Lorazepam: qué es y cómo actúa

El lorazepam es una benzodiazepina de acción corta muy utilizada para el tratamiento de la ansiedad. No obstante, debes tener en cuenta ciertas advertencias sobre este medicamento.
Lorazepam: qué es y cómo actúa
Alejandro Duarte

Revisado y aprobado por el biotecnólogo Alejandro Duarte.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 24 mayo, 2023

El lorazepam es un fármaco del grupo de las benzodiazepinas (BZD) utilizado para el combatir la ansiedad y el nerviosismo. Dependiendo del caso, puede indicarse su consumo por determinados periodos de tiempo (tratamiento a corto plazo) o por temporadas (tratamiento a largo plazo).

¿Alguna vez lo has oído mencionar o te lo han recetado? Si es así, sería conveniente que conocieras un poco más sobre su mecanismo de acción y sus acciones farmacológicas, así como sus reacciones adversas y su farmacocinética. Primero hemos de saber a qué nos referimos cuando hablamos ansiedad.

¿Qué es la ansiedad?

El lorazepam se utiliza para la ansiedad.
La ansiedad puede manifestarse y tratarse de muchas maneras.

Tal y como indican los expertos, la ansiedad es un mecanismo adaptativo natural que, cuando se desborda y repercute de diversas maneras sobre una persona, puede considerarse como un trastorno. Asimismo, añaden que “los trastornos por ansiedad son, en conjunto, la enfermedad psiquiátrica más frecuente”. 

Dicho en otras palabras: en situaciones normales, la ansiedad es un componente de la actividad mental normal que participa en mecanismos de defensa y permite ajustarnos a situaciones de estrés. Esta situación se convierte en patológica cuando se sobrepasan unos límites, anulando o entorpeciendo la adaptación a la situación estresante.

Entonces, se puede describir la sensación de ansiedad como la vivencia de un sentimiento de amenaza, de expectación tensa ante el futuro y de alteración del equilibrio psicosomático en ausencia de un peligro real.

Cuando se está bajo los efectos de la ansiedad, en el paciente coexisten diferentes sentimientos como aprensión, temor o angustia frente algo ”amenazante”; un estado de irritabilidad y, en conjunto, puede dar lugar a diversos síntomas como los siguientes:

  • Fatiga.
  • Insomnio.
  • Cefaleas.
  • Sudoración.
  • Palpitaciones.

¿Qué es un fármaco ansiolítico?

Los fármacos que se utilizan para combatir la ansiedad, como lo es el lorazepam, se denominan fármacos ansiolíticos. Estos alivian o suprimen el síndrome de ansiedad sin producir sedación o sueño. Suele pasar que, en pequeñas dosis, son capaces de producir solo la ansiólisis.

Sin embargo a medida que se va aumentado la dosis, en algunos casos puede aparecer los efectos de sedación, el coma e incluso la muerte por intoxicación.

Mecanismo de acción del lorazepam

El lorazepam es un fármaco de acción corta para el tratamiento de la ansiedad. Para conseguir su acción ansiolítica, este fármaco presenta dos mecanismos complementarios.

Facilita la transisión del GABA

El GABA es un neutrasmisor con capacidad de inhibir o reducir la actividad neuronal. Por tanto, la unión del lorazempan con el receptor GABA producirá un cambio en él que se traducirá en una mejor unión con el neurotrasmisor. Al potenciar esta unión, se mejora la capacidad inhibitoria del mismo.

Unión del lorazepam con sitios específicos del complejo receptor GABA-BZD

Este complejo presenta varios dominios: el α1, el ß2 y el γ2. Es muy importante conseguir la selectividad de estos receptores para separar la acción hipnótica de la ansiolítica. En concreto, para la acción ansiolítica, el subreceptor implicado es el BZ2 (ω2).

Acciones farmacológicas

Dependiendo de las características de las benzodiazepinas, se puede desarrollar una acción u otra, o incluso ambas a la vez. El lorazepam presenta acciones ansiolíticas y anticonvulsivantes.
La acción ansiolítica es característica del receptor BZ2, como hemos comentado antes. La unión a este complejo desencadena acciones que disminuyen la ansiedad y la agresividad.

Personas sanas frente a pacientes con ansiedad

En este caso del que hablamos, tenemos que distinguir en personas sanas que toman lorazepam y los pacientes con ansiedad:

  • En personas sanas, a dosis terapéuticas no se altera la realización de ejercicios físicos o mentales. A dosis mayores, puede causar sopor, letargia, ataxia y debilidad muscular. El principal inconveniente es el ”sueño residual”.
  • En pacientes con ansiedad, el lorazepam alivia tanto a tensión subjetiva como los síntomas subjetivos. No obstante, es poco eficaz en situaciones de pánico, fobias y ansiedad no neurótica.

Además puede llegar a presentar efectos sobre la agresividad y la memoria, deprimir el sistema cardiovascular y respiratorio y disminuir la capacidad de hablar y expresarse.

Echa un ojo a: ¿Qué hacer ante un ataque de pánico?

Farmacocinética del lorazepam

El lorazepam actúa sobre el sistema nervioso.
Antes de llegar al sistema nervioso, el lorazepam debe atravesar varias estructuras.

Este fármaco, al igual que las demás benzodiazepinas, se absorbe bien por vía oral. Además, se une en un grado bastante alto a proteínas plasmáticas. Por ello hay que tener cuidado, ya que puede interaccionar con otros fármacos que presenten estas características.

También es un fármaco muy liposoluble, característica necesaria para poder atravesar la barrera hematoencefálica que protege al cerebro y desencadenar su acción a nivel central.

Asimismo es un molécula que ya está oxidada. Por tanto, en su metabolismo solo sufrirá reacciones de conjugación. Esto es muy útil es pacientes geriátricos, ya que en esta edad la funcionalidad del hígado suele estar disminuida, y al requerir menos reacciones de metabolización, los pacientes en esta edad la eliminarán de forma fácil.

Reacciones adversas

Los efectos adversos derivan de una acción prolongada de lorazepam. Por lo general se ve afectado el sistema nervioso central y se observan reacciones tales como:

  • Efectos paradójicos.
  • Disartria (dificultad para hablar).
  • Sedación y la ataxia (alteración de la coordinación de movimientos).
  • Amnesia anterógrada (no se recuerda lo reciente, pero sí hechos anteriores a la amnesia).
  • Tolerancia-dependencia con efecto rebote (ya que no se debe suprimir el tratamiento con lorazepam de forma brusca, se ha de hacer de manera gradual).

Por todo ello, se ha de tener precaución en personas con alergia a las benzodiazepinas, personas asmáticas y pacientes con insuficiencia renal grave. También puede ser peligroso para mujeres embarazadas, ya que por su elevada liposolubilidad, el lorazepam es capaz de atravesar la placenta.

El lorazepam debe consumirse bajo indicación médica

En ningún caso se deben consumir medicamentos ansiolíticos (o de cualquier otra índole) sin antes haberlo consultado con el médico. Además, muchos requieren receta del profesional, porque no son de venta libre.

También es necesario tener siempre presente que solo un profesional de la salud puede determinar si una persona necesita tomar cierto medicamento o no. Así pues, si consideras que necesitas ayuda, acude a consulta con el profesional y sigue sus indicaciones. Él sabrá qué hacer en cualquier caso.


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