Manos frías: causas y consejos para evitarlas

¿Siempre tienes las manos congeladas? En este artículo te ofrecemos las causas del problema y algunos tips para no tener manos frías.
Manos frías: causas y consejos para evitarlas
Gilberto Adaulfo Sánchez Abreu

Revisado y aprobado por el médico Gilberto Adaulfo Sánchez Abreu.

Escrito por Yamila Papa Pintor

Última actualización: 31 mayo, 2023

No importa si es invierno o verano, siempre tienes manos frías. La temperatura de tus manos parece siempre mantenerse varios grados por debajo de otras partes del cuerpo. ¡Aunque las pongas encima del horno o calefactor!.
Si bien en lo meses fríos esto puede ser algo normal, hay que prestar atención a la situación si continúa en los cálidos. ¿Por qué? Porque puede deberse a un trastorno de salud. En este artículo te mostramos las causas del problema y algunos tips para no tener manos frías.

¿Por qué siempre tengo las manos “congeladas”?

Calentar manos frías

Aunque te pongas guantes o estés a pleno sol tus dedos parecen recién sacados del congelador. Este trastorno es más común de lo que crees. Muchas personas lo sufren en cualquier momento del año.

Es verdad que algunos individuos son más friolentos que otros, pero las manos frías van más allá de una simple consecuencia de la estación en la que nos encontramos.

La sensibilidad al frío surge de repente y hasta lo consideramos normal. Sin embargo, puede deberse a un problema de salud que vale la pena atender.

Nuestro organismo nos ofrece muchas señales para indicarnos que algo falla. El dolor o la fiebre, por ejemplo, son signos que nos aporta para que podamos identificar dolencias. En el caso de tener las manos frías constantemente puede deberse a:

Hipotiroidismo

Es un trastorno de la tiroides que, entre otras cosas, puede provocar mayor sensibilidad al frío, sobre todo en manos y pies. Para saber si el hipotiroidismo es la razón de tus extremidades congeladas, puedes hacerte un análisis de sangre que detecte anomalías en esta glándula.

Síndrome de Raynaud

Si bien no es una enfermedad grave, provoca que las manos y pies no reciban suficiente sangre. Por lo tanto, se enfrían. Este síndrome se traduce en espasmos vasculares y sobre todo afecta a los dedos. En menor medida se puede sufrir en la nariz o las orejas. Así lo muestra este estudio.

El mismo estudio continúa explicando que, causa cambios de coloración (azul) y hasta adormecimiento. Los problemas de circulación sanguínea se pueden tratar haciendo ciertos ejercicios o mediante masajes.

Anemia

Uno de los síntomas más comunes de la anemia o del déficit de hierro en la sangre es padecer de piel fría en general y en las manos en particular.

Peso inferior al normal

Aquellas personas con peso insuficiente pueden padecer problemas de temperatura en sus extremidades. Por ejemplo, las mujeres que son muy delgadas (con poca grasa corporal) tienen menos capacidad para mantener el calor en el cuerpo. En ese caso se recomienda comer alimentos más calóricos.

Consejos para evitar manos frías

Con la llegada del invierno y las bajas temperaturas la sangre tiene dificultades para llegar a las extremidades. Los vasos sanguíneos se cierran y esto empeora el cuadro.

Las personas contamos con un sistema de defensa mixto contra el frío. Está compuesto por grasa y pelo. Ya que las manos no tienen vellos en la palma y tampoco demasiada grasa es más probable que se enfríen.

Muchos optan por colocarse frente al radiador o calefactor para calentarse las manos. Sin embargo, cuando van al baño, salen al trabajo o tienen que preparar la comida otra vez aparece el problema. Algunos consejos que te pueden ayudar, si sueles sufrir bastante esta sensación de congelamiento en los dedos, son:

Lleva guantes a todos lados

No los dejes olvidados y ten siempre un par en el bolso o maleta. Los materiales con que fueron confeccionados los guantes abrigan, evitan que la piel se reseque y ayudan a equilibrar la temperatura corporal. Es mejor que estén hechos con fibras naturales (lana o algodón) porque alejan la humedad.

Es preciso ponerse los guantes antes de salir de casa cuando las manos aún no están tan frías, ya que después se necesita bastante tiempo para que entren en calor. Esta protección debe seguirse sin excepción en los que tienen Síndrome de Raynaud.

Usa crema para manos

Usa crema para evitar manos frías

Ya que aporta grasa a la piel, permite que el umbral de dolor o enfriamiento se reduzcan. Se aconsejan también las lociones, pero que no sean demasiado líquidas. Puede aplicarse la crema antes de colocarse los guantes para reducir a la mitad la sensación de frío.

Si, además, en el invierno tienes manos agrietadas sería bueno que usaras una crema con base de lanolina. Esta cera natural evita los cortes en la piel.

No fumes

El tabaco empeora la sensación de frío y la circulación de la sangre. La constricción de los vasos provoca descenso de temperatura. Este cuadro empeora en la gente joven que fuma.

Por lo tanto, si tienes el hábito del cigarrillo haz lo posible para dejarlo lo antes posible. Además, esto traerá muy buenas consecuencias para tu organismo.

Sumerge en agua tibia

Es un error pensar que el agua caliente o casi hirviendo es lo mejor para eliminar el frío de las manos. Por un lado, porque te puedes quemar, y por otro, porque el cambio será demasiado brusco y te dolerá. Además, te puede provocar desequilibrios en la contrición de los vasos sanguíneos.

Abraza a tus seres queridos

Puede abrazar a tu pareja, tus padres o incluso tu mascota. Tener contacto con el cuerpo de otra persona es la mejor manera de mantener el calor en las manos o brazos.

También puedes aprovechar que otras áreas de tu cuerpo tienen la temperatura adecuada (de 37°C) para calentar las partes frías. ¡Prueba a sentarte y poner las manos entre las piernas!

Sigue estos tips y ten manos tibias y agradables. Sin embargo, si estos consejos no mejoran la temperatura de tus manos, es recomendable que visites a un médico y descartes algún problema médico.


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