¿Toser para frenar un ataque al corazón?

La maniobra conocida como 'Cough CPR’ (Resucitación cardiopulmonar por medio de la tos) no cuenta con el apoyo de los médicos.
¿Toser para frenar un ataque al corazón?
Maricela Jiménez López

Revisado y aprobado por la médico Maricela Jiménez López.

Última actualización: 06 julio, 2023

Durante años, se ha propagado la afirmación de que toser, con fuerza, ayuda a frenar un ataque al corazón. Sobre todo, por el hecho de que la gran mayoría de las personas desea encontrar una manera de evitar consecuencias que puedan afectar su calidad de vida a largo plazo.

Hay varias señales que alertan que algo no va bien y que puede ocurrir un ataque al corazón; hay dolor de pecho, este comienza a latir de una forma irregular, sin compás y, de pronto, se experimenta una gran debilidad y la persona se siente como si estuviese al borde de un desmayo.

Ante estos síntomas, las personas suelen apresurarse a pedir ayuda médica, no obstante, ¿qué se puede hacer mientras tanto? Más aún cuando el pánico comienza a tomar control de la situación.

La eficacia de toser

El primer dato es que se suele confundir a esta práctica con una especie de reanimación cardiopulmonar (RCP), debido al nombre que recibe en inglés (cough CPR). Por definición, esta técnica se utiliza en pacientes que no respiran ni tienen pulso, algo completamente diferente que un ataque o infarto cardíaco. Los pacientes con esta condición sí tienen actividad cardíaca y pulmonar, a pesar de que esté en riesgo.

Hasta los momentos no hay evidencia que indique que toser puede mejorar la evolución de un infarto. Es posible que se haya creado un mito como consecuencia de que inducir la tos en ciertas circunstancias de peligro cardiovascular podría llegar a ser beneficioso para los pacientes, pero no en medio de un infarto.

Pongamos un ejemplo. Un estudio publicado en Catheterization and Cardiovascular Diagnosis indicó que la inducción de la tos en el laboratorio de hemodinamia en pacientes con arritmias ventriculares malignas podría favorecer el procedimiento. Indicadores como la presión arterial y el estado de consciencia (que habla de una adecuada perfusión cerebral) se mantuvieron mejor en aquellos que tosían unas 30-60 veces por minuto.

Sin embargo, se trata de evidencias en condiciones muy específicas y que solo se realizan en condiciones particulares. A pesar de que se le llegó a considerar, incluso, como una técnica de primeros auxilios, hasta la fecha no existen pruebas concluyentes que permitan a la comunidad científica afirmar que, en efecto, lo es.

El ataque al corazón y el paro cardiaco

Existe la tendencia a confundir ambos conceptos. La realidad es que no es lo mismo una cosa que otra. No obstante, sí es cierto que ambas situaciones pueden tener causas muy parecidas (normalmente relacionadas a problemas de circulación sanguínea y de suministro de sangre al corazón).

Paro cardíaco

Paro cardíaco

El paro cardiaco tiene lugar cuando el flujo de circulación de la sangre en el organismo disminuye. Lo que ocurre, en este caso, es que las contracciones del corazón irán siendo cada vez más débiles e irregulares.

De esta forma, las diferentes partes de nuestro organismo comenzarán a recibir un suministro de oxígeno insuficiente. A causa de esta disminución en la cantidad de oxígeno, la persona perderá la consciencia.

Ataque al corazón

Un ataque al corazón, mejor conocido como infarto, tiene lugar cuando el flujo sanguíneo se corta, en un punto concreto del corazón, por lo general, como consecuencia de la obstrucción de las arterias. A su vez, esto ocasiona que las células de dicho punto, mueran.

Si no se proporciona el tratamiento oportuno, con el tiempo, estas modificaciones en el suministro de sangre y oxígeno al corazón causarán un daño grave al músculo cardíaco y los otros tejidos.

Los síntomas asociados a un ataque al corazón que debemos reconocer para actuar con rapidez incluyen los siguientes:

¿Cómo aplicar el “Cough CPR”?

  • Acudir a urgencias o solicitar ayuda médica a domicilio si el dolor de pecho no desaparece a los 3 minutos.
  • No importa lo que estemos haciendo. En el supuesto de que vayamos conduciendo, pararemos el vehículo rápidamente y llamaremos a los servicios sanitarios.
  • Permanecer quietos para que el músculo cardíaco agotado no trabaje demasiado. 
  • Aflojar cualquier prenda ajustada.
  • Golpear fuerte la zona del pecho también ayuda a frenar un ataque al corazón.
  • Es importante evitar en todo lo posible conducir uno mismo, ya que, en cualquier momento, se puede perder el conocimiento: mientras se conduce, y ello traería fatales consecuencias (no solo para quien está sufriendo el ataque al corazón, también para los peatones que haya en la calle, otros vehículos, etcétera).
  • Si es la primera vez que se tiene un infarto, tomar una aspirina es una buena ayuda para mejorar el flujo de sangre.
  • Si ya se está recibiendo un tratamiento médico, seguramente habrá algún tipo de medicamentos betabloqueadores que pueden ayudar a parar y controlar el ataque al corazón.
  • Si estás con alguien que sufre un infarto, está inconsciente, no respira y no tiene pulso deberás iniciar RCP si conoces la técnica. En caso contrario, llama al servicio local de emergencias y ellos te indicarán como hacerlo.

Consejos para cuidar tu corazón

Cuida el corazón
  • El ejercicio físico es fundamental. En el gimnasio, o bien con una caminata al día por la mañana o por la tarde.
  • El ajo crudo contiene una sustancia denominada alicina, muy positiva para la salud del corazón.
  • Dormir bien. Es importante tener un buen hábito de sueño y lograr un descanso adecuado.
  • Las vitaminas del complejo B pueden ampliar los vasos sanguíneos, y conseguir que la circulación de la sangre sea fluida.
  • Una vida sexual plena ayuda a mantener el corazón sano.
  • La presión arterial debe ser controlada regularmente. Hay que mantenerla estable para prevenir un ataque de corazón repentino.
  • Es preciso evitar el tabaquismo y el alcoholismo para poder tener una buena salud cardiovascular. En caso de que se fume, será necesario eliminar dicho hábito cuanto antes.

Como puedes ver, toser no es un método efectivo para frenar un ataque al corazón. Sin embargo, la identificación oportuna de los síntomas permitirá tomar las medidas adecuadas para evitar sufrir daños irreversibles. Además, la práctica de hábitos saludables promoverá la salud cardiovascular y evitará las patologías que afecten a este órgano tan importante.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.