Por qué tengo siempre el vientre hinchado

Si por mucha actividad física que realices sigues teniendo el vientre hinchado, revisa tus hábitos alimenticios, sigue una dieta sana y equilibrada y descarta posibles problemas gástricos.
Por qué tengo siempre el vientre hinchado
José Gerardo Rosciano Paganelli

Revisado y aprobado por el médico José Gerardo Rosciano Paganelli.

Escrito por Yamila Papa Pintor

Última actualización: 11 octubre, 2023

Tener siempre el vientre hinchado es una realidad para muchas personas que no encuentran una razón aparente a su problema. La hinchazón del abdomen suele provocar incomodidad o incluso ser doloroso. Además, puede tener varias causas posibles y es un problema muy común.

¿Por qué se hincha y de qué manera podemos reducirlo? Veámoslo a continuación.

Tener el vientre hinchado: incomodidad e insatisfacción

Tener el vientre como un globo puede ser muy incómodo, pero lo peor de todo es no saber los motivos de la hinchazón para poder evitarlos o reducirlos.

Básicamente, los responsables son la dieta, la mala digestión y la acumulación de gases. No obstante, en ocasiones conviene acudir a un médico para determinar la causa exacta del problema y descartar enfermedades subyacentes.

Presta atención a las causas que hay detrás del vientre hinchado.

1. Comer deprisa

comer vientre hinchado

Al momento de ingerir alimentos (en cualquier momento del día): ¿masticas bien cada bocado o, básicamente, tragas sin respirar? Aquellos que comen deprisa y se detienen cuando se sienten llenos multiplican su riesgo de padecer sobrepeso.

En parte, esto se debe a que el cerebro necesita alrededor de 20 minutos para darle la señal al estómago de que está lleno. Cuando se come muy rápido el hambre continúa después de varios bocados o raciones. Por otra parte, este hábito hace que traguemos más cantidad de aire, el cual se acumula en el vientre y, por ende, se hincha.
Cuando no masticamos bien los alimentos repletos de hidratos de carbono llegan al estómago casi intactos y no contienen la saliva necesaria para predigerirse. Así, la fermentación estomacal se traduce en inflamación y en gases.

2. Consumir frituras

La comida basura es la causa número uno de muchos problemas y enfermedades actuales. Los fritos, rebozados y empanados provocan la sensación de vientre hinchado (entre otras patologías).

La manera de cocinar los alimentos guarda una estrecha relación con cómo nos sentimos después de comer. Cuando la comida ha absorbido aceite, este se dirige al estómago y ralentiza el proceso de digestión. Por ello, tras las frituras podemos sentirnos hinchados o con poca capacidad para realizar nuestras actividades.

3. Beber refrescos gaseosos

Refrescos de cola.

Las burbujas hinchan el vientre. Eso no es una novedad. Entonces, ¿por qué seguimos consumiendo refrescos o aguas gasificadas? Si además del gas tenemos en cuenta el azúcar, todas esas calorías vacías contribuyen a ganar peso.

Si se toman estas bebidas durante las comidas la sensación de vientre hinchado será mayor. Incluso con bebidas light.

4. Ingerir fibras de manera incorrecta

Tanto el exceso como la falta de fibras nos hace lucir un vientre hinchado. Si no comemos las suficientes, sufriremos estreñimiento. No ir al baño periódicamente se traduce en abdomen hinchado.

Muchas personas cometen el error de comer demasiadas fibras, que también es malo para la salud. ¿Por qué? Porque causa diarrea que, además de ser molesta, causa hinchazón.

5. Problemas digestivos

La falta de fuerza enzimática o digestiva significa que el estómago no tiene la capacidad para digerir los alimentos como corresponde. Quizás pueda deberse a un problema de salud innato de la persona; pero, en la mayoría de los casos, está provocado por los alimentos que se comen.

Si la dieta está basada en alimentos refinados como las harinas (pan, galletas, pasta) y el azúcar, las enzimas tienen que hacer demasiado esfuerzo para digerirlos. Esta sobrecarga va reduciendo no solo la eficacia, sino también la cantidad de elementos encargados de la digestión.
Si no se digiere por completo la comida, esta se descompone y puede derivar en la aparición de gases, dispepsias y, por supuesto, hinchazón.

6. Comer verduras siempre cocidas

Con la cocción de la comida podemos quitarle todos los nutrientes y enzimas. El calor acaba con las vitaminas y proteínas de las verduras y, al llegar al estómago, los jugos gástricos deben trabajar mucho más para descomponerlas.

7. Intolerancias a ciertos alimentos

Signos de intolerancia a la lactosa

Tal vez seamos intolerantes a un alimento en particular y no lo sabemos, y su ingesta nos provoca hinchazón en el vientre.

La celiaquía y la intolerancia a la lactosa son las dos más comunes pero hay más. Causan digestiones lentas, diarreas o estreñimiento, náuseas, gastritis y vómitos.

8. Mala postura

Si nos pasamos todo el día con el cuerpo encorvado hacia adelante no solo nos dolerá la espalda y las cervicales, sino que también luciremos un vientre abultado. ¿Por qué? Porque la faja natural del cuerpo se va debilitando y la barriga expandiendo.

9. Retención de líquidos

La causa de tener el vientre hinchado no se debe únicamente a la comida sólida, sino también a los líquidos que se acumulan en el organismo. Un claro ejemplo sucede con las mujeres durante el período menstrual.

Las hormonas retienen líquidos y, si a eso le sumamos la poca o nula ingesta de agua y el consumo de alimentos salados (o mucha cantidad de cualquier comida), la situación empeora.

10. Sedentarismo

El papel de la melatonina en el manejo de la obesidad.

Es verdad que muchas veces hacemos ejercicio y adelgazamos otras partes del cuerpo y no el abdomen. Sin embargo, peor es quedarse en casa tumbado en el sillón. La grasa del abdomen debilita los músculos de la zona y cada vez es más difícil “mantenerlos a flote”.

Claves para reducir el vientre hinchado

Estos consejos te pueden ser de vital utilidad si quieres eliminar la hinchazón de estómago:

  • Come raciones pequeñas.
  • Consume ensaladas frescas y frutas crudas.
  • Descarta intolerancias a ciertos alimentos.
  • Evita los refrescos y bebe mucha agua.
  • Prueba una dieta baja en hidratos de carbono y reduce la ingesta de azúcares.
  • Evita el estreñimiento.
  • Haz ejercicio 3 veces por semana.

Si tienes alguna duda sobre como mejorar tu estilo de vida para sentirte mejor, consulta con tu médico de cabecera. El profesional te ayudará a diseñar una estrategia adecuada para ti.


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