Tengo un bulto detrás de la oreja. ¿Qué puedo hacer?

Aunque los bultos detrás de la oreja no suelen ser peligrosos, acude a un especialista si estos supuran, cambian de color o forma.
Tengo un bulto detrás de la oreja. ¿Qué puedo hacer?
Diego Pereira

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 06 enero, 2023

Las zonas del cuerpo que no se suelen ver al primer vistazo en el espejo son aquellas a las que menos atención les puedes prestar. Sin embargo, la aparición de un bulto detrás de la oreja es algo que puede preocuparte, porque aunque no lo veas, puedes sentirlo al tacto y sentirte incómodo. Es entonces cuando te das cuenta de los escasos cuidados que le ofreces a esta zona.

Existen varios tipos de bultos o protuberancias que pueden brotar detrás de las orejas y, aunque no lo parezca, su aparición es bastante frecuente. Detectar estos bultos es difícil, pues por lo general no duelen, no pican, ni causan molestias notorias.

¿Un bulto detrás de la oreja es algo grave?

Generalmente, los bultos detrás de la oreja no suponen ningún peligro para la salud. Sin embargo, es recomendable ir al médico para una exploración física, a fin de obtener un diagnóstico apropiado y, si es necesario, un tratamiento.

Aun así, debes considerar ciertos factores antes de restarle importancia:

  • Si el bulto es muy grande o aumenta de tamaño con cierta rapidez, visita a un especialista.
  • Los bultos pequeños y redondos casi siempre son inocuos, pero toma precauciones si tienen una forma irregular o si sientes que se mueve.
  • También ponte alerta ante un cambio de color o si existe secreción en el bulto, también si aparecen uno o más bultos en otras partes del cuerpo.
  • La presencia de dolor y una textura blanda o gomosa orienta hacia una patología benigna. Sin embargo, si no duele y es duro necesitará la valoración de un médico, ya que son características que indican malignidad.
  • La movilidad del bulto también es importante. Esto se debe a que las neoplasias y otras patologías malignas suelen fijarse a los tejidos profundos, haciendo que el bulto sea inmóvil.

¿Quieres conocer más? Lee Lo que dicen tus orejas de ti


Causas comunes de tener un bulto detrás de la oreja

Inspección de la oreja

Es posible que te sorprenda su aparición o ser parte de las consecuencias de estar atravesando un cuadro viral. Conoce qué hay detrás:

1. Adenopatías

La aparición de un bulto detrás de la oreja suele estar relacionado con los ganglios linfáticos, como bien explican los expertos de MedlinePlus. Estos se encargan de proveer de defensas al cuerpo y, ante la presencia de microbios o bacterias perjudiciales, reaccionan inflamándose. Otra razón por la que estos ganglios se hinchan está relacionada con las lesiones en el cuello.

Por su parte, los ganglios linfáticos también pueden aumentar de tamaño cuando el cáncer hace metástasis, diseminándose a otras partes del cuerpo. En este sentido, es importante acudir al médico si el bulto detrás de la oreja no desaparece al cabo de unos días, no duele, es duro y es inmóvil.

2. Infección

En caso de una infección viral, por ejemplo, un resfriado común. También claro está, si se tratase de una mononucleosis, amigdalitis, otitis, faringitis, gripe, entre otros.

Se recomienda no tocar y aguardar, porque al ceder la infección los ganglios retornarán a su tamaño normal.

3. Acné

Los bultos detrás de las orejas es probable que se generen por la producción excesiva de grasa acumulada en la piel que origina el acné. Estos se caracterizan por tener una punta negra o roja.

Los bultos generados por el acné suelen desaparecer por si solos, por lo que no ameritan un tratamiento especial. Sin embargo, dependiendo de la gravedad de la afección puede ser necesaria la aplicación de medicamentos tópicos u orales.

4. Quiste sebáceo

Aparte de la inflamación de los ganglios linfáticos, se puede desarrollar un bulto detrás de la oreja cuando un folículo cutáneo se infecta y se obstruye, dando paso a la formación de un quiste sebáceo.

Tal y como sostienen los expertos de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, los quistes sebáceos ceden con tratamiento médico y, en muy pocos casos, requieren una cirugía menor para ser extirpados. No es recomendable explimirlo o intentar retirarlo porque la lesión podría infectarse.

5. Lipoma

La diferencia entre el quiste sebáceo y el lipoma es que las células cutáneas muertas en la que se concentra la grasa no están en una bolsa. Tienen una forma irregular , aspecto gomoso y se mueven al ser presionados. Para ser eliminados se precisa una intervención quirúrgica o liposucción.

Son tumores benignos y eligen para aparecer sobre todo, la parte superior del tronco, el cuello, los brazos y la espalda.

6. Mastoiditis

En el ámbito de las infecciones comunes en especial en niños menores de dos años, se encuentra la mastoiditis, una complicación de la otitis media. El bulto detrás de la oreja sería una de las posibles consecuencias.

Los síntomas que lo acompañan son dolor de oído, pérdida de audición, hinchazón detrás de la oreja, agua en el oído y fiebre. Lo recomendable en estos casos es acudir con un otorrinolaringólogo porque puede ser necesaria la ingesta de antibióticos para tratar la infección. En los casos más graves puede ser necesario incluso drenar la secreción.

¿Qué puedo hacer ante la aparición de un bulto detrás de la oreja?

Con frecuencia este tipo de protuberancias desaparecen sin que tengas que hacer nada. No obstante, hay algunos casos que requieren tratamiento con medicamentos de uso tópico.

Lo más importante es que prestes atención al estado del bulto detrás de la oreja. Si notas alguna de las alteraciones que te hemos comentado antes o afecta tu audición, es importante que acudas al médico para evitar que empeore.

Para casos leves, además, existen algunos remedios naturales que pueden ayudarte a que el bulto desaparezca más rápido (siempre y cuando la causa necesite de una acción antimicrobiana). Con todo, es importante señalar que no son un tratamiento, solo un complemento. En casos más serios no servirán para solucionar el problema.

Pero, ¿cómo te ayudan estos remedios? Estos ayudan a desinflamar la zona e inhibir la proliferación de bacterias y microbios oportunistas. Te explicamos algunos de ellos.

1. Aloe vera

Esta planta es conocida porque se le atribuyen propiedades antibacterianas, por ello se considera que puede ser una aliada ante la aparición de un bulto detrás de la oreja.

De hecho, según un estudio publicado por el Brazilian Journal of Microbiology, varios de sus componentes (como el etanol o el metanol) tienen propiedades antimicrobianas, por lo que pueden ser útiles para aliviar algunas enfermedades bacterianas.

Aloe vera para tratar bultos detrás de la oreja

En este sentido, la Dra. Herbst, votada como una de las mejores doctoras de San Diego en San Diego Magazine 2009 y en la “Guía de los mejores médicos de Estados Unidos” en 2013, también aconseja el uso de aloe vera contra los limpomas detrás del oído. Este se puede mezclar, bajo previa supervisión médica, con otra crema calmante para la zona. 

Debido a ello, se considera que aplicando aloe vera sobre la zona con el bulto, se podría hacer que los microbios que causaron su aparición no tengan más oportunidad de esparcirse.

Ingredientes

  • 2 hojas de aloe vera.
  • ½ taza de agua (125 ml).

Preparación

  • Primero, corta las hojas del aloe vera y extrae el gel interno.
  • A continuación, en un recipiente, coloca el gel de aloe vera y agrega la media taza de agua.
  • Después, mezcla ambos ingredientes hasta lograr una consistencia pastosa.
  • Por último, aplica sobre el bulto detrás de la oreja y deja actuar durante unos minutos, o hasta que se seque.

2. Aceite de ricino y diente de león

El aceite de ricino se ha empleado tradicionalmente en la cultura popular para tratar heridas y dolores porque se cree que este tiene propiedades antiinflamatorias.

De hecho, uno de los casos más famosos fue el de Edgar Cayce, antiguo médico sanador, que utilizó este aceite para combatir un bulto detrás del oído de una paciente. Este, tal y como recoge el libro de A. McGarey, fue menguando de tamaño.

Un estudio desarrollado por varios investigadores de la Universidad de Limpopo ha permitido confirmar que, efectivamente, este producto presenta cierta acción antiinflamatoria y antioxidante, por lo que podría ser beneficioso para reducir la inflamación.

Por su parte, tal y como sostiene un artículo publicado por la National Library of Medicina, se considera que el diente de león tiene propiedades antibacterianas; por lo que, en combinación con el aceite de ricino, podría ayudar a reducir el bulto detrás de la oreja.

Ingredientes

  • ½ taza de agua (125 ml).
  • 1 cuchara de aceite de ricino (15 g).
  • 1 cucharada de hojas secas de diente de león (10 g).

Preparación

  • En primer lugar, calienta una taza de agua y, cuando llegue a ebullición, añade las hojas secas de diente león y deja que infusione durante 10 minutos.
  • Pasado el tiempo indicado, retira del fuego, deja enfriar y pon las hojas en un recipiente aparte.
  • A continuación, añade el aceite de ricino a las hojas y mezcla bien hasta obtener una pasta.
  • Por último, aplica el ungüento sobre la zona afectada, cubre con una gasa o algodón y deja actuar toda la noche.


3. Vinagre de manzana

El vinagre de manzana contiene ácido acético, una sustancia que puede ayudar a luchar contra infecciones y bacterias. De hecho, un estudio desarrollado por varios cirujanos alemanes señaló que este tiene propiedades antibacterianas y antisépticas.

Vinagre de manzana

Con todo, es importante tener en cuenta que no deja de ser un ácido, por lo que si tienes la piel sensible o presentas alguna herida, el vinagre de manzana podría provocarte irritación. Si este es tu caso, te recomendamos que emplees alguno de los otros remedios.

Para elaborarlo, solo necesitas 1 cucharada de vinagre de manzana (10 ml) y algodón, venda y esparadrapo. Es muy sencillo.

Preparación

  • Primero, empapa el algodón en el vinagre de manzana.
  • A continuación, fíjalo sobre el bulto detrás de la oreja con la venda o espadrapo y deja actuar durante un rato.
  • Pasado el tiempo indicado, retira el vendaje. Deberías notar que se ha formado una costra, que se caerá sola a los pocos días. De no ser así, repite la operación tantos días como sea necesario, pero siempre prestando atención al estado de tu piel, para evitar irritaciones.
  • Cuando la costra se caiga, lava la zona con jabón neutro o algún antiséptico.
  • Enseguida coloca otra venda, pero sin vinagre de manzana.
  • Un par de días después la infección y el bulto deberían haber desaparecido.

Cuándo acudir al médico

Ante síntomas que indican una complicación como:

  • Dolor.
  • Enrojecimiento.
  • Crece y cambia de forma.
  • Se hace difícil girar la cabeza o tragar.
  • Si está fijo en un lugar o se siente adherido.
  • Se acompaña de síntomas generales.
  • Aparece de forma repentina.

El aspecto, el dolor o la fiebre indicarían una infección en desarrollo. El médico sabrá qué hacer; es probable que el bulto necesite ser extraído por un profesional con técnicas asépticas.

En resumen, ¿qué hacer si tienes un bulto detrás de la oreja?

En principio, los bultos detrás de la oreja no tienen por qué indicar un problema grave de salud. A menudo se deben a algún tipo de inflamación o quiste benigno.

Con todo, como te hemos indicado, es importante prestar atención al aspecto y a la evolución de los mismos. Los remedios que te hemos presentado pueden ayudarte a reducir su hinchazón en casos leves, pero no a eliminar la protuberancia como tal.

Por otra parte, ten presente la acción de estos remedios no es 100 % eficaz y, según la persona, puede desencadenar unas reacciones u otras. Por ello, es conveniente que consultes con el médico antes de aplicártelos.


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