¿Por qué algunas personas son más atractivas para los mosquitos?

¿Sabías que hay preferencias de los mosquitos por el grupo de sangre 0? Existen muchos factores por los que pican más a algunas personas que a otras. Te los contamos aquí.

Es muy probable que te preguntes por qué los mosquitos se desquitan con algunas personas, mientras que otras son ignoradas. A pesar de que parezca extraño, las preferencias de los mosquitos existen. Algunos tienen que soportarlos más que otros.

La verdad es que, aunque no lo creas, estos insectos tienen la capacidad para elegir a sus víctimas. Te contamos qué detectan para picar más o menos y cuáles son las medidas que puedes tener en cuenta al momento de protegerte de ellos.

¿Por qué los mosquitos chupan sangre?

En realidad, no todos los mosquitos lo hacen. De hecho, se alimentan de néctar. Pero, cuando las fuentes de azúcar son escasas, son las hembras quienes pueden optar por utilizar la sangre como alimento. Ellas ingieren sangre para mejorar su potencial físico, completar la maduración de los huevos y poder picar más.

Las hipótesis sugieren que las hembras son capaces de detectar señales olfativas que segrega el cuerpo humano. También, pueden encontrar huéspedes con su visión. Estas características les sirven para discriminar entre sus alimentos: el néctar y la sangre.

¿Qué determina las preferencias de los mosquitos?

Conocer cuáles son las preferencias de los mosquitos por algunas personas es importante debido a que incide en el riesgo de padecer afecciones. Es posible mencionar una serie de factores que son capaces de influir en la selección de sus huéspedes. Te contamos cuáles son a continuación.

El tipo de sangre

Por ser la sangre su modo de alimentación, no es extraño que haya tipos que les resulten más atractivos. Varias especies de mosquitos, como el Aedes Aegypti, tienen preferencia por el grupo sanguíneo O. 

Su segundo tipo de sangre preferido es la del grupo B. Luego, la A. Sin embargo, todo dependerá de las segregaciones químicas, que son las que permiten su detección.

Esto puede ser relevante para quienes tienen este grupo de sangre. Podrían tomar mayores medidas preventivas, ya que algunos mosquitos transmiten varias enfermedades, como dengue, fiebre amarilla, zika y chikunguña.

El dióxido de carbono

¡Así es! El dióxido de carbono que exhala el cuerpo es suficiente para ser uno de los blancos de los mosquitos. Los mosquitos detectan señales químicas y físicas, entre ellas, el CO2. En efecto, son atraídos por este gas.

Cuando se combinan el calor, el olor de la persona y el CO2, se conjugan elementos que captan más a los mosquitos. Además, es posible que prefieran a personas que emiten más dióxido de carbono que otras.

Tomar cerveza y otros hábitos dietarios

El consumo de alcohol puede volver más atractivos a algunos que a otros. Es posible que influya en el cambio de olor corporal, debido al metabolismo del alcohol. Los estudios realizados fueron sobre la ingesta de cerveza, por lo que todavía queda sin resolver si otro tipo de alcohol produce el mismo efecto.

Al mismo tiempo, otros hábitos dietarios pueden volver más atractivo a alguien para los mosquitos. Por ejemplo, se ha demostrado que consumir plátanos puede modificar el aroma de la piel y cautivarlos. A diferencia de algunas creencias populares, el ajo y la vitamina B no los repelen o, de momento, no se han encontrado investigaciones al respecto.

El sudor

Otro de los métodos que utilizan es mediante la percepción del olor del ácido láctico y otra serie de sustancias que se eliminan con la sudoración. Además, si el sudor se debe a realizar ejercicio, la temperatura corporal incrementa. Esto vuelve a algunas personas más susceptibles a sus picaduras.

Las bacterias de la piel

Las bacterias de la microbiota de la piel producen muchas sustancias atrayentes de mosquitos. La distribución y la cantidad de las glándulas influyen en la conformación de la microbiota y en un olor particular para cada persona.

Así, una de las consecuencias es que aumente la atracción de los mosquitos. Por el contrario, otros tipos de bacterias podrían actuar como protectoras contra estos insectos al disminuir su capacidad para detectarlas.

Además, algunos trastornos de la piel pueden influir en su predilección, como el eczema. La razón principal está en que estas enfermedades modifican la microbiota cutánea.

Vestir determinados colores

Los mosquitos pueden usar tanto la visión como el olfato para ubicar con precisión a sus víctimas. Para no ser su foco de atención, es desaconsejable el uso de prendas de vestir oscuras. Lo mejor es escoger ropa clara, que cubra toda la piel.

Aunque la preferencia de los mosquitos por el color varía según la especie, el favorito de la mayoría de estos insectos es el negro, seguido del rojo, el azul y el morado. También, la atracción por estos últimos tres colores son mayores que otros, como el verde, el blanco y el amarillo.

El olor de la piel

Algunas personas son más atractivas para los mosquitos debido al olor de su piel. Estas personas tienen niveles más altos en su piel de determinadas sustancias, en particular, de ácidos carboxílicos.

Es decir, que producen más cantidad de estos ácidos en las emanaciones de su piel. Además, hay personas que, por el contrario, emanan otros compuestos. Estos los harían menos atractivos ante los mosquitos, como si se tratara de un repelente natural.

El embarazo

Las mujeres embarazadas resultan más atractivas para los mosquitos. Ellas liberan mayor cantidad de sustancias atrayentes, entre ellas, dióxido de carbono.

Esto da como resultado una mayor susceptibilidad a ciertas enfermedades transmitidas por estos insectos, como la malaria o el dengue. Por eso, lo mejor es intensificar las medidas preventivas en estos casos.

Genética

Las moléculas de olor que libera la piel son producidas de acuerdo con factores genéticos. Por eso, los genes y la producción de distintos ácidos que posee cada persona pueden contribuir a que los mosquitos piquen más o menos.

A pesar de que sigue en estudio, es posible que la edad influya en la preferencia de los mosquitos. Así, los adultos son más propensos a recibir picaduras que los niños. También, es posible que las mujeres sean más atractivas para los mosquitos que los hombres.

Otros factores

Además de las causas mencionadas, existen otros factores que pueden influir en su alimentación. En este sentido, repeler a los mosquitos con movimientos corporales o no hacerlo podría ser una clave.

De igual modo, la genética propia de estos insectos es decisiva. Así, existen preferencias de los mosquitos sobre la selección de sus huéspedes. Es decir, que hay especies que prefieren picar más a los humanos que a otros animales, y viceversa.

A su vez, factores ambientales pueden aumentar o disminuir la susceptibilidad de las personas a ser picadas por mosquitos. Ejemplos de ello son los cambios en la humedad o el viento.

¿Qué hacer para disminuir la atracción de los mosquitos?

Por ahora, no se ha podido encontrar una sustancia 100 % efectiva para evitar la preferencia de los mosquitos por ciertas personas. Sin embargo, algunas medidas preventivas para evitar sus picaduras son las siguientes:

• Reducir el tiempo de exposición al aire libre.
• Vestir ropa larga, que cubra los brazos y piernas. En lo posible, que sea de colores claros.
• Usar repelentes y reaplicarlos cada algunas horas.
• Evitar algunas plantas que tengan néctar, como las orquídeas.
• Vaciar elementos con agua estancada, ya que favorecen la cría de mosquitos.
• Utilizar mosquiteros.
• Emplear aceites esenciales de citronela, clavo o eucalipto para repelerlos.

Si después de una picadura observas alguna reacción alérgica, náuseas, vómitos o fiebre, consulta con un médico de inmediato.

Es mejor prevenir las picaduras de los mosquitos

Ahora que ya sabes cuáles son las preferencias de los mosquitos y por qué pican más a algunas personas que a otras, ten presente las medidas de prevención. Aunque la mayoría de estos factores no pueden cambiarse, sí puedes ser más precavido.

Algunas especies de mosquitos transmiten serias enfermedades, que son más graves para las embarazadas. Por eso, nunca está de más usar ropa que cubra la piel y repelentes para insectos, en especial si estás al aire libre.