El amor se cultiva con pequeños detalles, pero se marchita a falta de ellos

El amor se cultiva con cada pequeña acción positiva que decidimos tener con el otro. No importa si se trata de una relación de pareja, familiar o de amistad. Lo cierto es que cuando se actúa desde el cariño y el respeto, el amor crece y se reproduce.
Si por el contrario, los detalles se ausentan y solo quedan migajas de gestos positivos, el amor se marchita. Y es que cuando en un vínculo cercano no hay amor, es muy probable que se convierta en algo tóxico. Lo vemos en ese tipo de relaciones amorosas en las que lo que menos se hace presente es el amor, normalizando los malos tratos y limitando cada vez más la posibilidad de reparo.
No todo ocurre de la misma manera, pues así como a veces todo parece marchitarse, siempre habrá la posibilidad de cambiar y apostar por el afecto. Al ver una relación feliz y duradera, la gente se pregunta cómo lograron mantenerse unidos. Sobre esto han investigado John y Julie Gottman, y te mostraremos sus resultados.

El amor se cultiva con pequeñas acciones positivas

Para quienes se preguntan cómo se mantienen a lo largo del tiempo los vínculos amorosos sanos, la respuesta es sencilla: cada uno hizo esfuerzos y puso el amor por encima de todo. No solo es necesario mantener viva la llama de la pasión, como siempre lo mencionan; lo más importante es cuidar la confianza, la amistad, la comunicación y el compromiso. 

Las pruebas cruciales para fortalecer una relación ocurren en los momentos más complejos. Si hay una situación difícil, el apoyo es primordial, pero también lo es la estabilidad que somos capaces de formar en conjunto con la otra persona. Si se superan las barreras más complicadas con amortiguadores de cariño, empatía y soporte, entonces estamos frente a un vínculo en el que el amor se cultiva.
Para los Gottman, cada detalle cuenta en la construcción de un lazo sano. En sus investigaciones han contado a cientos de parejas y han recolectado una serie de elementos esenciales. Queda preguntarse puntualmente cuáles son esos elementos que hacen que un amor dure y funcione.
Te los señalamos a continuación:

• La admiración y el respeto mutuo dentro de la relación.
• La comunicación transparente, sincera y sin ánimos de causar daño al expresarse.
• La demostración de afecto.
• La confianza plena en el otro y la intimidad. 
• Inteligencia emocional para expresarse y saber cómo manejar lo que sientes.
• La buena capacidad de resolución de conflictos.

¿Cómo se marchita el amor?

De acuerdo a John y Julie Gottman, existen factores contrarios que no permiten que el amor tenga un buen desenlace. Los investigadores decidieron denominarlo como la Teoría de los cuatro jinetes del apocalipsis y tiene que ver con lo siguiente:

1. Criticar a la pareja, es decir, expresar algo que causa molestia o incomodidad haciendo énfasis en aspectos que solo menosprecian al otro. Existen pequeñas e importantes diferencias entre mostrar la preocupación por algo que la pareja puede mejorar y ser hiriente al expresarse. De cualquier modo, esto tiene una sencilla solución basada en la comunicación adecuada de tus emociones y de lo que necesitas.
2. El desprecio es uno de los jinetes del apocalipsis más agresivos en una relación de pareja. Pues el respeto brilla por su ausencia, las burlas salen a la luz y el sarcasmo hace acto de presencia. Así, se comienzan a marcar barreras dentro de la relación, pero una forma de solucionarlo es comenzar a crear espacios de cariño y valores positivos con mayor consciencia.
3. Estar a la defensiva puede ser un denominador común en esos momentos de estancamiento en la relación. Se busca justificar todo y se dan respuestas que nadie espera ni desea. Es más sencillo admitir los errores, llegar a acuerdos para corregirlos y actuar a favor de mejorar las dinámicas de la relación.
4. Bloquear a la pareja es un comportamiento que se repite en casos en los que una discusión origina más molestias y termina por ser abrumadora. Lo que se hace con el bloqueo es que la persona deja de hablar por completo y se cierra frente a su pareja al no llegar a acuerdos. Antes de llegar a este punto, lo mejor sería buscar calma tomándose 20 minutos para seguir la conversación posteriormente.

Queda claro que el amor se cultiva con gestos comprensivos, respetuosos y empáticos. Lo esencial para mantener una relación sana y duradera es tener consciencia de las emociones, de lo importante que es esa persona y de lo que necesitas. De esta forma, la comunicación efectiva será tu mejor aliada.