Cómo cuidar las manos agrietadas: 10 recomendaciones
Revisado y aprobado por el médico Nelton Abdon Ramos Rojas
Existen algunas recomendaciones básicas para cuidar las manos agrietadas sin necesidad de usar costosos tratamientos.
La piel de las manos no se diferencia mucho de la del resto del cuerpo. Sin embargo, requiere más atención por su contacto permanente con diversas superficies. Además, hay que tener en cuenta que se usan de forma excesiva en muchas actividades, sin que se use ningún tipo de protector.
Por eso, cualquier señal de grietas o deshidratación debe ser atendida de manera especial. En efecto, aunque al principio pueda parecer algo “inofensivo”, puede propiciar la aparición de infecciones, irritación y otros incómodos síntomas más difíciles de tratar.
¿Ya sabes qué hacer? ¡Apunta!
1. Lávalas con agua tibia
Mantener las manos limpias y desinfectadas es un hábito imprescindible para evitar infecciones. Sin embargo, a la hora de cuidar las manos agrietadas, lo mejor es hacerlo de forma moderada, usando agua tibia y jabón neutro.
Aunque el agua caliente disminuye la presencia de gérmenes, su uso está desaconsejado porque empeora la sequedad. Tampoco se debe emplear jabón líquido antibacteriano, ya que elimina las bacterias “buenas” que protegen la piel.
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2. Utiliza guantes de protección
Los mejores aliados para prevenir la aparición de grietas y agresiones en las manos son los guantes de látex para el aseo. Estos elementos, que suelen ser muy económicos, evitan el contacto directo con las sustancias químicas de los productos de limpieza.
Además, impiden que la mugre y el polvo se acumulen sobre la superficie cutánea. En efecto, aunque muchos lo ignoran, son responsables de algunos casos de sequedad e infecciones.
3. Abrígate las manos
Uno de los detonantes más comunes de las grietas en las manos es el frío. Las bajas temperaturas afectan la circulación y conducen a la deshidratación. Por tanto, para lidiar con este problema lo más recomendable es usar guantes de lana o abrigos especiales.
4. Aplícate productos exfoliantes
La textura granulada de los productos exfoliantes permite remover las células muertas que se acumulan sobre las manos. Debido a esto, son útiles para cuidar las manos agrietadas y secas.
Además, para lograr mejores resultados se recomienda elegir los que contienen aceites.
5. Utiliza protector solar
El uso de protector solar es imprescindible para cuidar las manos agrietadas. De hecho, no es necesario tener algún problema cutáneo para empezar a utilizarlo. En efecto, como es sabido, este producto puede disminuir las agresiones de los rayos UV sobre la piel.
6. Hidrátalas por dentro y por fuera
La hidratación de las manos es tan importante como la de otras zonas del cuerpo. Por eso, si sufren sequedad, grietas o cualquier imperfección, es esencial aumentar el consumo de agua y usar cremas humectantes.
De este modo, ayudaremos en la revitalización de la piel y la disminución del riesgo de infecciones y envejecimiento prematuro.
7. Bríndales cuidados nocturnos
Algunos hábitos nocturnos aceleran el proceso de recuperación de las manos resecas y agrietadas. Por ejemplo, aplicar vaselina o aceite de almendras puede sobreponer las grasas esenciales responsables de su humectación.
Además, hay disponibles tratamientos exclusivos para las manos que, usados antes de dormir, previenen arrugas y manchas.
8. Aplícales un masaje
La aplicación de masajes es un hábito que no requiere mucho tiempo y que aporta interesantes beneficios. Permite estimular la circulación para una mejor oxigenación y reparación de las células.
Por otra parte, sus efectos son aún mayores cuando se complementa con aceites relajantes y humectantes.
9. Utiliza gel de aloe vera
El gel contenido en las hojas del aloe vera es quizá el ingrediente más popular en lo relacionado con la medicina natural para mejorar la piel. Debido a su alto contenido de agua, antioxidantes y compuestos antimicrobianos, es excelente para cuidar las manos agrietadas.
Su aplicación directa favorece la hidratación de los tejidos secos y detiene el crecimiento de bacterias. De igual forma, puede promover el proceso de cicatrización y disminuye la presencia de manchas y pequeñas imperfecciones.
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10. Adquiere una crema de caléndula
Por un lado, la crema de caléndula concentra compuestos antibacterianos y antiinflamatorios que previenen las infecciones e irritación. Y, por otro, es también es cicatrizante y sus aceites esenciales humectan en profundidad la piel para acelerar su curación.
En la actualidad, se puede adquirir en tiendas herbolarias o farmacias. Además, opcionalmente, se puede utilizar el ungüento elaborado en casa.
¿Tus manos están ásperas o agrietadas? No dudes en seguir estas recomendaciones. Recuerda que, aunque parece sin importancia, descuidar estos problemas acarrea otras consecuencias. Así pues, asegúrate de tomar medidas lo antes posible.
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