7 consejos para limpiar correctamente gorras y sombreros

Si tienes una gorra o un sombrero favorito, más temprano que tarde llegará la hora en que tengas que lavarlos. El uso prolongado, en especial durante los días más calurosos, inevitablemente lleva a que se ensucien, recojan mal olor y sudor. Si no sabes cómo limpiar gorras y sombreros, te enseñamos 7 trucos para hacerlo de la manera correcta.

Si estas prendas se cuentan entre tus posesiones más queridas, lo último que deseas es que pierdan color, textura o su forma se eche a perder. En caso de que nunca antes las hayas lavado, es natural que tengas dudas sobre cómo limpiar gorras y sombreros. Veamos qué debes hacer y qué no para que las prendas queden como nuevas.

Los mejores trucos para limpiar gorras y sombreros

Salvo que el fabricante así lo recomiende, nunca debes limpiar gorras y sombreros en una lavadora. Incluso cuando lo hagas en los ciclos más amigables, es inevitable que su forma se comprometa al final. De igual manera, el uso de detergentes muy potentes puede modificar su color de manera permanente.

1. Utiliza agua fría

Utilizar agua fría es el primer consejo que debes tener en cuenta al momento de limpiar gorras y sombreros. A diferencia del agua caliente, esta no alterará su elasticidad, color, forma o los materiales de fabricación. Este es un truco empírico que todo amante de la limpieza conoce; uno que, además, está respaldado por estudios científicos.

No es necesario que el agua esté a punto de congelarse, pero sí que supere un par de grados la temperatura ambiente. Recoge suficiente de ella y déjala reposar un poco si su temperatura te impide manipularla con fluidez. No sumerjas durante mucho tiempo la gorra o el sombrero allí; solo basta con que humedezcas durante unos segundos.

2. Usa detergentes neutros

Un detergente neutro es un producto diseñado para cuidar las prendas, tu piel o cualquier tipo de material delicado. Su pH no es ácido, de manera que no compromete la textura, la forma ni el color del material.

Con frecuencia se asocia su uso solo a la ropa delicada, aunque en realidad deberías utilizarlo siempre. Si tu sombrero o gorra tiene manchas específicas que quieres eliminar, puedes frotar un poco directamente sobre ella con tu mano y dejarla en remojo 10 minutos. Evita frotar muy fuerte, ya que aunque el detergente sea amigable, la fricción puede comprometer el material.

3. Frota con un cepillo de dientes

Si la mancha no se ha removido con ayuda del detergente, entonces puedes utilizar un cepillo de dientes para crear más fricción. El uso de este es mejor que un cepillo convencional para la ropa, ya que su tamaño y su maleabilidad son aprovechables.

Asegúrate de no exceder en fuerza o tiempo para evitar decolorar la superficie de la prenda. Lo mejor que puedas hacer es frotar durante dos o tres segundos y luego revisar el estado de la mancha. De proceder, hazlo 2 o 3 segundos más y repite.

4. Aplica un poco de bicarbonato de sodio

El bicarbonato de sodio es un ingrediente de mil usos. Su empleo como blanqueador de manchas está avalado por los investigadores, sin mencionar que es un gran aliado al momento de eliminar malos olores. La fragancia que queda luego de utilizarlo es neutra. Por lo tanto, es perfecto para limpiar gorras y sombreros.

Por lo general, el bicarbonato no deja manchas tras su aplicación, pero puedes hacer una prueba pequeña en caso de que el material de la prenda sea especial. Puedes usarlo para restregar las zonas internas que tienden acumular mal olor. También para aquellas manchas que no has podido retirar con los métodos anteriores.

5. Enjuaga con agua fría

Luego de usar detergente neutro, restregar con un cepillo de dientes y utilizar bicarbonato de sodio, deberías haberte deshecho de olores y manchas. Si es así, el próximo paso es enjuagar con agua fría. Al hacerlo, puedes restregar su interior y exterior con las manos, cuidando siempre los posibles adornos o elementos extras.

Al igual que has hecho en el inicio, evita que este proceso dure mucho tiempo. Mientras más pase en el agua, es más probable que pierda su forma o se altere su diseño. En todo momento debes ser cuidadoso.

6. Busca relleno para conservar su forma

El siguiente paso consiste en preparar la prenda para su secado. Así como no se recomienda utilizar la lavadora, tampoco se sugiere el uso de la secadora para deshacerse del exceso de agua. Como ya estás intuyendo, no es válido exprimir o hacer movimientos bruscos para acelerar el secado.

Lo que sí es recomendable es buscar algún tipo de relleno para conservar su forma. De esta manera, el peso, la gravedad o la debilidad de los materiales no comprometerán el diseño. Puedes usar toallas limpias o cualquier otro objeto que se introduzca en su interior.

7. Déjalo secar lejos del sol

Por último, pero no por ello menos importante, debes secarlo siempre lejos del sol. La luz directa puede decolorar la prenda, alterar su textura y hacerla menos maleable. Por todo esto, conviene elegir los meses de verano para el lavado, ya que así se podrá secar en la sombra en menos tiempo y sin ningún tipo de inconveniente.

No hay más secretos para limpiar gorras y sombreros

Limpiar gorras y sombreros no implica ningún tipo de complicación. Antes de proceder es muy importante que revises los materiales de las prendas. Si estas son muy antiguas, es muy probable que sus alas o su visera estén fabricadas en cartón o un material endeble que se estropee en el contacto con el agua.

Para estos contextos es mejor lavar en seco. Dado que no quieres echar a perder tu sombrero o tu gorra, es mejor dejarle el trabajo a una tintorería.