El impresionante físico de Adama Traoré: así logró transformar su cuerpo

Lejos de ser un futbolista lento, Adama Traoré es muy veloz y potente pese a su gran volumen muscular. Te contamos de qué forma ha logrado el cambio físico que mostró en los últimos 7 años.

Revisado y aprobado por el médico Leonardo Biolatto.

Escrito por Fernando Clementin

Última actualización: 10 julio, 2023

Al ver a Adama Traoré en el campo de juego, resulta llamativa la diferencia con sus contrincantes y compañeros en cuanto a contextura. El impresionante físico que posee se basa, por supuesto, en un entrenamiento y una dieta enfocados en ello.

Los futbolistas más fuertes físicamente suelen jugar en la defensa o, en su defecto, de delanteros centro. Esto les permite ir al choque y recuperar o proteger el balón, según sea necesario, sin sufrir las consecuencias.

Pero Traoré no juega en ninguna de estas posiciones, sino que se desempeña como extremo por las bandas. Y pese a su gran porte físico, es un jugador muy desequilibrante y casi imparable en velocidad.

¿Cómo logró Adama Traoré su impresionante físico?

Probablemente, la genética favorezca a Adama Traoré para la transformación física que el jugador ha tenido desde su debut con el FC Barcelona en 2015. Desde entonces, a medida que pasó por el Aston Villa, el Middlesbrough y el Wolverhampton, su musculatura aumentó muchísimo. Al regresar al Barça en 2022, ya no era ese joven flaco y alto que se había marchado.

Más allá de los genes, el entrenamiento que siguió el jugador en este tiempo también tuvo que ver para que su cuerpo cambiara. A continuación, detallaremos las claves que llevaron al impresionante físico que Adama Traoré posee en la actualidad.

Entrenamiento exigente, pero sin pesas

En una entrevista, Adama Traoré contó que no hace ejercicios con pesas en el gimnasio. El jugador explicó que su genética hace que su musculatura crezca de la manera que lo hace.

El español apela más bien a entrenamientos con el propio peso corporal para mejorar su agilidad, explosividad y potencia, según contó su preparador físico personal, Nacho Villalba. La predominancia de fibras blancas en sus músculos genera un mayor volumen, sin necesidad de hacer trabajos aislados para cada músculo en el gimnasio.

Uno de los elementos que ayudan a Adama Traoré en sus entrenos son las cintas elásticas. Aunque parezcan básicas, estas son capaces de ofrecer una resistencia de hasta 50 kilos y resultan ideales para trabajar el tren inferior.

Asimismo, se basa en máquinas de entrenamiento isoinercial, que resultan igual o más demandantes que las máquinas tradicionales. Estas sirven para trabajar tanto la contracción como el estiramiento del músculo.

De una forma u otra, Traoré genera la suficiente tensión muscular a través del ejercicio para provocar la rotura de fibras en sus músculos. Estos, al reconstruirse tras el ejercicio, se adaptan para soportar esos estímulos y conllevan a la hipertrofia.

Otros futbolistas recurren al gimnasio

El entrenamiento físico de Adama Traoré lo diferencia del que llevan otros futbolistas, como Cristiano Ronaldo. El portugués sí hace trabajos de fuerza para potenciar su musculatura y es uno de los futbolistas que goza de un físico privilegiado en la actualidad.

Lo mismo que Ronaldo hace Leon Goretzka, un futbolista alemán que en 2020 tuvo una transformación muy parecida a la que experimentó Traoré. Los 3 tuvieron éxito al adaptar su rutina de entrenamiento a las particularidades de su organismo para conseguir el objetivo.

La dieta no puede faltar para la transformación física

Todo entrenamiento que se realice, sea para ganar músculo, bajar de peso o tonificar el cuerpo, debe ser acompañado con una dieta acorde. En los años en los que Traoré priorizó el desarrollo de su masa muscular, las proteínas fueron el nutriente central en su dieta.

Esto es así porque, como demuestra un estudio publicado en British Journal of Sports Medicine, la proteína contribuye a la ganancia de músculo cuando se combina con un entrenamiento acorde. No obstante, también tienen lugar los hidratos de carbono, sobre todo para después de los entrenamientos y partidos, ya que permiten rellenar los depósitos de glucógeno.

Las grasas son otro nutriente presente en las comidas de Adama Traoré, dado que estas brindan energía y cumplen funciones hormonales importantes. Finalmente, la suplementación también forma parte de sus hábitos. Este es un aspecto en el que el futbolista debe ser muy cuidadoso, puesto que las reglas antidopaje del fútbol prohíben el consumo de ciertas sustancias capaces de mejorar el rendimiento de forma antinatural.

El impresionante físico de Adama Traoré juega a su favor

Aparte de mejorar su rendimiento, contar con una musculatura desarrollada ha «blindado» a Traoré frente a las lesiones. Salvo una fractura en un metatarsiano en la temporada 2015/2016, el atacante apenas tuvo dos lesiones que lo dejaron más de 20 días sin jugar.

Una de ellas fue en 2015 y la otra es más reciente. Con respecto a esta última, se trata de una injuria muscular en el muslo, datada en julio de 2022.

Teniendo esto en cuenta y sumando la potencia que el jugador demuestra en sus carreras en velocidad, podemos concluir que el físico no es una carga, sino una herramienta para su juego. Adama Traoré es, al fin y al cabo, un ejemplo más de lo que el entrenamiento y la alimentación pueden causar en una persona.