Cómo usar el método anti-zapatos para reducir suciedad en casa

¿Te ha pasado que terminas de aspirar y fregar el piso de casa, llega algún miembro de la familia de la calle y de inmediato notas sucio en el suelo? Esto sucede porque la mayor parte de la suciedad que entra en el hogar lo hace pegada a la suela de los zapatos.
La solución no es prohibir por completo los zapatos en casa, sino aplicar una técnica de contención, como el método anti-zapatos. Consiste en crear un sistema en tu recibidor en donde te quites el calzado de calle y lo cambies por el de casa. Dejando la suciedad retenida en ese espacio y manteniendo el resto de los pisos del hogar más limpios.
Paso 1: El doble felpudo
Para aplicar el método anti-zapatos solo debes seguir tres pasos sencillos, y el primero de ellos es colocar un sistema de doble felpudo. En la puerta de tu hogar, del lado exterior, ubica un felpudo rascador de fibras duras y rugosas, como el coco. Este se encargará de desprender el barro, piedritas y suciedad grande de las suelas de tus zapatos.
El segundo felpudo debe ser de un material más suave y absorbente, como la microfibra o el algodón. Lo vas a ubicar en el recibidor, justo al cruzar el umbral de la puerta, y su misión será atrapar la humedad, polvo fino y grasa que el anterior no pudo.
Paso 2: La estación de calzado
La idea es que, luego de que limpies los zapatos de calle, crees el hábito de cambiarlos por los de casa, como hacen en muchas culturas asiáticas. Pero si tienes que hacer maromas para descalzarte, es difícil que lo sigas haciendo.
Por ello, coloca en el recibidor un banco o taburete, para que puedas quitarte los zapatos con comodidad. Además, ten allí a la mano las zapatillas o pantuflas que usas para estar en casa.
Paso 3: La bandeja para zapatos
Después de quitarte los zapatos, debes dejarlos en una bandeja con los bordes elevados, justo al lado del banco. Esto te será de gran utilidad, sobre todo en los días de lluvia, ya que atrapará el agua y barro que gotee de ellos —y que los felpudos no pudieron capturar—, evitando que ensucien tu suelo. Lo ideal es que sea de un material lavable, como el plástico.
¿Qué hacer cuando tengas visitas en casa?
Ten en cuenta que pedirle a tus visitas de forma directa que sigan el método puede crear una situación incómoda. En su lugar, deja que tu entrada hable por ti. Al ver el banco en el recibidor y la bandeja, es probable que te pregunten qué deben hacer. Ten a la mano pantuflas limpias de visita, si les apetece descalzarse.
Por otro lado, puede haber personas que no deseen hacerlo o cuya visita será tan corta que no vean la necesidad. En estos casos, sé flexible y asume que deberás hacer una pequeña limpieza tras su partida.
Y hablando de limpieza, no te olvides de sacudir y aspirar los felpudos una vez por semana, para que sigan atrapando la suciedad. Así como también lava la bandeja con frecuencia para evitar malos olores. Si pones el método anti-zapatos en práctica, podrás reducir la suciedad en tu hogar y tener mayor tiempo libre para compartir con los tuyos.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.







