11 señales de cortisol alto en tu organismo
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El cortisol es una hormona que se produce en la glándula suprarrenal. Esta sirve para aumentar el nivel de azúcar en la sangre, pero tiene el inconveniente de que disminuye la formación ósea y puede causar algunas enfermedades como el sobrepeso. El cortisol alto en el organismo se conoce como hipercortisolemia.
Este síndrome conlleva a estrés corporal y a una concentración de grasa, elevación de los niveles de presión arterial y de frecuencia cardíaca. Tal y como señalan los expertos, los receptores del mensajero están en casi todos los tejidos del cuerpo: sistema nervioso, inmunitario, cardiovascular, respiratorio, reproductivo, musculoesquelético e integumentario.
Debido a ello, un desajuste en los niveles de la hormona puede afectar a todos estos sistemas. En un principio, son diversas las señales que emite el cuerpo cuando tiene un desequilibrio como este. Sigue leyendo y descubre otros síntomas que a continuación te detallamos.
Los niveles de cortisol en el organismo y la salud: ¿Cuándo es un problema?
Lo primero que hay que aclarar es que los niveles de cortisol varían a lo largo del día. De acuerdo con la evidencia, su concentración en la sangre aumenta temprano en la mañana, y alcanza su nivel máximo alrededor de las 8 a. m. Se mantiene en mayor o menor medida estable en el transcurso del día, para luego disminuir ligeramente por la noche y durante las primeras fases del sueño.
La hormona está relacionada con el estrés. Los expertos han encontrado que su liberación continúa muchas horas después del catalizador estresante, así que su homeostasis puede tomar tiempo. La hormona se distribuye a regiones como la saliva, el líquido cefalorraquídeo, el sudor, el cabello y la orina. Puede entonces medirse por estas vías, siendo la saliva la más común.
En síntesis, el cortisol varía de acuerdo con la hora del día y las situaciones estresantes. Esto se considera normal. Se dice que existe un problema cuando su aumento se posterga durante días, y lo hace con independencia de los mecanismos que lo regulan.
Su desregulación en positivo se conoce como hipercortisolemia. La exposición excesiva de los tejidos a esto recibe el nombre de hipercortisolismo. Se tratan de estados diferentes, de manera que no se deben confundir. Si el hipercortisolismo se mantiene, pueden dar lugar al síndrome de Cushing.
11 señales de cortisol alto en el organismo
Aunque no se presentan en todos los casos, existen algunas señales que podrían indicarte que algo no va bien en tu organismo y que quizá puedes tener el cortisol alto. ¿Quieres saber cuáles son? ¡Vamos a ello!
1. Aumento de peso repentino
El aumento de peso es uno de los primeros síntomas del exceso de cortisol. Este es especialmente notable en la parte superior del cuerpo, debido a que la grasa se empieza a acumular en lugares como hombros, pecho y espalda.
Lo extraño de la situación es que los brazos y las piernas de la persona seguirán estando delgados. Realmente ocurre una redistribución de la grasa corporal.
Un trabajo publicado en Progress in Cardiovascular Diseases encontró que la fructosa en el cerebro estimula una mayor liberación de cortisol, lo que podría conducir a una resistencia general a la insulina y al aumento de peso. De igual modo, está establecido la hormona aumenta el consumo de alimentos con grasas y azúcares, otra vía que explica este síntoma.
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2. Síntomas cutáneos
La piel también se ve afectada por el hipercortisolemia. Por ello, la persona puede presentar los siguientes síntomas cutáneos:
- Acné.
- Hematomas.
- Aumento del vello facial y corporal.
- Lesiones púrpuras en los senos, el abdomen y los muslos.
Además de esto, se sabe que puede generar retraso en la cicatrización a través de múltiples vías, así como alteración de la barrera cutánea y sequedad. También se ha sugerido que puede generar inflamación, adelgazamiento y envejecimiento de la piel.
3. Síntomas musculares y óseos
Asimismo, los altos niveles de cortisol en el organismo afectan la salud de los músculos y los huesos. En pocas palabras, la estructura ósea se debilita y esto aumenta el riesgo de sufrir fracturas, en especial, en las costillas y la columna. A la par de ello, existe el riesgo de que el paciente presente con facilidad desgarros musculares y lesiones afines.
Para que logres dimensionar su impacto, a menudo las fracturas osteoporóticas son un síntoma clínico de un hipercortisolismo asintomático por otras vías. Sus concentraciones elevadas se han asociado con pérdida de fuerza de agarre en personas mayores.
4. Deficiencia en el sistema inmunitario
La glándula timo, que se encarga de regular el sistema inmunitario humano, se ve afectada por el cortisol. Esta hormona puede causar la muerte de células y hacer que el sistema inmunitario ataque los tejidos del cuerpo en vez de los virus.
- Asma y alergias son los síntomas más comunes de una falla en este sistema.
- No obstante, el problema se puede tornar aún más grave: puede ocasionar lupus, enfermedad de Crohn y fibromialgia.
Recientemente, se ha sugerido que el mensajero puede potenciar las respuestas inmunitarias. Así, puede estar detrás de procesos inflamatorios sistémicos, aunque aún son necesarios más estudios al respecto.
5. Humor cambiante y trastornos del ánimo
La ansiedad es uno de los síntomas más comunes que suelen aparecer cuando alguien se ve sometido a altos niveles de estrés. De hecho, el cortisol se considera uno de los marcadores más importantes en los trastornos de ansiedad, como señala la evidencia.
6. Insomnio y otros trastornos del sueño
Como ya hemos señalado, el cortisol mantiene un ciclo de secreción que disminuye por la noche. Los estudios apuntan a que la secreción diurna de cortisol ayuda a mantener el estado de vigilia, por lo que un aumento en su producción nocturna podría generar insomnio crónico. En especial, puede hacerlo con mayor fuerza en personas de la tercera edad.
Algunos expertos creen que el insomnio de las personas con diabetes se explica por esta vía, al menos parcialmente. Sin embargo, los resultados no son concluyentes, por lo que son necesarios más estudios al respecto.
7. Alteración de la función tiroidea
Un estudio publicado en Thyroid Research reseñó que existe una relación positiva entre los niveles elevados de la hormona estimulante de la tiroides (TSH) y el cortisol en mujeres y hombres sanos. Los valores se mantienen aún dentro de los rangos normales, pero en personas susceptibles puede ser mayor.
De igual modo, se ha informado que las personas con síndrome de Cushing desarrollan una alteración en el eje hipotálamo-hipófisis-tiroides. Esto deriva en una disfunción tiroidea, la cual se acentúa en los pacientes que están bajo tratamiento.
8. Disminución de la producción de insulina
Un trabajo publicado en PLOS ONE evaluó la relación entre los niveles altos de cortisol sérico y disminución de la secreción de insulina. Encontró que los sujetos con los niveles más altos presentaban una disminución de la segunda hormona. El impacto es leve, pero puede ser considerable en personas con resistencia a la insulina o con antecedentes familiares de diabetes.
9. Presión arterial alta
Si bien su impacto es leve, existe evidencia de que los desajustes en positivo de la hormona pueden incidir en el aumento de la presión arterial. Al igual que en el caso anterior, esto puede ser mayor en personas predispuestas o que ya padecen de hipertensión.
10. Complicaciones cardiovasculares
Algunos de los síntomas de cortisol alto en el organismo que hemos mencionado median en el desarrollo de manifestaciones cardíacas. Por ejemplo, la obesidad y el aumento de la presión arterial. Se sabe que los problemas cardiovasculares son la principal causa de morbilidad y mortalidad en pacientes con síndrome de Cushing.
11. Dolor de cabeza
Se ha establecido que las personas con migraña crónica tienen niveles más altos de cortisol. No se sabe muy bien si esto es una consecuencia de la migraña en sí misma, o viceversa. En todo caso, una elevación permanente de la hormona puede generar pequeños dolores de cabeza, como ocurre durante el estrés.
¿Qué hacer en caso de tener un nivel de cortisol alto?
Si consideras que presentas uno o varios de los síntomas mencionados, consulta con tu médico. De esta manera, podrás saber si tienes los niveles de cortisol altos en tu organismo y, más importante, qué cosa está detrás de ello.
Los valores normales de esta hormona en la sangre oscilan entre 5 a 25 microgramos por decilitro; también pueden indicarse como 140 a 690 nanomoles/litro.
La prueba se suele hacer por la mañana, y los laboratorios pueden utilizar valores diferentes a los señalados. Consulta con tu médico las alternativas disponibles, y ten en cuenta que el cortisol alto no se explica solo por el síndrome de Cushing. Los periodos estresantes en el trabajo, el estudio y la vida familiar son suficientes para explicar en desajuste.
En general, esta es la explicación más común de la alteración hormonal. Las enfermedades subyacentes también pueden ser un catalizador, y otros menos comunes son tumores en las glándulas suprarrenales. Se ha sugerido que los medicamentos anticonceptivos pueden elevar sus niveles, así como los corticosteroides utilizados para abordar diferentes enfermedades.
7 consejos para equilibrar el cortisol en el organismo
A continuación, te presentamos consejos para disminuir los niveles de cortisol en el cuerpo y llevar una vida más saludable.
1. Intenta dormir más
Cuida tu higiene del sueño, mantén los horarios, realiza rituales para relajarte antes de dormir, cena ligero y preferiblemente 3 horas antes de irte a la cama (como mínimo) y procura hacer todo lo posible para descansar bien todas las noches. Busca el ritual que más te agrade y ponlo en práctica.
Ten en cuenta que, aparte de reducir los niveles de cortisol en el organismo, disfrutar de un buen descanso nocturno te permitirá lucir más joven y estar más sano.
2. Mantén los niveles de azúcar estables
Mantén una dieta equilibrada, rica en alimentos nutritivos y deja de lado las bebidas industriales, los procesados, los congelados y afines. Consume frutas a diario, prepárate comidas completas, compuestas de carbohidratos, proteínas y fibra para mantener el azúcar controlado.
También es recomendable consumir alimentos ricos en vitamina B, calcio, magnesio, cromo, zinc, vitamina C y ácido alfa-lipoico (ALA).
3. Di adiós al café
La cafeína tiende a aumentar el nivel de cortisol en la sangre en personas en reposo o sometidas a estrés mental. Sin embargo, los efectos en algunos casos pueden durar 18 horas. Si tu intención es disminuir tu metabolismo catabólico y aumentar tu metabolismo anabólico, no bebas más café.
4. Haz ejercicio
Los conocidos beneficios de tener una rutina regular de ejercicios, como ganar masa muscular y aumentar la producción de serotonina y dopamina, harán que corras menos riesgo de sufrir de ansiedad o depresión. Además, hacer ejercicio te ayudará a evitar el desequilibrio de cortisol en tu organismo.
5. Mantente hidratado
No olvides que el organismo necesita cierta cantidad de agua al día para poder realizar sus funciones correctamente; esto incluye al equilibrio hormonal.
6. Evita el consumo crónico de alcohol
Esta sustancia también estimula la producción de cortisol a través de la estimulación del eje hipotálamo-hipófisis-glándula suprarrenal, de acuerdo con una investigación publicada por The Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism.
7. Controla las situaciones estresantes
Ya hemos señalado que las situaciones estresantes son la principal causa del cortisol elevado. Así, procura reducir la participación que el estrés tiene en tu día a día.
Otras cosas que puedes hacer para reducir el cortisol alto en el organismo
Una de las formas de evitar que el nivel de cortisol alto te juegue malas pasadas es no permitir que las situaciones estresantes te superen. Aunque hay muchas formas de controlarla, puedes intentar con lo siguiente:
- Aprende técnicas de respiración y utilízalas. Verás como la respiración profunda a diario te beneficiará no solo a nivel emocional, sino también en el plano biológico.
- Medita a diario u opta por cualquier otra técnica de relajación.
- Juega, pasea y también acaricia a tu mascota al menos un rato todos los días. Si no tienes una, considera responsablemente la opción de adoptar un perro o un gato. Verás cómo marca la diferencia.
- Procura distraerte de tus preocupaciones cotidianas. Escucha música, mira alguna película divertida, lee un libro, comparte un buen rato con amigos o familiares o busca un nuevo pasatiempo.
Recuerda que los síntomas descritos con anterioridad se pueden explicar por muchas vías. Así, lo mejor que puedes hacer es consultar con un profesional; en especial cuando las manifestaciones son muy notorias.
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