¿Qué es el posmodernismo? Ideas y críticas de sus pensadores

El posmodernismo nace como una superación de las ideas y los valores de la modernidad. Veamos en qué consiste.

El posmodernismo es un movimiento filosófico, cultural y artístico que surgió en la segunda mitad del siglo XX, como reacción a las ideas y valores de la modernidad. En otras palabras, se trata de una corriente que busca superar a esta última, estableciendo nuevas formas de entender al ser humano y al mundo que lo rodea.

Por lo tanto, el posmodernismo suele criticar creencias arraigadas sobre la realidad objetiva, los sistemas de valores, la naturaleza humana, el progreso social y la innovación. Profundicemos en ello.

Surgimiento del posmodernismo

El término posmodernismo apareció por primera vez en el ámbito filosófico en 1979, con la publicación de La condición posmoderna de Jean-François Lyotard.

En dicha obra, el autor concibe la cultura posmoderna como el final de las metanarrativas o “grandes narrativas” propias de la modernidad. Ejemplo de ellas son el reduccionismo y las interpretaciones teleológicas del marxismo y la ilustración, entre otras.

Recordemos que la modernidad refiere a los procesos sociales e históricos originados en Europa a partir del siglo XV y que están ligados inexorablemente a la Ilustración, al liberalismo, a la primacía de la razón y del conocimiento científico, a las verdades universales, al capitalismo industrial y al progreso social. El posmodernismo nace como una superación de estas ideas y formas de vida.

Características del posmodernismo

Para comprender mejor en qué consiste la cultura posmoderna, a continuación presentamos sus características más definitorias:

• En contraposición con la modernidad, la posmodernidad es la época del desencanto. Se renuncia a las utopías y a la idea de progreso en conjunto y se apuesta más por el progreso individual.
• Existe un creciente auge del consumismo. Es decir, se cambia la economía de producción por una economía de consumo.
• La verdad ya no es asumida como algo universal ni absoluto, sino como una cuestión de perspectiva o de contexto.
• Se resaltan los límites de las ciencias modernas en cuanto a la generación de conocimiento verdadero, acumulativo y de validez universal. Se pierde la fe en la razón y en la ciencia, pero en contrapartida, se rinde culto a la tecnología.
• El lenguaje empieza a adquirir un rol fundamental en la construcción e interpretación de la realidad. Se afirma que el mismo moldea nuestro pensamiento y no puede haber pensamiento sin lenguaje.
• Las personas le otorgan un mayor peso al presente, por lo que el pasado y el futuro se consideran menos relevantes.
• El pensamiento occidental moderno creó dualismos para interpretar la realidad (oriente-occidente, hombre-mujer, rico-pobre). Pero el posmodernismo mantiene una postura híbrida o pluralista respecto a la realidad, pues asume que la dualidad en el conocimiento deja fuera a numerosos matices e interpretaciones.
• Se cuestionan los textos. Los posmodernos también afirman que los textos no tienen autoridad u objetividad inherente para revelar la intención del autor ni pueden decirnos «qué sucedió en realidad». Más bien, estos textos reflejan los prejuicios y la cultura particular del escritor.

Ideas y críticas de algunos pensadores posmodernos

Es pertinente tener en cuenta que el posmodernismo engloba una variedad de corrientes artísticas, filosóficas y culturales, por lo que reunir a todos los pensadores en este pequeño apartado sería una tarea sumamente extensa.

No obstante, a continuación presentamos las ideas y críticas de algunos de los autores posmodernos más resaltantes. Vamos a ello.

Jean-François Lyotard

Este autor criticó la sociedad moderna por el realismo del dinero, el cual se acomoda a todas las tendencias y necesidades, siempre y cuando tengan poder de compra. Asimismo, criticó los metadiscursos idealistas, iluministas y marxistas liberales (propios de la modernidad), afirmando que son incapaces de conducir a la liberación.

De esta forma, la cultura posmoderna se caracteriza por la incredulidad con respecto a estos metarrelatos. Frente a ellos, no se trata de proponer un sistema alternativo al vigente, sino de actuar en espacios muy diversos para producir cambios concretos.

Gianni Vattimo

Para Vattimo, la posmodernidad es una especie de «Babel informativa», donde la comunicación y los medios adquieren un carácter central. En este sentido, la posmodernidad representa la superación de las concepciones unívocas de los modelos cerrados, de las grandes verdades y de la historia como huella definitoria del acontecer.

Según Vattimo, la posmodernidad abre el camino a la tolerancia y a la diversidad, en tanto que deja atrás el pensamiento fuerte, la metafísica y las creencias verdaderas. Se da paso al pensamiento débil y a la despreocupación.

Jean Baudrillard

Una de sus tesis más conocidas es que en el mundo posmoderno no hay realidad, sino simulacro de la misma. Una suerte de realidad virtual creada por los medios de comunicación.

Una expresión resonante respecto a esa idea la manifestó con relación a la primera Guerra del Golfo, promovida por Bush padre en 1991. Primero, el mandatario predijo que la guerra no ocurriría; cuando las bombas habían caído ya sobre Bagdad, mantuvo la misma idea. “La guerra del Golfo no ha existido” dijo con contundencia.

En este sentido, Baudrillard afirmó que la guerra, para la mayoría de las personas en el mundo, había sido un espectáculo televisivo y no real. Estados Unidos, con sus seguros bombardeos aéreos, había participado en ella como lo hacen los jugadores de videojuegos.

El posmodernismo sigue en desarrollo

El posmodernismo es un movimiento que engloba a una serie de corrientes culturales, filosóficas y artísticas, que buscan superar las ideas y valores de la modernidad. Dentro de este movimiento se adscriben una variedad de pensadores que no solo han descrito las características principales del mundo posmoderno, sino que también han manifestado sus acuerdos y desacuerdos con las dinámicas que se han instaurado dentro del mismo.

Se trata de un movimiento contemporáneo. Es decir, continúa su desarrollo a medida que transcurre esta época en la que vivimos.