Champú en barra vs líquido: diferencias, ventajas y desventajas

Uno de los productos para el cuidado del cabello que más se popularizó en los últimos años es el champú en barra. Caracterizado por una composición más natural, con menos químicos y más amigable con el medio ambiente, este artículo viene compitiendo con la clásica opción líquida.

Ahora bien, hay quienes se preguntan en qué difieren ambas presentaciones. Pues bien, para tenerlo más claro, a continuación detallamos sus principales características, diferencias, ventajas y desventajas. ¡Sigue la lectura!

La batalla del champú en barra vs líquido

El champú sólido es un producto que irrumpió en el mercado del cuidado capilar en las últimas dos décadas. Sin embargo, ganó popularidad en los años recientes, debido a una mayor consciencia generalizada sobre la conservación del planeta y el uso de productos químicos.

La razón es que se presenta como una mercancía de elaboración más natural, con menos componentes agresivos para la piel y sin uso de plásticos. En este contraste con los champús tradicionales, se convirtieron en una alternativa cada vez más utilizada para la higiene del pelo y del cuero cabelludo.

Si bien muchas de las barras se elaboran con componentes de origen natural, como la hierba Cyclea peltata o ciertos aceites esenciales, también pueden incluir químicos. Además, la transición a su uso puede generar algunas contrariedades al momento de lavar el cabello.

Por lo tanto, es conveniente realizar un análisis profundo que determine las ventajas y desventajas de ambos artículos. La finalidad es poder realizar una elección personal basada en el tipo de cabello, su reacción con los tensioactivos presentes en los líquidos y el cuidado del medioambiente.

Algunas diferencias del champú en barra vs líquido

Tanto el champú en barra como el sólido están diseñados para separar el sebo del pelo y para quitar las impurezas del cuero cabelludo. Existen opciones con y sin sulfatos en ambos tipos de champús.

No obstante, es más frecuente encontrar versiones sólidas que no aplican agentes espumantes o fragancias sintéticas en su elaboración, los cuales pueden provocar irritaciones, caspa y alergias.

Como contraste, estos productos generan menos espuma y el lavado puede resultar algo más tedioso, sobre todo en cabellos encrespados. Su principal diferencia respecto a las versiones líquidas tienen que ver con el medio ambiente, ya que no precisan de envases plásticos y se elaboran con menos agua.

En casos de afecciones capilares —como caspa, seborrea o sequedad— se debe consultar con un dermatólogo. Este profesional evaluará qué tipo de producto es conveniente para mejorar el problema puntual.

Ventajas del champú en barra sobre el tradicional

Con una impronta más natural, una mejor convivencia con el medioambiente y una larga duración, estas son las ventajas del champú en barra sobre el líquido.

Reduce el uso de plásticos

El consumo de plástico, en especial los de un solo uso, es uno de los principales generadores de residuos contaminantes. Los champús sólidos no requieren envases en este material; en general, incluyen envoltorios biodegradables, como papel kraft.

Dura más

En comparación con los tradicionales, los champús sólidos suelen durar más. Esto deriva en un ahorro de dinero. Un ejemplar de 100 gramos equivale a tres botellas líquidas, por lo que rinde más tiempo y la inversión es menos frecuente.

Se elabora con menos agua

Los champús líquidos están compuestos en un 80 % por agua, cifra que se reduce drásticamente en las presentaciones sólidas. Su propia composición no precisa de agua para adquirir forma. Esto significa otra ventaja en el aspecto ecológico.

Es transportable

Los viajeros frecuentes tienen una gran ventaja al incluir las barras de champú entre sus elementos de higiene. Estas no poseen riesgos de fuga, al contrario de los líquidos, que pueden derramarse y ensuciar todo el equipaje. Por otro lado, su tamaño y duración permite llevar mucho más champú en menos espacio.

Tiene composición natural

En términos generales, los champús en barra se elaboran con elementos más naturales. Esto se debe a que incluyen ingredientes orgánicos y excluyen otros químicos comunes en los tradicionales, tal y como sugiere este estudio de la revista científica Dermatitis.

Tales elementos son los parabenos, los sulfatos y las siliconas. Los primeros funcionan como conservantes del producto. Por su parte, los sulfatos y las siliconas son agentes espumantes, por lo que brindan una mayor proliferación de espuma durante el lavado.

Su exceso puede provocar irritación y sequedad en algunas pieles, como indica este artículo de Medical News Today. Y si bien hay alternativas de champús tradicionales sin sulfatos, es más común encontrar opciones sólidas compuestas por elementos naturales. Por ejemplo, crema de coco, hierbas o aceite de argán.

Permite prescindir del acondicionador

En algunos tipos de cabello, la barra de champú es suficiente para dejar la melena suave y brillante. Por lo tanto, no es necesario complementar con acondicionador. Por supuesto, esto depende de los componentes del producto y del tipo de pelo.

Se puede elaborar de manera artesanal

Con ingredientes derivados del coco, aceites esenciales y algunas hierbas, es posible crear las propias barras de champú en casa. Solo hay que conocer ciertos detalles, que incluye el proceso de saponificación.

Desventajas del champú en barra

Más allá de los beneficios, ningún producto es perfecto y los champús sólidos tienen otras características desventajosas con respecto a los tradicionales.

• Hay que acostumbrarse al cambio. Las barras no suelen generar suavidad ni brillo artificial de manera instantánea, como suelen hacerlo los líquidos. Por eso, puede pasar un periodo de adaptación en el que el cabello se sienta pegajoso.
• Genera enredos. El proceso de lavado con champús sólidos produce que el pelo se enrede, sobre todo en personas con cabello rizado.
• Produce menos espuma. La costumbre de lavarse con una gran cantidad de espuma que facilita el proceso está muy arraigada. Los ingredientes naturales de los sólidos generan menos espuma, algo saludable, pero a veces poco efectivo durante el lavado.
• Puede verse grasoso. Durante una transición hacia el uso de barras, el pelo también puede lucir más grasoso y áspero. No obstante, con el tiempo vuelve a su condición habitual.
• Puede causar decoloración. Hay que tener especial cuidado con los cabellos teñidos, debido a que algunos ejemplares sólidos causan decoloración.
• Se derrite fácil. Al no tener conservantes, estos champús se estropean con más rapidez, mientras que se derriten en el contacto con el agua. Hay que mantener el producto guardado en lugares secos para evitar que se gaste.

Champú en barra vs líquido: una elección personal

Elegir entre un producto tradicional y uno sólido depende en gran medida del deseo particular. En la mayoría de los casos, la barra cumple la misma función que el líquido. Sin embargo, esto puede variar según el tipo de cabello y sus necesidades.

De lo que no existe duda es que el formato en barra es más amigable con el medioambiente. Por lo tanto, se trata de una buena alternativa para priorizar acciones ecológicas cotidianas.

Ahora mismo hay muchas opciones en el mercado. Es probable que haya que probar varias hasta dar con una que se adapte bien al tipo de pelo y al cuero cabelludo. ¿Qué opción te gusta más?