6 trucos para despejar tu nariz taponada en cuestión de minutos
Los catarros son una constante en nuestras vidas, especialmente en las épocas en las que estamos expuestos a continuos cambios de temperatura, como en la entrada de la primavera o del otoño.
Los resfriados traen consigo malestar general que se ve incrementado cuando, además, tenemos la nariz taponada.
En primer lugar, no llega suficiente oxígeno a nuestro cuerpo y, en segundo lugar, si intentamos respirar por la boca, la calidad del mismo será deficiente.
Esta es la razón por la que encontrar un modo para despejar una nariz taponada es importante, ya que ayudará a mitigar las molestias de los procesos catarrales.
Así, presta mucha atención a los siguientes trucos para despejar la nariz.
1. Picante
Los alimentos picantes disuelven la mucosidad y, por tanto, te ayudarán a despejar tu nariz.
Para aprovecharte de sus propiedades, añade a tus comidas ingredientes como la cebolla o el ajo, preferiblemente en crudo, condimentos como el wasabi o pimientos picantes, como el jalapeño o el chile serrano.
Eso sí, no te pases con la ingesta. Demasiados alimentos de este tipo podrían hacerle daño a tu estómago.
2. Masajea tus senos nasales
Los senos nasales son los espacios que se encuentran justo al lado del tabique nasal.
Aquí se acumula una gran cantidad de mucosidad, por lo que al aplicar un masaje circular en la zona, contribuirás a su disolución y a una distribución menos molesta de la misma.
¿Cómo hacerlo?
- Usa los dedos índice y corazón y coloca las yemas de los dedos sobre los senos, justo debajo de la oquedad ocular, y muévelos de manera circular.
- Durante 20 ó 30 segundos, ocúpate de las zonas más cercanas a la nariz y, posteriormente, de las que están justo debajo de los ojos.
- Por último, apoya los pulgares sobre las mejillas y haz movimientos circulares hacia afuera.
3. Controla la respiración
¿Alguna vez se te han taponado los oídos y te has tapado la nariz para solucionarlo? Si es así, estarás bastante relacionado con esta técnica, aunque no es exactamente igual.
¿Cómo hacerlo?
- Respira hondo y tápate la nariz. A continuación, con la nariz en la misma posición, intenta expulsar el aire mientras caminas hasta que empieces a sentir cierta incomodidad.
- En este momento, quita las manos y respira la normalidad, siéntate y comprobarás cómo en unos minutos habrás conseguido despejar tu nariz.
- También puedes beneficiarte de las técnicas de respiración para relajarte.
4. La tradición manda: aplica una solución salina
En este caso tienes dos opciones: comprar el líquido en la farmacia o elaborarlo por tu cuenta en casa. En el caso de que optes por preparlo en casa, sólo tienes que hervir agua con sal y dejarla enfriar.
Una vez lista, usa una jeringa para verter el líquido por tus fosas nasales para que funcione como disolvente y despeje la nariz taponada inmediatamente.
5. La menta: enemiga de la mucosidad
La menta se ha usado desde antaño en los catarros para aliviar cualquier problema respiratorio, debido a que contiene ácido acético y ácido ascórbico.
La potencia de estas sustancia es tan efectiva que con usar un par de veces los inhaladores de mentol o acercándote el clásico ungüento mentolado a las vías respiratorias, sofocarás tus problemas en unos minutos.
6. Date una ducha caliente
El vapor de agua traspasará tu sistema respiratorio, de manera que diluirá la masa que impide que te llegue la cantidad de aire necesaria.
Además, seguro que cierta cantidad de agua caliente se introducirá directamente en la nariz, con lo que conseguirás que se descongestione.
No tengas miedo de empeorar tu estado con esta ducha para despejar tu nariz. Cuando salgas del baño, sécate bien y no habrá problema. Además, ten en cuenta que debes librarte de los microbios que te producen los estornudos o la tos.
Toma buena nota de estos consejos ya que, lamentablemente, tarde o temprano todos terminamos necesitándolos.
Gracias a ellos, podrás ganar bienestar cuando tú o alguien de tu entorno contraiga un resfriado. Merece la pena intentarlo.
Imagen principal cortesía de © wikiHow.com
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.