¿Cómo hacer un jabón exfoliante de café en casa?

El café tiene un importante número de beneficios cuando se aplica de forma tópica. Descubre cuáles son y cómo hacer un jabón exfoliante.
¿Cómo hacer un jabón exfoliante de café en casa?
Leonardo Biolatto

Revisado y aprobado por el médico Leonardo Biolatto.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 25 mayo, 2023

Beber una taza por la mañana no es la única forma de obtener los beneficios del café. Resulta que cuando se aplica en la piel puede ayudar a combatir el acné, tratar las ojeras y evitar la aparición de manchas y líneas de expresión. Así las cosas, un jabón exfoliante de café es una de las mejores presentaciones para sacar provecho de estas propiedades.

Esta barra no solo es muy fácil de hacer, sino que también puede ser muy suave al tener contacto con la piel. Te mostramos cómo elaborar un jabón exfoliante de café y las ventajas de utilizarlo.

Crea tu propio jabón exfoliante de café

Elaborar tu propia pastilla exfoliante de café es sencillo. Solo debes cumplir con los siguientes ingredientes y seguir, paso a paso, las instrucciones.

Ingredientes y materiales

  • Termómetro infrarrojo de lectura instantánea.
  • Agua termal o purificada caliente: 6 onzas.
  • Café molido: 1 cucharada pequeña.
  • Aceite de coco: 5 onzas.
  • Aceite de oliva: 5 onzas.
  • Aceite de soya: 6 onzas.
  • Báscula de lectura digital.
  • Cuchara de madera.
  • Moldes para jabón.
  • Batidora (opcional).
  • Lejía: 2 onzas.
Aceite de coco con café.
El aceite de coco, en sí mismo, es un producto muy estudiado por sus posibles efectos sobre el cutis.


Modo de preparación

  1. Mezcla el café con las onzas de agua de la misma forma que lo sueles hacer para la bebida. Deja en reposo hasta que se enfríe.
  2. Ahora añade la lejía al café y remueve hasta que logres disolver los cristales.
  3. Espera a que la solución llegue a una temperatura entre 120 y 130 grados centígrados. Usa el termómetro infrarrojo para una mayor precisión.
  4. Une todos los aceites y lleva a calentar. Intenta que logren una temperatura de 120 grados centígrados, similar a la de la mezcla del café. En ese punto combina todos los ingredientes.
  5. Comienza a batir con ayuda de la cuchara los ingredientes por un periodo de 45 minutos. O bien puedes hacer uso de la batidora para reducir el tiempo a 6 minutos.
  6. Vierte la mezcla en los moldes y tapa.
  7. Almacena los moldes en un sitio seguro por varios días. Esto servirá para que se asiente y se torne firme.
  8. Saca el jabón del molde y, en caso de haber usado un molde completo, córtalo en tantos pedazos como quieras. Vuelva a almacenar durante 3 semanas más.

Beneficios del jabón exfoliante de café

De acuerdo a un estudio publicado en International Journal of Cosmetic Science, el café puede prevenir la aparición de celulitis en la piel. Esto, gracias a que dilata los vasos sanguíneos debajo de la dermis. Se cree, además, que el exfoliante de café podría dar una apariencia uniforme.

Por otro lado, una investigación publicada en International Journal of Dermatology encontró que aplicar café de forma tópica reduce la aparición de manchas solares, líneas de expresión y enrojecimiento. Así mismo, el estudio reveló la efectividad del café en la disminución de la inflamación.

El café también es fuente de vitamina B3, conocida como niacina. Según la Skin Cancer Foundation, esta sustancia puede evitar el desarrollo del cáncer de piel no melanoma. Por último, existe evidencia científica de que sería capaz de ayudar a la cicatrización tras una exposición prolongada al sol.

Granos de café.
El café es una sustancia con múltiples propiedades. Sus usos van más allá de lo gastronómico.


¿Qué esperas para hacer una barra exfoliante de café en casa?

Te hemos indicado cómo la piel del rostro y el cuerpo se puede ver beneficiada de usar una pastilla exfoliante de café. Del mismo modo, te hemos indicado los ingredientes que necesitas reunir y cada uno de los pasos a seguir. ¡Tienes todo lo que necesitas para elaborar esta barra en casa!

Pero toma precauciones. Puedes probarla primero en una zona del cuerpo o consultar con un especialista. Una vez hayas verificado que no existe ninguna reacción desfavorable, comienza a aplicarla sin preocupaciones.


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