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Dolor de oído en bebés y niños. ¿Qué podemos hacer?

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El dolor de oído en bebés y niños es frecuente. Existen remedios naturales que ayudan a aliviarlo, pero siempre merece la pena que su pediatra confirme que padece una molestia común y no otras enfermedades más graves.
Dolor de oído en bebés y niños. ¿Qué podemos hacer?
Maricela Jiménez López

Revisado y aprobado por la médico Maricela Jiménez López

Escrito por Equipo Editorial
Última actualización: 08 agosto, 2024

El dolor de oído en bebés y niños es uno de las molestias más comunes en los pequeños de la casa. Su salud es delicada y, debido a su fragilidad, sus dolencias generan inquietud. En este sentido, las familias se interesan cada día en opciones naturales alternativas para aliviar las molestias. No obstante, cuando este problema aparece, lo mejor es llevarlos al médico.

Puede ser un síntoma de un problema serio, por lo que su pediatra debe estar al corriente de lo que le sucede. Dicho esto, y bajo previa aprobación médica, hay algunos remedios eficaces para aplicar cuando se presenta esta condición en los pequeños.

¿Cómo prevenir el dolor de oído en bebés y niños?

Los niños suelen encontrarse con esta dificultad en su crecimiento. Sus órganos están formándose aún, por lo que se resienten. En especial, los más externos, como los oídos, los ojos, o la garganta.

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No obstante, para prevenir este problema, presentamos una serie de consejos que conviene tener en cuenta. De esta forma, conseguiremos crear una rutina de higiene diaria que evitará crear complicaciones. ¡Apunta!

1. Sustituye los bastoncillos por los espráis

Algunas personas han crecido con ellos en el armario del cuarto de baño. Sin embargo, lejos de lo que se suele pensar, los bastoncillos pueden empeorar el problema de la acumulación de cera.

Cuando los usamos, como bien indica un artículo publicado en 2013 por la Revista Enfermería del Trabajo, la empujamos, de manera que favorecemos la producción del problema.

Por otra parte, también es posible que originemos una lesión si hurgamos en exceso. Corremos el riesgo de llegar demasiado adentro y dañar o rasgar la zona. En este sentido, lo más útil y seguro son los espráis naturales que hay disponibles en el mercado.

Ver también: ¿Porqué nuestros oídos producen cera? ¿Cómo lo hacen?

2. Limpia las fosas nasales a diario

El exceso de mucosa en la nariz tiende a provocar dolor de oído en bebés y niños, ya que los conductos están demasiado cercanos. Las consecuencias pueden ir desde una inflamación a una infección.

Por tanto, recomendamos que limpies sus fosas nasales con regularidad. Para hacerlo, basta con usar agua del mar o suero fisiológico, empleando, si quieres, una jeringuilla.

3. Evita que entre agua en el oído

El agua también daña el oído en algunos casos. En consecuencia, surge hinchazón u otros problemas. Si has detectado esta sensibilidad en tu pequeño, lo mejor es que lo bañes con tapones especiales para niños.

Remedios caseros para el dolor de oído en bebés y niños

Esta vez daremos una serie de consejos y remedios caseros para prevenir y aliviar el dolor de oído en bebés y niños. Pero hay que recordar que lo más importante es saber cómo protegerlos y ayudarlos contra esta molestia. Para ello, se debe realizar con anterioridad una consulta médica.

Una gota de ajo en el oído

En este espacio y, siguiendo los consejos proporcionados por el audiólogo Carlos Torres, somos defensores del ajo, ya que es antibiótico natural.

Preparación

  • Para prepararlo, machacamos uno o dos ajos y nos quedamos con el líquido resultante.
  • Tomamos una gota del mismo con un dosificador y lo aplicamos en el oído medio del pequeño.

Zumo de cebolla

Según avala un estudio publicado en 2014 por el Archivo de Plantas, la cebolla se utiliza como antibiótico y antiinflamatorio en los dolores de oído porque, entre sus componentes, está la vitamina C.

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Preparación

  • Metemos una cebolla en agua hirviendo y dejamos que se cueza.
  • Esperamos a que se enfríe y la exprimimos para obtener el zumo.

Después, solo tenemos que dosificarlo y poner una gota en el oído para conseguir el efecto deseado.

Échale un vistazo: Consejos para tener oídos saludables

Una gota de aceite de oliva para el picor

Si un niño presenta una lesión auditiva o una infección, lo mejor es no utilizar este remedio. Tal y como explica un estudio desarrollado por varios investigadores de la Universidad de Tel Aviv (Israel), solo se recomienda para el picor producido por la acumulación de cera y, por supuesto, con previa revisión médica.

  • El procedimiento no puede ser más sencillo. Consiste en introducir una gota de aceite con un cuentagotas.
  • También es posible recurrir al aceite de almendras en el mismo caso.

Dos gotas de agua de jengibre

El jengibre tiene propiedades antiinflamatorias. Para el dolor de oído en los bebés y los niños, se indica que se use la infusión.

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Hay saquitos convencionales en tiendas especializadas, pero también está la posibilidad de prepararla con la planta.

Preparación

  • Si vamos a hacer la infusión con la planta, cortaremos un trozo de raíz de jengibre fresca.
  • Luego, pelaremos el jengibre y lo cortaremos en rodajas.
  • Pondremos agua a hervir, y antes de que hierva, añadiremos el jengibre y apagaremos el fuego.
  • Taparemos y dejaremos reposar 10 minutos.
  • Una vez que esté lista, esperaremos a que se enfríe y, con ayuda de un gotero o similar, pondremos dos gotas en la zona y empezaremos a sentir mejoría.

Otros tips para aliviar el dolor de oído en bebés y niños

En el siguiente vídeo se muestran otros dos tips que pueden ayudar con la molestia que los pequeños pueden sentir al presentarse este problema. Échale un vistazo.

En líneas generales, aunque no suele ser un problema grave, es bueno que un doctor especialista revise al bebé cuando tenga dolor de oídos. Cuanto antes se detecten enfermedades o dificultades en el desarrollo de un niño, antes se podrán solucionar.

Asimismo, creemos que es interesante conocer y recuperar remedios caseros a base de productos naturales, ya que estos son menos agresivos que los químicos y apenas provocan efectos secundarios. Pero, de cualquier modo, es vital la opinión de un especialista antes de usarlos porque no pretenden sustituir en ningún caso a un tratamiento recetado.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


 

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.