¿Es verdad que el estrés puede afectar el bebé en el vientre?
El artículo ha sido verificado para garantizar la mayor precisión posible (el contenido incluye enlaces a sitios de medios acreditados, instituciones académicas de investigación y, ocasionalmente, estudios médicos). Todo el contenido de nuestro sitio web se ha revisado, sin embargo, si consideras que nuestro contenido es inexacto, desactualizado o dudoso, puedes contactarnos para realizar las correcciones necesarias.
A lo largo del embarazo ocurren importantes cambios en el cuerpo de la madre. En ocasiones, estos llegan a generar un nivel de estrés que puede afectar al bebé en el vientre. Se debe a que las variaciones hormonales influyen de distintas formas en el estado emocional materno.
Entre los cambios físicos aparecen las náuseas y señales de cansancio que suelen venir acompañadas de giros en el humor. Aprender a controlarlos será clave para evitar que se conviertan en estrés crónico, perjudicial para la salud fetal.
¿Cuáles son las causas de estrés durante el embarazo?
Las causas de estrés varían en cada mujer de acuerdo a su historia clínica y a la circunstancia en que ha quedado embarazada. Sin embargo, entre las más comunes se consideran las condiciones específicas de la gestación que provocan malestares físicos por los cambios hormonales.
El estrés altera el perfil hormonal de la madre liberando más cantidad de cortisol. El aumento de esta hormona en el entorno fetal se asocia a un deficiente desarrollo cerebral del bebé.
Tipos de estrés
Los motivos que activan el estrés, su duración y el nivel de afectación en la madre serán determinantes para evaluar el efecto final, así como el grado de incidencia que puede tener sobre el bebé.
Cambios físicos
Los malestares típicos del embarazo pueden desarrollar un tipo de estrés pasajero que no origina problemas al bebé. Son las molestias como dolor de espalda, estreñimiento, cansancio en piernas, taquicardias, micción frecuente y sudoraciones, entre otras, vinculadas a las transformaciones que trae consigo la gestación.
Trabajo
Algunas veces las condiciones laborales causan más presión de la que toleran las embarazadas. El no poder cumplir los objetivos causa estrés. Si sentimos que las exigencias del trabajo sobrepasan las capacidades, quizás es hora de evaluar la baja maternal.
Relaciones familiares
Otras factores que producen estrés durante el embarazo están vinculados a la existencia de una relación de pareja conflictiva o al abandono del padre. También el rechazo de un familiar hacia la gestación, principalmente si se trata de los progenitores de la embarazada.
Miedo al parto y al desarrollo del embarazo
Las expectativas que se van creando las madres sobre la salud del bebé pueden llenarlas de temores que se convierten en estrés. Sobre todo cuando se les ha informado la posibilidad de tener un embarazo de alto riesgo.
Por otro lado, la incertidumbre ante el tipo de parto que tendrán, la posibilidad de una cesárea o complicación latente son factores que causan estrés. Cuestión que se intensifica en el caso de las primerizas.
Condiciones económicas
Del mismo modo, a las embarazadas les afectan las limitantes económicas durante el embarazo o las dificultades que al respecto proyectan en la crianza.
Duelo o enfermedad
Tener a un familiar padeciendo una enfermedad terminal o enfrentar la pérdida de un ser querido son situaciones que pueden ocasionarnos tristeza y ansiedad. Si pasan los días y creemos que no superamos estos sentimientos o estamos con una sensación de estancamiento, es conveniente buscar ayuda con un terapeuta.
Rechazo social
Ser víctima de racismo, en cualquiera de sus formas, puede originar un estrés duradero en la madre del que probablemente le cueste reponerse sin ayuda. No dejar avanzar el estrés es lo mejor para cursar un embarazo saludable.
Eventos externos
Eventos naturales o artificiales catastróficos nos exponen a un nivel de estrés importante en cualquier caso, haya o no un embarazo. Nos referimos a terremotos, incendios, huracanes, tormentas, guerras o ataques terroristas.
¿Cómo me está afectando el estrés?
El estrés puede afectar a la madre y al embarazo con señales que se manifestarán a medida que la tensión se prolongue. En la madre se vincula con un incremento de la presión sanguínea y un debilitamiento de la acción del sistema inmune.
A su vez, al estar estresada se podría asumir una tendencia hacia hábitos alimenticios poco saludables que deriven en una diabetes gestacional o en un sobrepeso que desencadene otros problemas. Además, el estrés aumenta la probabilidad de tener un aborto o un parto prematuro con un bebé de bajo peso.
Sigue leyendo: 13 factores que pueden causar un parto prematuro
¿Puede el estrés afectar a mi bebé?
Sí, el estrés puede afectar al bebé en el vientre, según revela un estudio reciente expuesto en el III Congreso Internacional Virtual de Enfermería y Fisioterapia. El momento en el que se encuentra el embarazo influye en cómo se manifiestan los efectos en el feto. Veamos algunas consecuencias.
Malformaciones congénitas
La investigación vincula el estrés materno con malformaciones congénitas, como cardiopatías. Incluso lo asocia a la aparición del labio leporino. Asimismo, las consecuencias pueden recaer sobre su desarrollo causando una disminución de la formación ósea.
Esto puede ocurrir cuando el factor estresante se produce por mucho tiempo durante el primer trimestre de gestación. Se hacen necesarios estudios más amplios para determinar estos hallazgos, por lo que se sugiere que sean tomados como información orientativa.
Alteraciones neurológicas
Otro artículo asocia alteraciones del desarrollo cognitivo y problemas de conducta de algunos niños con la exposición al estrés materno-fetal. Aquí podemos mencionar los retrasos en el desarrollo del lenguaje, la hiperactividad, el déficit de atención en la infancia y un menor desarrollo de las habilidades intelectuales y psicomotoras.
Practicar hábitos saludables evita situaciones de estrés que pueden afectar al bebé en el vientre
Practicar hábitos saludables disminuye los desencadenantes de escenarios que producen estrés durante el embarazo. Hablamos de llevar una dieta balanceada, hacer una rutina de ejercicios apta y practicar técnicas de relajación. También caminar y escuchar música resultan acciones propicias para alcanzar equilibrio emocional.
Recordemos que estamos transitando un momento de la vida que es novedoso y trascendental, por lo que podemos tener cierta vulnerabilidad psíquica. Es necesario que seamos sinceras con el profesional a cargo del control si sentimos que algo no va bien. Pues así tendrá herramientas para hacer asociaciones que le permitan orientarnos para salir del clima estresante.
Te podría interesar...