Trucos para controlar los cálculos renales durante el embarazo

Evitar el exceso de azúcar, así como la cafeína presente en el café y los refrescos, es fundamental para evitar la posible formación de cálculos renales durante el embarazo
Trucos para controlar los cálculos renales durante el embarazo
José Gerardo Rosciano Paganelli

Revisado y aprobado por el médico José Gerardo Rosciano Paganelli.

Escrito por Okairy Zuñiga

Última actualización: 11 julio, 2023

Controlar los cálculos renales durante el embarazo puede ser difícil para algunas mujeres. Pese a estas dificultades, se trata, sin duda, de unas de las etapas más interesantes en la vida de cualquier pareja, especialmente de la mujer.
Durante este período tendrás ciertos requerimientos para asegurarte de que tanto el bebé como tú estáis en buen estado.

En el caso de los cálculos renales, estos no son un impedimento para quedar embarazada, si bien pueden alterar el curso normal de la gestación.
Descubre en este artículo algunos trucos para controlar los cálculos renales durante el embarazo. Ahora bien, ¡no olvides consultar a tu médico! Su opinión es la que ha de prevalecer en cualquier caso. 

¿Qué son los cálculos renales?

Los cálculos renales son minúsculas formaciones de residuos (oxalatos, ácido úrico, calcio, fosfatos o cistina, entre otros) que se compactan.

Suelen aparecer cuando incluyes en tu dieta demasiados minerales que no son utilizados apropiadamente por el organismo.

Lo normal sería que estas pequeñas piedras no aparecieran, sino que el agua eliminara el exceso de minerales. Sin embargo, el consumo abundante de alimentos procesados o la falta de agua pueden facilitar su aparición.
Los cálculos renales durante el embarazo suelen ser tratados con analgésicos y antiespasmódicos. Aunque esto no elimina el problema, sirve para sobrellevarlo hasta que nace el bebé y se pueden emplear otros tratamientos.

En los casos de embarazo, hay varios factores extra que pueden facilitar la aparición de cálculos renales:

  • El aumento de los niveles de progesterona en la sangre.
  • El crecimiento progresivo del feto.
  • La disminución de la función normal de los riñones.

Cómo controlar los cálculos renales durante el embarazo

Lo mejor para lidiar con los cálculos renales durante el embarazo es prevenir su aparición.  En caso de que ya estén ahí, sigue estos consejos para evitar que se hagan más grandes y causen molestias durante esta hermosa etapa.

1. Disminuye tu consumo de azúcar

Siempre debes tener cuidado de no consumir demasiada azúcar. Además de provocar problemas como el síndrome metabólico o la diabetes, puede ocasionar diabetes gestacional.

Terrones de azúcar.


Uno de los grandes problemas al seguir esta indicación son los antojos. Algunas mujeres sienten la necesidad de comer alimentos dulces durante los primeros meses de embarazo .
Si es tu caso, opta por satisfacer este antojo con:

2. Mantén un peso saludable

Otro truco para controlar los cálculos renales durante el embarazo es mantenerte en tu peso adecuado. Ten en cuenta que durante esta etapa subirás algunos kilos por el crecimiento natural del bebé .
Por esto, asegúrate de vigilar lo que comes y recuerda que hacer ejercicio es fundamental. Muchas mujeres caen en el error de permitir el aumento excesivo de peso pensando que es lo normal. A cumular 10 o más kilos es sumamente perjudicial para tu salud y la de tu bebé.
Si tienes dudas, pregunta a tu médico o acude a un nutricionista para que te indique un régimen que permita tu correcta nutrición y la de tu bebé sin acumular demasiada grasa.

Quizás te interese: 7 mitos más famosos sobre el embarazo

3. Haz suficiente ejercicio

En todos sitios hemos escuchado que al día debemos realizar, al menos, 30 minutos de ejercicio. Esta recomendación es especialmente importante si quieres controlar los cálculos renales durante el embarazo.

Mujer caminando.

Cuando tienes este problema y no te ejercitas, la zona de los riñones comienza a resentir la presión ocasionada por el bebé. Para controlar esta molestia y disminuirla, es una idea caminar, ya que:

  • A través de este ejercicio puedes reducir la inflamación, o evitar que aparezca.
  • Además, al caminar ayudas a tu bebé a encontrar una mejor posición para el momento de su nacimiento. Esto facilitará en gran medida el parto.

Por todo esto, no es raro que tu ginecólogo le dé especial énfasis al ejercicio durante todo el embarazo.

4. Evita el consumo de refrescos y café

Sabemos que muchas mujeres no pueden empezar su día sin una buena dosis de cafeína. Sin embargo, durante el embarazo es mejor que lo evites.
Y es que se trata de una bebida irritante que puede aumentar las molestias relacionadas con la inflamación en la zona cercana a los riñones.
Por su parte, el refresco también debe ser evitado a toda costa. El problema con esta bebida es la gran cantidad de azúcares y sodio.
Ambos elementos en conjunto pueden aumentar las posibilidades de formación de cálculos renales.

5. Bebe suficiente agua

Sin importar si ya tienes problemas de cálculos renales durante el embarazo o si los has tenido antes, es importante que tu consumo de agua sea el adecuado.

Es recomendable beber suficiente agua en el embarazo para controlar los cálculos renales.


Lo ideal es tomar dos litros de agua natural a lo largo del día. Esta agua debe ser completamente natural, sin edulcorantes ni ningún otro elemento.

Además, esta cantidad de líquido debe ser consumida a lo largo del día y no toda en un pequeño lapso de tiempo. Esto contribuirá a eliminar de forma efectiva esos minerales que estás consumiendo en exceso.

En resumen…

Con estos 5 trucos estamos seguros de que ya no tendrás muchos problemas para lidiar con los cálculos renales durante esta etapa.  ¡Ponlos en práctica y disfruta de tu embarazo en plenitud! 
Ahora bien, te volvemos a recordar que siempre debes consultar a tu médico si crees que te estás enfrentando a un problema de salud importante, sobre todo durante el embarazo.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.