¿Cuáles son los principales motivos para correr?
Mucha gente que se está iniciando en el deporte de correr se pregunta cuáles son los principales motivos para practicarlo. Y es que es difícil cuantificar cuántos motivos existen, pues hay uno por cada persona que lo practica. Pese a los diferentes motivos, lo cierto es que el running crece a ritmos agigantados y ya no se trata de una moda pasajera.
Cuando una persona prueba salir a correr pueden pasar dos cosas. Por un lado, que encuentre razones para salir el día siguiente, o por el otro, que el ejercicio se quede aparcado y no se vuelva a retomar.
Correr es un ejercicio que no deja indiferente a nadie. Todas las personas que lo han practicado tienen una opinión fuerte, bien positiva o negativa. Aquellos que tienen la suerte de experimentar placer mientras corren tienen facilidad para encontrar razones para su entrenamiento.
A continuación, exploraremos los principales motivos que relatan los deportistas para salir a correr.
Experimentar una enorme sensación de libertad
Una de las cosas más atrayentes de correr es la gran sensación de libertad que se siente cuando se practica un deporte al aire libre. Cuando se corre por la ciudad o por la naturaleza la única barrera que existe es el cansancio físico.
Esta sensación no es posible conseguirla en otros ejercicios que se realizan en un espacio cerrado, por ejemplo un gimnasio. Incluso, tampoco se siente cuando se corre en una cinta. Es necesario sentir que el espacio no tiene barreras, y que uno puede llegar tan lejos como quiera.
Sentir que uno es libre es una de los sentimientos más placenteros que existen. Sumado al placer que supone el ejercicio de correr, el resultado es una tormenta de endorfinas recorriendo el cuerpo.
Reduce el estrés y las emociones negativas
Todos los ejercicios tienen el poder de mejorar el estado de ánimo. En el caso de correr esto no es una excepción, la práctica continuada de este deporte tiene un enorme poder para cambiar las emociones negativas.
Cuando una persona está en plena carrera quizás no esté experimentando mucho placer, seguramente lo que esté sintiendo es incomodidad y fatiga. Sin embargo una vez que la fatiga se va, las emociones positivas empiezan a aparecer, y son mucho más duraderas.
Un artículo realizado por la Universidad Nacional de la Plata defiende que correr es un ejercicio en el que están presentes las sensaciones positivas -como la euforia, la plenitud y la satisfacción-, pero también existen otras emociones opuestas que invaden continuamente la experiencia, como el cansancio y la presión. Aun así, la buena noticia es que el balance está a favor de las positivas.
Oxigena bien el cerebro
Correr es un excelente ejercicio para trabajar el sistema cardiovascular. A diferencia del entrenamiento de fuerza, en el que se trabajan más la resistencia de los músculo, el ejercicio cardiovascular requiere un esfuerzo constante del corazón y los pulmones.
Para poder aguantar un entrenamiento es imprescindible que el oxígeno llegue bien a todos las partes del cuerpo. Por ello, hay que aprender a coordinar el movimiento con la respiración. Además, el hecho de saber controlar la respiración tiene consecuencias positivas sobre el cerebro.
Estas consecuencias positivas hacen referencia al aumento de la oxigenación que se produce en este órgano. Cuando el cerebro recibe más oxígeno por el ejercicio físico aumenta el índice de perfusión, y con ello el funcionamiento cognitivo, según un estudio publicado en la revista American Geriatrics Society realizado con personas jubiladas.
Encuentra tu motivo personal y cógele el gusto a correr
Para engancharse a cualquier modalidad de ejercicio solo hace falta un motivo para continuar. Los motivos son una parte fundamental para alimentar la motivación, y así persistir a pesar de las dificultades.
En el caso de correr encontrar los principales motivos es más importante pues es un ejercicio que genera fuertes sensaciones desagradables de fatiga. A pesar de esto, encontrar razones no es tarea difícil. Tan solo es necesario pensar en qué se espera conseguir del ejercicio, qué es lo que quiere conseguir uno. Encontrar el propósito es muy buen punto de partida y a partir de ahí solo hace falta explotarlo al máximo.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Gil, G. J. (2020). Correr, sufrir, disfrutar. El cuerpo como instrumento de investigación. Educación Física y Ciencia, 22(3), 139-139.
- Rogers, R. L., Meyer, J. S., & Mortel, K. F. (1990). After reaching retirement age physical activity sustains cerebral perfusion and cognition. Journal of the American Geriatrics Society, 38(2), 123-128.