No es que no tengas tiempo, es que no tienes interés

En lugar de mostrar un interés fingido, empieza a exteriorizar lo que realmente sientes. Deja de mentir a los demás y, sobre todo, a ti mismo
No es que no tengas tiempo, es que no tienes interés

Última actualización: 16 octubre, 2021

Siempre se tiene tiempo para aquello que uno desea hacer. Sin embargo en ocasiones nos ponemos la excusa de la falta de tiempo para no hacer aquellas cosas por las que no tenemos ningún interés.

Por ejemplo, tal vez estemos invitados a una cena, pero no nos apetece nada ir. Quizás estemos cansados o existan otro tipo de cosas que nos apetece hacer más. Entonces, decimos “uy, lo siento, no voy a poder ir ¡no tengo tiempo!”.

Nuestros amigos pueden pensar que esto es así, pero, cuando esta respuesta se convierte en una constante, algo está pasando.

No finjas que tienes interés

falta de interés

El hecho de fingir interés por alguien o algo para, después, poner una excusa para no hacer eso que tan poco nos apetece es consecuencia de desear dar una imagen que no se corresponde con lo que somos.

Queremos quedar bien, así es como nos enseñaron, a no decir “no”, a no negarnos ante algo que se considera socialmente bien visto.

Sin embargo, aquí hay un conflicto entre lo que es deseable y lo que nosotros queremos. Si no deseamos quedar con nuestros amigos, ¡digámoslo! No pongamos excusas sobre un tiempo que, en realidad, sí tenemos.

Lo peor de esto es que nos creemos esta mentira que le contamos a los demás y la transformamos en nuestra forma de proceder.

Si nos descubren, perderemos la confianza de aquellos a quienes amamos porque no hemos sabido ser sinceros con ellos y expresar nuestras necesidades sin sentirnos mal.

Un estudio de la Facultad de Sicología de la Universidad de Iowa demuestra que quienes ponen excusas pierden credibilidad con amigos y empleadores.

Puedes decir “no” sin sentirte mal

mentir

No nos han educado para decir lo que queremos ni para decir “no” si es lo que pensamos. Nos han educado en el “sí” a todo. Así surgen las excusas cuando esto no se corresponde con nuestras necesidades.

Estamos jugando a mantener las apariencias mientras nos engañamos y, también, engañamos a los demás.

La falta de negación provoca que, pidamos lo que pidamos, la respuesta será siempre afirmativa.

Esto causa muchos problemas, pues ¿alguna vez han quedado contigo y, después, te han dicho que no podían? ¿Esto se ha repetido? ¿Te han cambiado por otro plan?

Esto te hace sentir mal, pero… ¿verdad que tú también lo haces? Ser consciente de esto te permitirá empezar a actuar de otra manera, no excusar con falta de tiempo tu poco interés. Empieza a manifestar lo que en verdad quieres y sientes.

Empieza a ser tú mismo

falta de interés

Empieza a mostrar tu falta de interés en un encuentro social, en una persona o en cualquier otro escenario que se te presente si así lo sientes.

La sicoterapista Sari Gillman, autora del libro “Transforma tus Fronteras”, recomienda poner tus límites con un sí o un no aunque a los otros no les guste. Quienes en verdad te aprecian sabrán aceptarlo.

No es necesario poner excusas, porque vas a tener que poner mucho cuidado en que esta no se haya repetido previamente. De lo contrario, ¡te pueden descubrir!

Es momento de empezar a ser sinceros. Siempre estamos pidiendo que los demás lo sean con nosotros y, en cambio, hacemos todo lo contrario.

Di “no” si no te apetece y sé honesto con quienes tienen interés en ti para no hacerles daño.

Antes de irte no te pierdas: Saber decir NO, es bueno para tu salud

Nadie tiene por qué suponer que lo nuestro es falta de interés. Tampoco tenemos que mentirnos a nosotros mismos diciéndonos que no tenemos tiempo.

Es mejor que empecemos a ser tal y como somos, sin miedo.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.