¿Es riesgoso cabecear una pelota de fútbol?

Cabecear una pelota de fútbol puede traer, a lo largo de los años, consecuencias neurológicas. Incluso podría poner en riesgo su salud de manera inmediata.
¿Es riesgoso cabecear una pelota de fútbol?
Leidy Mora Molina

Revisado y aprobado por la enfermera Leidy Mora Molina.

Última actualización: 09 abril, 2022

Cabecear una pelota de fútbol podría generar graves consecuencias neurológicas con el paso de los años. Según los neurólogos, esta actividad, aunque no es considerada «violenta», podría ocasionar lesiones tras varias repeticiones. No obstante, pocas veces se presentan las dificultades de forma inmediata.

Los efectos acumulativos o repetitivos del cabeceo durante mucho tiempo podrían generar la formación de lesiones y hematomas. También, podría generar patologías como las encefalopatías traumáticas crónicas.

Así, pues, golpear una pelota de fútbol con la cabeza pues considerarse un impacto cerebral voluntario y es considerado una causa muy común de conmociones cerebrales. Además, a largo plazo podría tener implicaciones negativas en el aprendizaje, la velocidad psicomotora o la memoria.

Accidentes determinantes al cabecear una pelota de fútbol

¿Es riesgoso cabecear una pelota de fútbol?
Los riesgos de cabecear una pelota pueden darse en el fútbol y otros deportes como el rugby, el fútbol americano o el hockey.

No solo en la práctica del fútbol se puede presentar el cabeceo del balón, pues existen deportes similares en los cuales se han presentado accidentes por el cabeceo. Es el caso de los jugadores de fútbol americano, hockey sobre hielo o boxeadores.

También se ha identificado que las personas que sufren accidentes automovilísticos, así como aquellas que han sido víctimas de violencia familiar, pueden sufrir conmociones en la cabeza que, a largo plazo, pueden convertirse en una encefalopatía traumática crónica como las que se presentan en la práctica del fútbol.

Debido a que en muchos partidos televisados es común ver el cabeceo, es normal preguntarse por qué un simple golpe podría llegar a volverse algo tan delicado. Bien, la respuesta es simple: con el paso del tiempo, estos golpes de manera consecutiva atrofian las estructuras del cráneo y hacen que este sea cada vez más susceptible a cambios morfológicos o, incluso, a sangrados internos.

Casos reconocidos

Uno de los casos más recientes y sonados es el accidente que provocó la fractura de cráneo del jugador mexicano Raúl Jimenez quien, en medio del enfrentamiento futbolístico de su equipo Wolverhampton contra el Arsenal, se vio involucrado en un triple choque de cabezas cuando quiso defender el balón con esta área.

Otro de los casos se presentó en 2017 cuando Ryan Mason tuvo que retirarse del fútbol a sus 25 años luego de que tuviera un choque con Gary Cahill en el partido entre Hull City y Chelsea. Tras ser operado, pasó tres meses en rehabilitación, pero no consiguió regresar a las canchas.

Precisamente, el peligro de esta lesión se da porque el cráneo, pese a ser un hueso duro, puede lacerarse poco a poco hasta afectar la materia gris, sustancia que ha sido comparada con la gelatina por su fragilidad.

¿Qué dicen las investigaciones?

Cabecear una pelota de fútbol es visto como un choque infrecuente, en lugar de ser visto como una amenaza que puede poner en riesgo la salud. De hecho, según la fortaleza del impacto, es una acción que puede poner en riesgo la vida en el momento en que se realiza.

Varios estudios han establecido que cabecear una pelota de fútbol generalmente no es identificado como una causa de valoración médica de conmoción cerebral. Tanto así que los propios deportistas suelen esconder las molestias que genera esta acción por temor a ser apartados del juego.

Aunque esta conmoción no provoque la pérdida de conocimiento o la amnesia inmediata, podría traer consigo la alteración o la disminución temporal de la función cognitiva de las personas. Así, es importante que cuando se presenta la lesión, la persona sea valorada cognitiva, verbal y psicomotrizmente.

Además, se recomienda evaluar su memoria; esto comprende la memoria retrograda y la anterógrada. Así, se pueden reconocer posibles alteraciones ligadas con el golpe para atenderlas adecuadamente.

Posibles riesgos de cabecear una pelota de fútbol

¿Es riesgoso cabecear una pelota de fútbol?
Tras un golpe fuerte en la cabeza, se aconseja la consulta médica para una evaluación y diagnóstico.

A continuación, podrás descubrir algunos de los posibles riesgos que pueden generarse al cabecear un balón. Por supuesto, si tienes alguna duda al respecto, consulta con tu médico.

Lesiones subconcusivas

Este tipo de lesiones ocurren cuando tu cabeza se golpea fuertemente, pero no es lo suficientemente fuerte como para causar síntomas graves o que puedan dejar secuelas crónicas. Puedes presentar mareo, torpeza y dolor de cabeza moderado, todo de manera temporal.

Sin embargo, algunas investigaciones han buscado determinar los cambios que pueden presentarse en las funciones neurocognitivas dependiendo de la magnitud de uno o más impactos subconcusivos que pueden darse en medio de un partido de fútbol infantil. Si bien los datos no han sido concluyentes, han aconsejado la necesidad de visitar al médico tras un golpe moderado a fuerte.

Encefalopatía traumática crónica

De acuerdo con un artículo de la Universidad de Ciencias Aplicadas y Ambientales, la encefalopatía traumática crónica describe la degeneración cerebral provocada por la repetición de traumatismos craneales.

Aunque suele ser muy frecuente en quienes reciben golpes en la cabeza de forma repetida, como por ejemplo los futbolistas, se determina durante una autopsia mediante el estudio de secciones del cerebro.

Hematomas

Dependiendo del golpe, es importante tener en cuenta que el cráneo, al estar expuesto a traumas, puede sangrar internamente, situación que se conoce como hematomas intracraneales. Es importante que tengas esto presente y, en caso de dolor de cabeza con larga duración después de un golpe, debes acudir a tu médico.

¿De qué forma se ha regulado?

Por lo mencionado anteriormente, se ha prohibido a los futbolistas infantiles cabecear los balones durante los entrenamientos. Esta directriz se da luego de que se haya relacionado esta práctica como un factor de incidencia de enfermedades cerebrales.

Prohibición en niños y liga infantil

Para cuidar la salud presente y futura a causa de lesiones en los niños y jóvenes, se han tomado ciertas normativas para evitar que los menores de 18 años puedan cabecear una pelota de fútbol. Aunque se presentan algunas excepciones. Dentro de esta directriz, se aclara que los menores de 12 años tendrán completamente prohibido cabecear.

¿Hay una técnica adecuada para cabecear una pelota de fútbol?

Aunque no es posible evitar del todo las consecuencias cerebrales que podría traer consigo cabecear una pelota de fútbol, hay algunas recomendaciones para reducir los riesgos:

  • Pídele a tu entrenador que te enseñe a cabecear y proteger la cabeza. Es importante que sepas la posición adecuada en la que debe estar el cuello y el torso para evitar lesiones.
  • En algunas variaciones del fútbol u otros deportes, es obligatorio el uso de un casco o protector. Cuando sea posible, recuerda usar uno que sea de tu medida para que tu cráneo esté compacto y no sufra golpes de rebote.

Cabecear una pelota de fútbol

Es importante que tengas en cuenta los riesgos y las recomendaciones que te hemos dado para cabecear una pelota de fútbol y minimizar los riesgos.

Por último, si eres de esos jugadores que no puede evitar cabecear, usa la frente para recibir el impacto y mantén los ojos abiertos. De esta forma, evitarás golpeare con otras personas o elementos.

También es necesario que dejas la boca cerrada, los brazos en equilibrio con el resto de tu cuerpo y tu cabeza quieta. Así, tendrás más estabilidad mientras buscas el balón en el aire.


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