Limones fermentados, una receta sencilla para enriquecer nuestros platos
Los limones fermentados son una receta sorprendente, muy sencilla de preparar. Su uso en la cocina representa una alternativa diferente y saludable para condimentar y enriquecer nuestros platos.
Descubre cómo se preparan los limones fermentados. Solamente necesitarás limones ecológicos y sal de buena calidad.
Dos ingredientes medicinales
El limón
El limón es una fruta cítrica con increíbles propiedades para la salud, ya que limpia nuestro organismo de toxinas, nos ayuda a perder peso, nos aporta grandes cantidades de vitamina C y mejora nuestras defensas para protegernos ante todo tipo de enfermedades.
Elaborar limones fermentados nos permite multiplicar todavía más los beneficios medicinales de este cítrico, y lo mejor es que puede ser consumido durante todo el año.
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La sal marina
La sal es un alimento muy criticado por sus efectos negativos en nuestra salud. No obstante, debemos diferenciar dos tipos de sal:
- Sal común, sal refinada o sal de mesa: este producto refinado es solamente cloruro de sodio, es decir, no contiene más nutrientes ni aporta beneficios para la salud. Por el contrario, perjudica al funcionamiento de nuestros riñones si la consumimos en exceso.
- Sal pura o bruta, sal marina, sal del Himalaya, sal celta, etc.: este tipo de sales no están refinadas, tal como se puede apreciar en su aspecto, textura y color. Son ricas en minerales y oligoelementos, por lo cual las podemos consumir en cantidades moderadas para enriquecer nuestros platos. Son un ingrediente imprescindible en nuestros fermentados caseros.
Beneficios de los alimentos fermentados
Los alimentos fermentados, como por ejemplo el chucrut, el kéfir o el kombucha, son muy beneficiosos para nuestra salud, porque están vivos, es decir, son ricos en probióticos. Los probióticos son microorganismos vivos que, al consumirlos, favorecen y aumentan la flora intestinal, la cual es imprescindible para prevenir enfermedades.
Los alimentos fermentados se usan desde la antiguedad, ya que se conservan por mucho tiempo; requieren de muy pocos ingredientes y se pueden ir consumiendo de manera gradual.
Una flora bacteriana intestinal sana es fundamental para una buena calidad de vida, y para prevenir todo tipo de trastornos crónicos y degenerativos. Por lo tanto, consumir alimentos fermentado es un buen hábito que deberíamos adquirir.
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Limones fermentados
Ingredientes
Para preparar los limones fermentados necesitaremos los siguientes ingredientes:
- 4 limones ecológicos.
- 3 cucharadas de sal marina o sal del Himalaya (45 g)
- Especias al gusto (opcional)
Necesitaremos un frasco de cristal que podamos cerrar de manera hermética. Si queremos hacer más cantidad, solamente tenemos que multiplicar las porciones de cada ingrediente de manera proporcional.
Es fundamental que los limones sean ecológicos ya que, en caso contrario, los pesticidas y sustancias químicas presentes en la peladura podrían impedir el proceso natural de fermentación.
Elaboración
Para preparar los limones fermentados debemos seguir estos pasos:
- Lavar bien los limones y los secárlos. Cortar las puntas y los partirlos en 4 partes cada uno.
- Introducir los trozos de limón y la sal en el frasco de cristal. En primer lugar, colocar un poco de sal en la base y a continuación añadir cada trozo de limón seguido de un poco de sal.
- Cada vez que se añada un trozo de limón, hay que apretarlo y machacarlo bien dentro del frasco, para que suelte el jugo y se mezcle con la sal.
- Si lo desea, añadir las especias.
- El jugo de los limones debería sobrepasar los ingredientes sólidos.
- Tapar el recipiente y agitarlo un poco. Dejarlo fermentar durante un mes en un lugar fresco y oscuro.
- De vez en cuando agitar un poco el frasco o apretar los trozos de limón. Lo importante es que siempre queden sumergidos.
Usos e ideas
Cuando los limones ya estén fermentados, podemos usarlos de diferentes maneras:
- El jugo puede ser usado para aliñar ensaladas y otros platos, a modo de vinagreta.
- Unas gotas del jugo en nuestras bebidas y batidos para potenciar su sabor y propiedades.
- Unas gotas del jugo con agua caliente en ayunas, a modo depurativo.
- La pulpa triturada o cortada a tiras finas en guisos y todo tipo de recetas.
Podemos enjuagar la pulpa o bien usarla salada, depende del uso que le vayamos a dar.
Imagen principal cortesía de © wikiHow.com
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