Síntomas que pueden avisar la deficiencia de vitaminas
La falta de algunas vitaminas puede producir ciertos síntomas que demuestran que tenemos un nivel bajo de estas. Los signos clínicos se pueden hacer mucho más evidentes en las mujeres embarazadas, los deportistas o personas con una condición de salud muy precaria.
Por ese motivo, a continuación vamos conocer los principales síntomas que se pueden presentar cuando el organismo está padeciendo una falta de ciertas vitaminas que son indispensables para su correcto funcionamiento.
Grietas en la comisura de los labios
Cuando esta condición se presenta con mucha frecuencia, es posible que el organismo tenga un déficit de vitaminas del grupo B, A o C, así como un déficit de hierro y/o zinc.
Se recomienda aumentar el consumo y con mayor frecuencia de carnes, pescado, huevos ostras, almejas, acelgas y legumbres como las lentejas. Cuando además de los síntomas que se mencionaron se siente exceso de cansancio y palidez, es muy posible que la deficiencia más fuerte sea de hierro, por este motivo es muy apropiado consumir también grandes porciones de brócoli, pimientos rojos y tomates, ya que estos aportan la vitamina C necesaria para la correcta absorción del hierro.
Caída de cabello abundante y erupciones en diferentes partes del cuerpo
Es muy posible que la vitamina que está faltando en el organismo sea la B8 o biotina, el organismo puede almacenar algunas cantidades de vitaminas liposolubles, como son la A, D, E y la K, pero las vitaminas hidrosolubles, como es el caso de la biotina, se debe realizar un aporte todos los días, incluyendo los alimentos que la contengan en buenas cantidades. Estos alimentos pueden ser: el salmón, el aguacate, los champiñones, la coliflor, los frutos secos y los plátanos entre otros.
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Hormigueo y adormecimiento en las manos o los pies
Es posible que el organismo esté presentando muy bajas cantidades de vitaminas del complejo B, como pueden ser la B9, B6 y la B12. El propio proceso de parestesia puede ser más frecuente cuando no se cubren los requerimientos de B12, según un estudio publicado en Acta Clinica Croatica.
Estas vitaminas las podemos encontrar en muy buenas cantidades en las espinacas, los espárragos, la remolacha, los huevos, el hígado, entre otros.
Calambres en las piernas y los pies por falta de vitaminas
Estos síntomas son muy frecuentes en las personas que tienen grandes deficiencias de calcio y potasio, además suelen ser muy recurrentes. Si los calambres se presentan en personas que realizan ejercicios con cierta frecuencia, es posible que se deba a efectos de la excesiva sudoración, la cual produce un desequilibrio electrolítico.
Incluso existen ciertas evidencias conforme una falta de magnesio puede incrementar también el riesgo de desarrollar calambres en las piernas. Así lo evidencia una investigación publicada en The Cochrane Database of Systematic Reviews. Incluso esta condición se vuelve más frecuente en el caso de las embarazadas.
Los alimentos que se pueden ingerir para evitar los calambres por falta de calcio o de potasio son: los plátanos, el aguacate, las almendras y todos los demás frutos secos; también las cerezas, las manzanas y todas las verduras de hojas verdes.
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Cansancio excesivo
En ocasiones es posible que una persona sufra una condición de cansancio o de fatiga y no sepa exactamente por qué. Lo cierto es que el déficit de vitamina D podría estar muy relacionada con tal situación. De hecho, existen evidencias conforme no cubrir los requerimientos afecta de forma significativa a la fuerza muscular, incluso al riesgo de lesión en deportistas.
Sin embargo, la vitamina D es difícil de conseguir por medio de la dieta. Es importante exponerse al sol de forma frecuente, ya que a partir de los rayos ultravioleta se estimula la síntesis endógena del nutriente. Se puede encontrar también en pescados azules, lácteos enriquecidos y huevos, aunque en cantidades pequeñas.
De hecho, en ocasiones es necesario recurrir a la suplementación para paliar el déficit. Esto sucede, sobre todo, en países con pocas horas de luz en periodos invernales. Pautar un complemento con el nutriente puede revertir la sintomatología, pero se recomienda que esto se consulte primero con un profesional.
Los déficits de vitaminas generan efectos secundarios
No alcanzar los requerimientos diarios de vitaminas puede condicionar negativamente la salud. A partir de tal situación se desarrollan patologías o efectos secundarios, cuyo grado de severidad varía. Lo cierto, es que en todos estos contextos se perjudica el bienestar del sujeto.
Para evitar llegar a tal punto es crucial plantear una dieta variada y equilibrada, haciendo hincapié en la ingesta de productos frescos frente a la de ultraprocesados industriales. Además, en ciertas ocasiones puede valorarse la suplementación con nutrientes para evitar estados patológicos a medio y a largo plazo. Pero antes de esto consulta con un especialista.
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