8 tips para estimular el punto G de la mujer
Aprender a estimular el punto G de la mujer de forma correcta ha sido un desafío y un misterio, durante décadas. De hecho, aún hoy resulta un tema controversial entre los expertos en sexo, ya que no todos reconocen su existencia.
Ahora bien, más allá de si es un mito o no, interesa seguir buscándolo con el objetivo de explorar diversas formas de placer. Para ello se recomienda una variedad trucos y técnicas que permiten estimularlo; aunque no hay que ir con prisas.
A continuación, te queremos compartir algunos tips para ayudarte a lograr este objetivo y estimular el punto G de la mujer, de manera que ambos puedan alcanzar el éxtasis. ¡No te los pierdas!
El punto G de la mujer
El punto G de la mujer es una zona ultrasensible. Se dice que se encuentra ubicado en la pared vaginal frontal, a unos 5 centímetros de la entrada.
Es una de las áreas erógenas más importantes. Y tal y como explica un artículo publicado por la Revista de terapia sexual y marital , su estimulación es capaz de producir una fuerte excitación, que se puede manifestar en múltiples orgasmos.
El punto G de la mujer se percibe con facilidad cuando ella está demasiado excitada. Esto sucede porque las glándulas de la zona se hinchan y adquieren una textura rugos a, similar a la forma de una mora.
Tips para estimular el punto G de la mujer
Apunta los siguientes consejos para estimular el punto G de la mujer, de manera que ella llegue al éxtasis, consiguiendo un placer irresistible. Sigue estos pasos.
1. Ubicar el punto G
Para empezar a disfrutar de los placeres que se desencadenan a partir de la estimulación del punto G de la mujer, es fundamental ubicarlo bien. De acuerdo con lo que se explicó, se sitúa en la pared anterior de la vagina, detrás del hueso del pubis.
No obstante, una investigación publicada en 2010 por The Journal of Sexual Medicine explica que, dependiendo de cada quien, en unos casos está “a mitad de camino” entre la entrada y el fondo; y otras lo tienen un poco más adentro.
- Para encontrarlo lo ideal es introducir el dedo en la vagina, palpando a unos 4 o 5 centímetros. Tras ubicar una zona más bien rugosa, inicia esta experiencia.
- Al tocarlo, ella puede sentir un endurecimiento de la zona, debido al flujo sanguíneo, y como un deseo de orinar.
Ver también 6 cosas que perjudican tu salud vaginal
2. Estimular el clítoris
La sensibilidad del punto G aumenta si antes se estimula el clítoris. De hecho, cuando hay dificultades para encontrarlo, este tipo de provocación previa puede facilitar su detección.
- Los movimientos lentos y circulares con el dedo o la lengua pueden ser suficientes para aumentar la sensibilidad de esta zona. Lo ideal es masajearlo hasta que la excitación sea notoria.
3. Mover los dedos
El movimiento de los dedos sobre el punto G es determinante para desencadenar el placer. Mientras que una presión constante resulta incómoda, los toques intermitentes son excitantes.
La forma más recomendable de mover los dedos es imitando el gesto de “ven aquí”. Al curvar y extender los dedos a diferentes ritmos, la sensibilidad de la zona incrementa de manera sorprendente.
4. Diferentes posturas para estimular el punto G de la mujer
Puede que algunas prefieran iniciar la experiencia con la clásica posición tumbadas de espaldas. No obstante, para elevar el placer, hay posturas más favorables que permiten acceder con más precisión a la zona.
- Una de las formas recomendadas es la posición de perrito. En esta, el hombre puede trabajar desde atrás; alcanzando con facilidad la zona anterior de la vagina. De hecho, desde esta postura también es capaz de estimular la zona con su pene erecto.
- Otra posición excitante es la mariposa: ella se pone al borde de la cama o en una superficie firme, abriendo las piernas, mientras él realiza el trabajo de pie.
Por supuesto, además de las posturas sugeridas, aconsejamos que ambos experimenten hasta encontrar las que consideren más cómodas y efectivas. ¡Hay variedad para elegir!
5. Utilizar un juguete sexual
Como has visto, es posible estimular el punto G de la mujer con los dedos o el pene erecto. Pero también hay juguetes sexuales cuya forma resulta idónea para elevar el placer, al hacer contacto con esta zona.
- Con este fin, lo ideal es elegir aquellos dildos con extremos curvados y texturas irregulares.
- También resulta conveniente usar los que ofrecen doble estimulación: punto G y clítoris.
Te recomendamos leer Estimulación sensorial: los sentidos que nos dan placer sexual
6. Presionar con suavidad
Algunas mujeres sienten más placer cuando se presiona el punto G en lugar de masajearlo. Pero, dado que cada quien lo percibe de una manera, es importante practicar una buena comunicación.
- Teniendo en cuenta que el área se rodea de terminaciones nerviosas, la presión debe ser suave para que no genere dolor.
- Se puede hacer con uno o dos dedos, mientras se comprueba cómo se siente ella.
- Si le resulta incómodo, lo mejor es probar mediante masajes o toques suaves.
- Mientras se hace esta presión se puede mejorar la experiencia estimulando el clítoris con la lengua.
7. Caricias y juegos
Si bien con los besos, las caricias y los juegos previos no estimulamos el punto G de la mujer de manera directa, sí estaremos creando un ambiente grato, en el que ella se sienta no solo relajada, sino sensual, atractiva y deseada.
Primero, pon música, baila con ella, abrázala, bésala, dile cosas al oído, hazle cosquillas con tus labios en el cuello, quítale la ropa lentamente, acaricia largamente su cuerpo, besa sus pechos, su ombligo… Y ahora sí.
8. Autoestimulación del punto G
Si la mujer lo desea, también es posible autoestimular su punto G ella misma. Para esto puede utilizar un juguete sexual, como los que mencionamos antes, o su propio dedo.
Para ello, es recomendable primero un masaje vulvar o anal (o ambos), y cuando aumente el nivel de excitación y de lubricación, introducir el dedo medio, aplicando la técnica explicada, con el gesto de ‘ven aquí’.
Un punto para el disfrute de ambos
Es probable que las experiencias que se derivan de la estimulación del punto G varíen en cada mujer. En cualquier caso, es importante que ella esté relajada. Investigadores de la Universidad Estatal de Florida indican que en algún momento se puede sentir una sensación parecida a la de querer orinar.
Sin embargo, en este punto es posible que ella también esté cerca de tener una eyaculación femenina. Para que no se frustre, una forma de evitar esta situación, es vaciando la vejiga antes de iniciar el encuentro sexual.
Y si bien es importante estimular el punto G de la mujer, no deben frustrarse si de buenas a primeras no lo logran hacer correctamente. Por otra parte, no hay que obsesionarse con encontrarlo, ya que esto quizás genere un efecto contrario al placer, causando más bien ansiedad e inseguridad.
Te podría interesar...