Síndrome estafilocócico de la piel escaldada: ¿qué es y cómo es su tratamiento?

El síndrome estafilocócico de la piel escaldada obedece a una infección bacteriana y puede poner en riesgo la vida si no se trata a tiempo y de la forma adecuada.
Síndrome estafilocócico de la piel escaldada: ¿qué es y cómo es su tratamiento?
Leidy Mora Molina

Revisado y aprobado por la enfermera Leidy Mora Molina.

Escrito por Edith Sánchez

Última actualización: 25 mayo, 2023

El síndrome estafilocócico de la piel escaldada es una enfermedad de la piel que se presenta sobre todo en los niños menores de 5 años. Sin embargo, también puede afectar a personas con el sistema inmunológico debilitado o que padezcan insuficiencia renal.

La enfermedad aparece sobre todo en los meses calurosos. La producen bacterias de la cepa S. aureus. Estas producen las toxinas ETA y ETB. El síndrome estafilocócico de la piel escaldada es una respuesta a tales sustancias.

La bacteria se localiza, casi siempre, en las mucosas. Allí produce las toxinas que luego pasan al torrente sanguíneo y dan origen al síndrome estafilocócico de la piel escaldada. Como el nombre lo indica, la principal característica de esta enfermedad es el desprendimiento de la piel. En algunos casos puede ser mortal.

Síntomas del síndrome estafilocócico de la piel escaldada

Fotosensibilidad por té de crisantemo.
El síndrome estafilocócico de la piel escaldada es más común en bebés y niños durante los meses de verano.

Aunque cada persona puede experimentar de manera diferente el síndrome estafilocócico de la piel escaldada, lo habitual es que comience con fiebre  y enrojecimiento de la piel. Unas 24 horas después empiezan a formarse unas ampollas llenas de fluido que se rompen con facilidad. Lo más común es que esto se acompañe de otros síntomas como los siguientes:

  • Áreas rojas y sensibles al tacto que se forman alrededor de las lesiones.
  • Si se presiona o se frota el área afectada, incluso con suavidad, la piel se desprende.
  • Escalofríos.
  • Debilidad.
  • Pérdida de fluidos.

Lo más habitual es que los recién nacidos tengan la infección alrededor del cordón umbilical o en la línea del pañal. En los niños más grandes las lesiones de la piel aparecen, por lo general, en los brazos, piernas o el tronco.

Posibles complicaciones del síndrome de la piel escaldada por estafilococos

El síndrome estafilocócico de la piel escaldada rara vez presenta complicaciones. Sin embargo, cuando se presentan, pueden ser graves. Dentro de tales complicaciones se encuentran las siguientes:

  • Dificultad para el control de la temperatura en los bebés.
  • Pérdida severa de líquidos que provocan deshidratación y pueden llevar a un desequilibrio electrolítico y un shock.
  • Infección grave en el torrente sanguíneo, o septicemia.
  • Propagación de la infección a capas más profundas de la piel, o celulitis.
  • Aparición de cicatrices en la zona afectada.
  • Muerte.

Diagnóstico del síndrome de la piel escaldada por estafilococos

El diagnóstico del síndrome estafilocócico de la piel escaldada se lleva a cabo mediante una exploración de la piel y una entrevista clínica. Tal examen puede probar que la piel se desprende solo con frotarla. Este es un signo conocido como Nikolsky positivo.

Para confirmar el diagnóstico lo usual es que se ordenen las siguientes pruebas:

  • Conteo sanguíneo completo mediante examen de sangre.
  • Frotis y cultivo de piel, sangre, nariz y garganta.
  • Examen de electrolitos.

Si las dudas persisten, es posible que se ordene una biopsia de piel. En este caso, se toma una muestra de tejido y se examina bajo el microscopio. El síndrome estafilocócico de la piel escaldada comparte características con otras enfermedades cutáneas y, por eso, a veces es necesario reconfirmar el diagnóstico.

Tratamiento para el síndrome de la piel escaldada por estafilococos

Escarlatina en bebés: lo que debes saber
El tratamiento del síndrome estafilocócico de la piel escaldada suele requerir hospitalización.

Casi siempre el tratamiento para el síndrome estafilocócico de la piel escaldada requiere de hospitalización. Lo más habitual es que esta se lleve a cabo en la unidad de quemaduras, ya que esta ofrece garantías óptimas para evitar complicaciones.

El tratamiento a aplicar se elige sobre la base de factores como la edad, la severidad de la infección, el estado general de salud, la tolerancia a ciertos medicamentos o ciertas sustancias, las expectativas de recuperación y las preferencias del paciente.

Por lo general, según la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos el tratamiento comprende lo siguiente:

  • Antibióticos. Estos combaten los estafilococos y permiten enfrentar la infección.
  • Fluidos intravenosos. Su papel es el de prevenir o superar la deshidratación.
  • Cremas y pomadas. Son una medida de apoyo para incrementar la función de barrera de la piel.

También suele ser muy conveniente la aplicación de compresas húmedas en la piel, ya que brindan alivio. Asimismo, aplicar un emoliente hace que se reduzcan los síntomas. Lo habitual es que la piel comience a cicatrizar unos 10 días después de iniciar el tratamiento.

Es importante anotar que si los niños o las personas afectadas reciben un tratamiento temprano, tienen una gran probabilidad de recuperarse sin presentar complicaciones o cicatrices en la zona afectada. Por el contrario, un tratamiento tardío incrementa el riesgo de complicaciones.

La piel escaldada requiere tratamiento médico

En algunos países se ha constatado durante los últimos años que las bacterias causantes del síndrome estafilocócico de la piel escaldada se han vuelto resistentes a algunos antibióticos. Por lo mismo, la administración de estos fármacos debe realizarse con estricto rigor y vigilancia.

En general, esta enfermedad tiene un buen pronóstico y no se han descrito secuelas posteriores. La mortalidad en niños es fruto de las complicaciones y está calculada en un 1-4 %. En los adultos es más frecuente un desenlace fatal.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.