Puertas metálicas: pros y contras

Las puertas metálicas han pasado de ser una opción para edificios de seguridad a usarse en contextos domésticos. Hoy repasamos los pros y contras que debes saber antes de instalarlas.
Puertas metálicas: pros y contras

Última actualización: 26 julio, 2023

Hasta hace poco, las puertas metálicas se utilizaban de forma exclusiva en edificios y fábricas de máxima seguridad. Su bajo precio de venta, resistencia, durabilidad y diseño hicieron que su uso se extendiera también a hogares y residencias particulares.

Aunque es verdad que otro tipo de materiales son mejores en cuanto a obtener variantes de estilo, como la madera, las puertas de acero han mejorado mucho sus posibilidades estéticas. Hoy se pueden comprar con diseños modernos y minimalistas, incluso en combinación con otros elementos como el vidrio.

Si estás interesado en instalar una puerta metálica, hoy te presentaremos las ventajas y desventajas que te aportarán. Gracias a ello podrás tener una valoración objetiva sobre si te conviene o no su uso en contraste con otras.

Pros de las puertas metálicas

Es posible que te hayas interesado por las puertas metálicas en razón de sus ventajas. Comparadas con otras, como las de madera, fibra de vidrio o aluminio, las de acero cuentan con un grado de resistencia y durabilidad superior. Repasemos qué beneficios recibes al optar por ellas.

1. Son más seguras

Existen varias pruebas estándar que miden el grado de seguridad de los materiales utilizados en las puertas. En Estados Unidos, por ejemplo, el Instituto de Puertas de Acero (Steel Door Institute) ha desarrollado varias experimentos para avalar la seguridad de las puertas de acero por sobre otras alternativas del mercado.

Sus investigaciones contrastaron también los modelos de madera, aluminio y fibra de vidrio. Los resultados obtenidos demostraron que el acero es el mejor material al momento de resistir oleadas de fuego, explosiones, tornados y entradas forzadas.

Este último criterio es interesante, ya que se emplearon métodos de entrada forzada aplicados a edificios gubernamentales. Se han desarrollado puertas metálicas resistentes a explosiones, lo que avala el valor de este material por sobre los demás.

En resumen, si quieres dormir tranquilo sin el temor de que tu puerta sea derribada por un extraño, entonces debes elegir una fabricada en metal. Son las más seguras de todas debido a su peso, resistencia y hermeticidad.

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2. Duran más que otras puertas

Siempre y cuando hayan sido instaladas por un profesional y se les realice el mantenimiento adecuado, una puerta metálica puede durar hasta 30 años. Si el modelo se encuentra en una zona donde la luz, la humedad y agua son escasos, entonces su vida útil se extiende aún más.

En función del tratamiento que se le haya hecho al acero, como la galvanización, la puerta puede alcanzar este rango de edad en mejor estado que modelos de madera o aluminio. Las de madera, por ejemplo, tienden a perder color, agrietarse o pudrirse.

Seguridad en las puertas metálicas.
Las puertas metálicas son más seguras que el resto y así lo han demostrado pruebas que se realizaron en estos modelos.

3. Su mantenimiento es muy fácil

Sobre todo cuando tienen una capa protectora o un tratamiento especial para prevenir la corrosión. El acero no se agrieta, no se abolla ni tampoco se dobla con facilidad. Se trata de un elemento ultrarresistente que solo demanda un cuidado ocasional.

En caso de reparaciones se puede solucionar con un poco de masilla para carrocerías o soldadura por un coste relativamente bajo. Debido a que su estructura es propensa a oxidarse, se recomienda minimizar el agua que recibe durante la limpieza.

4. Son eficientes desde el punto de vista energético

Debido a que retienen el calor o el frío que las rodea, las puertas metálicas contribuyen a que la temperatura no se vea alterada por las condiciones externas. Lo anterior se refuerza aún más gracias a la hermeticidad.

Existen muchas variantes que ofrecen distintos grados de eficiencia energética. Por ejemplo, puertas metálicas con núcleo de poliuretano, de poliestireno, de panal o de acero reforzado endurecido.

Las primeras cuentan con una eficiencia similar a la de la fibra de vidrio, el mejor material en cuanto a rendimiento térmico. En promedio, el factor U de este último es de 0,35, mientras que en las de acero con núcleo de poliuretano es de 0,38.

5. Aíslan el ruido

Oficinas, escuelas y otras instalaciones utilizan puertas metálicas por una buena razón: su eficiencia para aislar el ruido. El rendimiento acústico de puertas y ventanas se mide a través de la clasificación STC. El coeficiente de transmisión de sonido en las puertas de acero es el más alto de todos: entre 40 STC y 48 STC.

Esto permite minimizar la cantidad de ruido que llega del exterior al interior y viceversa. Se traduce en una mayor privacidad, con menos contaminación acústica y maximización de la productividad en actividades que demandan cierto grado de concentración.

6. Son más asequibles

El acero es el material más reciclado en todo el mundo. Según datos de la Asociación de Productores Europeos de Acero (APEAL) el 82,5 % del acero se recicla en el viejo continente. Cifras iguales se manejan en otras regiones, como América del Norte.

Su reciclado ayuda a reducir los costes de fabricación, sobre todo si se compara con otros materiales usados en las puertas. Si se tiene en cuenta la vida útil, entonces el ahorro es más significativo.

7. Se pueden personalizar

Contrario a lo que se cree, las puertas metálicas cuentan con un nivel de personalización muy variado. Es cierto que en el plano de diseño las de madera son más elegantes, pero los modelos de acero se pueden ornamentar para que combinen de manera perfecta con la decoración del hogar.

Puedes adaptarlas a diferentes formas y tamaños e incluso adquirirlas en varios tonos de color. También puedes elegir modelos con o sin ventanas, con diseños minimalistas, modernos o con guiños al estilo clásico.

Además de esto, se pueden instalar en distintas partes del hogar. Sean o no puerta principal, las metálicas ofrecen ventajas inigualables por otros materiales. Por todas sus virtudes se han usado desde hace décadas como alternativa para el garaje.

Contras de las puertas metálicas

Así como estas puertas tienen sus puntos a favor, también tienen algunos en contra. Por fortuna son pocos y se pueden reducir aún más en función del tipo de variante de acero que utilices.

1. Son pesadas

Sí, las puertas fabricadas con elementos metálicos son más pesadas que las de acero inoxidable, aluminio o algunos tipos de madera. Aunque esto, por supuesto, es beneficioso en el plano de la seguridad, puede ser un problema para algunos miembros de la familia.

Si cuentas con alguna discapacidad o padeces de ciertas condiciones como la artritis, es probable que con el tiempo el peso extra pueda jugar en tu contra. Existen algunas variantes que son un poco más livianas.

2. Son propensas a oxidaciones

Sobre todo si no han sido recubiertas con un tratamiento especial o no han sido galvanizadas. En ciertos casos, ante golpes o arañazos parte de la capa puede comprometerse.

La condiciones climáticas, la humedad, el agua o la locación geográfica (vivir cerca de sitios salados, como el mar) pueden también incentivar el desarrollo químico. Por supuesto que hay formas de evitarlo y la atenta vigilancia puede detectar el problema en sus estados iniciales.

3. No se adaptan a todos los marcos

En contraste con las puertas de madera, las metálicas no son aptas para todos los marcos. Sí se pueden personalizar en cuanto a color y textura, pero no en su corte.

Esta es quizá su desventaja más importante, ya que condiciona el lugar en el que se pueden instalar. Para remediar esto, los fabricantes cuentan con una amplia gama de puertas de diversos tamaños y formas que compensan la limitación.

Puerta metálica para garaje.
El uso tradicional de las puertas metálicas ha estado en las cocheras y en los edificios de organizaciones.

4. Las reparaciones y su instalación las tiene que hacer un profesional

Nada impide que por tu cuenta intentes hacer estas dos acciones, aunque para resultados más precisos es necesaria la mediación de un profesional. Esto aplica a las posibles reparaciones que tengas que hacer en el futuro.

Piensa en las reparaciones que haces a la carrocería de tu coche. Solo la técnica de un experto puede dejarlas en perfecto estado, ya que el principio que se utiliza es en esencia el mismo.

Puertas metálicas para toda la vida

Si quieres disfrutar tu puerta metálica durante el tiempo de vida estipulado, entonces debes saber cómo mantenerlas de forma apropiada. Así que utiliza un pañito o una esponja suave para evitar arañazos. No uses mucha agua o detergentes fuertes. Al finalizar la limpieza asegúrate de retirar todos los restos de jabón.

Pasa un plumero o paño seco una vez a la semana para evitar la acumulación de polvo. Si decides pintarla, usa solo pintura galvanizada. Finalmente, el encerado o el pulido deben estar avalados por el fabricante. Consulta sus parámetros de mantenimiento o contacta con un especialista en caso de dudas.


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