¿Cómo mantener el equilibrio entre tu relación de pareja y tu vida?

La armonía entre el propio espacio personal y la vida en pareja es posible. Te contamos cómo mantener ese equilibrio.
¿Cómo mantener el equilibrio entre tu relación de pareja y tu vida?
Bernardo Peña

Revisado y aprobado por el psicólogo Bernardo Peña.

Escrito por Okairy Zuñiga

Última actualización: 25 mayo, 2023

¿Cómo te sientes respecto a la relación de pareja que llevas? ¿Crees que ambos tenéis el espacio personal suficienteLo cierto es que mantener el equilibrio entre una y otra faceta no es imposible. Sin embargo, sí requiere considerar algunos aspectos importantes.
Sigue leyendo y descubre cómo los dos contáis con la opción de ser felices sin trastocar el bienestar individual.

Claves para mantener el equilibrio entre una relación de pareja y la propia vida

Confiar en la pareja, disfrutar de nuevas experiencias y tomar las decisiones que nos corresponden son algunas de las pautas que pueden aplicarse en este escenario. Veamos a continuación cómo estas y otras claves resultan de utilidad.

1. Evitar actuar por el miedo al abandono

Para mantener el equilibrio hay que superar el miedo al abandono
Cuando existe el miedo al abandono, un miembro de la pareja puede soportar muchas situaciones inadmisibles que lo hacen sentir mal.

Uno de los problemas que en ocasiones impide mantener el equilibrio es el temor a que la pareja nos abandone. Ahora bien, enfocar toda la atención en dicho miedo, deseando a cualquier precio que eso no pase, a menudo hace que uno se pierda a sí mismo por el camino.

  • Así, cabe analizar si estamos dejando de lado aquellas actividades con las que también disfrutamos o esas otras personas a las que igual apreciamos. Si es así, quizás sea necesario pararse a pensar con qué finalidad lo hacemos.
  • Si descubrimos que detrás de ese comportamiento está el pánico a estar solos, tal vez nos encontremos ante la oportunidad de abordar tales inseguridades.
  • Es probable que si intentamos cuidar de nuevo esas otras facetas, nos llevemos la sorpresa de que la relación continúa e, incluso, mejora.

2. Disfrutar de nuevas experiencias ayuda a mantener el equilibrio

De la clave anterior se desprende asimismo otra reflexión. Se trata de la idea de que mantener el equilibrio es viable aún cuando las experiencias que vivamos no se hallen limitadas de forma exclusiva a las de la otra persona.

  • Que la pareja no participe, por ejemplo, en las aficiones que nos gustan o en las salidas con los colegas de trabajo no tiene por qué implicar la renuncia automática a las mismas.
  • De hecho, es saludable manejar un cierto nivel de independencia que permita que cada miembro goce de un espacio propio.
  • Esos estímulos diferentes a los que de manera individual estamos expuestos brindan una dosis de ‘aire fresco’ a la relación.
  • Luego tales novedades pueden compartirse entre ambos en las conversaciones, al invitar al otro a unirse a los planes que hacemos o ser simplemente un modo de conocer mundos distintos a través del compañero.

3. Tomar las decisiones que a uno le corresponden

En ocasiones los conflictos tienen que ver con la presión que uno de los miembros ejerce sobre la otra persona a la hora de tomar decisiones. Es decir, habrá momentos en los que se requiera llegar a un acuerdo conjunto, pero también las elecciones por separado serán frecuentes.

En ese sentido, las dificultades aparecen cuando alguno de los dos trata de asumir más responsabilidad de la que le corresponde en los asuntos particulares de la pareja:

  • En este caso es preciso definir las cuestiones en las que precisamos más ayuda y aquellas que queremos gestionar de manera autónoma.
  • Si dejamos claro hasta dónde permitimos que lleguen las opiniones del compañero, estaremos estableciendo ciertos límites para operar con libertad en las propias determinaciones.
  • Aunque es natural que busquemos el apoyo mutuo, tampoco es realista desear cambiar al otro y desear resolverle la vida.

4. Confiar en la pareja

Para mantener el equilibrio hay que confiar
Entender los defectos de cada quien y construir una relación sólida basada en la confianza es fundamental para la estabilidad de la pareja.

La confianza en la pareja es uno de los pilares fundamentales para sustentar el vínculo y mantener el equilibrio con otras parcelas en las que nos movemos.
No obstante, en las relaciones en las que uno de los miembros ha pasado antes por una infidelidad o se siente algo inseguro resultan comunes detalles como los siguientes:

  • Las sospechas de que la otra persona le engaña hacen que esté todo el tiempo pendiente de ella.
  • Las preguntas sobre lo que hace, a dónde va y con quién son constantes.
  • En situaciones ya más complicadas son hasta habituales las discusiones cuando la pareja sale con gente distinta por su cuenta.

Si detectamos que alguna de estas circunstancias caracteriza la interacción con el compañero actual, es importante considerar la opción de acudir a terapia en pareja. De este modo, entrenaremos algunos recursos que nos serán útiles para afrontar estos desafíos y reforzar la seguridad del que desconfía.

¿Qué harás para mantener el equilibrio?

Mantener el equilibrio entre una relación de pareja y el respectivo espacio personal es posible en la medida en que uno mismo establece ciertas prioridades a nivel individual.

El hecho de que exista un grado de compromiso y un vínculo que cuidar no significa que haya que sacrificar las propias necesidades.

¿Recordarás estas claves en próximas ocasiones? ¿Con cuál de ellas comenzarás para lograr la armonía?


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.