¿Por qué se producen los sudores nocturnos en personas con leucemia?

Aunque los sudores nocturnos pueden ser la manifestación de diversos problemas de salud, es importante conocer su relación con las neoplasias sanguíneas. Este es el caso de la leucemia.
¿Por qué se producen los sudores nocturnos en personas con leucemia?
Maryel Alvarado Nieto

Escrito y verificado por la médica Maryel Alvarado Nieto.

Última actualización: 09 julio, 2023

La leucemia es una neoplasia de las células sanguíneas con síntomas iniciales inespecíficos, como los sudores nocturnos. El diagnóstico precoz resulta imprescindible para lograr un tratamiento exitoso. Por ello, es de vital importancia conocer qué otras manifestaciones acompañan a este cuadro.

Asimismo, es relevante mencionar que los exámenes de rutina suelen brindar el primer indicio de una alteración hematológica en pacientes asintomáticos. Por lo que es frecuente que la leucemia se diagnostique a partir de un hallazgo casual.

¿Qué son los sudores nocturnos?

Las definiciones disponibles varían, dependiendo del autor, pero la mayoría coincide en que la sudoración ocurre durante la noche a pesar de existir un ambiente fresco. De forma que lo primero que hay que descartar son las habitaciones calurosas y poco ventiladas, así como el uso de ropa y sábanas muy abrigadas.

Luego de este consenso general, la literatura es bastante amplia y no establece un concepto único.

Para algunos autores, los sudores nocturnos incluyen solo aquellos casos en los que el paciente amerita cambiar su pijama y la ropa de cama debido al exceso de transpiración. Mientras que otros son más inclusivos en el término, clasificando al síntoma como leve, moderado o severo, dependiendo de la necesidad de refrescarse o cambiar las sábanas.

Tampoco existe un consenso con relación a la frecuencia en la que los sudores nocturnos aparecen.

Confirmar el síntoma

El primer paso es determinar si se trata de un evento aislado o si ocurre de manera frecuente. Para esto se puede recurrir a tomar nota de las fechas en las que los sudores nocturnos interrumpieron el sueño y anotar también si fue necesario realizar alguna acción para eliminar dicha sensación.

Es útil mejorar las condiciones ambientales a la hora de dormir. Esto, con el fin de constatar que el síntoma no es generado por un desencadenante externo.

Dormir con sudores noctunros en la leucemia.
Es preciso establecer si los sudores son por el clima o no tienen relación con el ambiente al dormir.

¿Por qué se producen los sudores nocturnos en la leucemia?

En las neoplasias ocurre una alteración del ciclo celular, por lo que las células tumorales se multiplican de forma desordenada. En la leucemia, tanto en sus variantes agudas como en las crónicas, existe un aumento de la división de una o varias estirpes celulares en la médula ósea. Para ello, se utilizan grandes cantidades de energía. Este consumo energético produce reacciones en las que se libera calor.

La sudoración es un mecanismo para disipar el exceso de calor. En el caso de la leucemia, aparece como respuesta al incremento del metabolismo celular.

La razón por la que los sudores tienen un predominio nocturno es poco conocida. No obstante, parece tener relación con las oscilaciones de la temperatura durante el día, más que con un efecto directo de la propia neoplasia.



¿Qué otros síntomas tempranos tiene la leucemia?

Aunque los sudores nocturnos pueden ser una manifestación en la leucemia, son un hallazgo más frecuente en los linfomas. De hecho, la asociación entre pérdida de peso, fiebre de bajo grado y sudores nocturnos se conoce como “síntomas B”, en referencia a esta última neoplasia.

Estas tres manifestaciones clínicas también pueden acompañar a la leucemia, junto a los siguientes síntomas:

Los sudores nocturnos en otras enfermedades

No todos los sudores nocturnos son sinónimo de neoplasia. Es por ello que realizar un interrogatorio exhaustivo, indagando sobre síntomas adicionales, permite establecer un diagnóstico presuntivo.

Dentro de las enfermedades que cursan con sudores nocturnos se encuentran las siguientes:

  • VIH.
  • Linfomas.
  • Tuberculosis.
  • Brucelosis.
  • Endocarditis bacteriana.
  • Mononucleosis infecciosa.
  • Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE).
  • Insuficiencia cardíaca congestiva.
  • Diabetes mellitus e hipoglucemia.
  • Apnea del sueño.
  • Hipertiroidismo.
  • Feocromocitoma.
Ganglios linfáticos inflamados en la leucemia.
La presencia de adenomegalia o ganglios linfáticos inflamados, de manera crónica, es sospechosa de una neoplasia y contribuye al diagnóstico.

Otras condiciones asociadas

Además de la lista de patologías nombradas en el apartado anterior, es importante destacar que el uso de algunos medicamentos (antipiréticos, antidepresivos y antihipertensivos) pueden producir sudores nocturnos. Del mismo modo, es frecuente encontrar este síntoma en personas que abusan de sustancias como el alcohol o la heroína.

Los sudores nocturnos son comunes en mujeres que atraviesan el período del climaterio.

¿Cómo saber si los sudores nocturnos son un síntoma de leucemia?

Resulta imprescindible valorar tanto la presencia de los sudores nocturnos como de los síntomas que los acompañan. En especial, si existe cansancio, debilidad o pérdida de peso.

En estadios tempranos, muchas de las neoplasias causan síntomas que pueden pasar desapercibidos. Es por ello que ante la presencia de los llamados “síntomas B” es necesario acudir a una valoración médica temprana.

En la valoración clínica, el médico recolectará toda la información relacionada con los síntomas que describe el paciente. Además, es habitual que luego proceda a realizar preguntas específicas que le den una idea general de lo que está ocurriendo.

Así, podrá realizar un examen físico minucioso que incluya la revisión de las cadenas ganglionares y la palpación del abdomen. Cuando existe sospecha de una neoplasia sanguínea, como la leucemia, se solicitarán pruebas complementarias. Entre estas, se encuentra la hematimetría o hemograma, el frotis de sangre periférica y el aspirado de médula ósea.


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