempre estás a tiempo!