¿Cómo influye el Ramadán en el rendimiento de Karim Benzema?
Preguntarnos si el Ramadán tiene algún efecto negativo en Karim Benzema parece no tener sentido. En el partido de ayer contra el Chelsea convirtió 3 goles, llevando ya 6 días de ayuno religioso.
Este año es particular para la Champions League en este sentido. Hay muchos jugadores musulmanes que practican el Ramadán justo en un momento de definiciones clave.
¿Qué le pasa al cuerpo cuando ayuna por tanto tiempo? ¿Pueden los atletas sostener esta falta de alimentación y seguir al mismo nivel de juego? Lo analizamos.
¿Qué es el Ramadán?
Ramadán es el nombre del noveno mes del calendario musulmán. Se trata de un periodo temporal sagrado para quienes profesan esta fe e implica un ayuno estricto para los practicantes.
No todos los años coincide este mes con uno del calendario occidental. En realidad, se calcula con base en las fases lunares. Algo similar a lo que sucede con la fecha de la Pascua judía y de la cristiana.
En este 2022, el Ramadán inició el 1 de abril y se extenderá hasta el 1 de mayo, coincidiendo con partidos importantes de Karim Benzema y de otros atletas de élite que disputan la Champions League. Para ellos hay una obligación moral de cumplir con las prescripciones religiosas que profesan.
Durante estos 30 días se realiza un ayuno muy estricto desde el amanecer hasta el atardecer. En los practicantes más ortodoxos, ni siquiera líquidos se ingieren mientras dura la luz del sol.
Antes del amanecer y luego del ocaso está permitido beber y comer. Pero lo cierto es que el Ramadán no solo se trata de limitar la ingesta, sino de entrar en un estado de reflexión espiritual, por lo que también se restringen las relaciones sexuales y cualquier otra actividad física que implique desviar la atención de la meditación y la oración.
Para cumplir con su religión y seguir rindiendo en sus equipos, los jugadores musulmanes que participan en ligas europeas siguen distintas estrategias. Mohamed Salah, delantero egipcio del Liverpool, entrena antes del amanecer durante el Ramadán, por ejemplo.
La relación de Benzema con el Ramadán
Hace unos días, antes del partido contra el Chelsea en el que Karim Benzema se lució sin ser afectado por el ayuno del Ramadán, concedió una nota a un medio periodístico francés. Allí se expresó al respecto:
No tiene impacto. El Ramadán es parte de mi vida y mi religión hace que el Ramadán sea una obligación. Para mí es muy importante y me siento bien cuando ayuno.
La familia del delantero es argelina y practicante musulmana. Transmitió a su hijo los principios de esta fe e intentó que los mantuviese, incluso viviendo en medio de comunidades netamente occidentales.
Antes de los partidos, es común que el jugador tenga puestos unos auriculares con los que escucha suras del Corán. De esta manera, cumple con otro de los requisitos de su fe, que es el conocimiento de los textos sagrados.
¿Se puede ayunar un mes y ser deportista de alto nivel?
Muchos se cuestionan el aspecto saludable del Ramadán, y no solo en Karim Benzema, sino en cualquier persona que lo practique. ¿Este ayuno tan prolongado es beneficioso? ¿O consume demasiados recursos del cuerpo en vano?
Primero hay que aclarar que no es igual la forma en la que un organismo entrenado afronta la falta de alimentos, que como lo hace alguien que no entrena de manera regular. Los sistemas humanos disponen de otros mecanismos para hacer frente a las carencias cuando están fortalecidos.
Karim Benzema puede golear durante el Ramadán porque el resto del año sigue una rutina estricta de ejercicios y una dieta acorde para mejorar cada día. Cuando transcurre el ayuno prolongado de un mes, su organismo cuenta con otros recursos para contrarrestar la falta de nutrientes y de hidratación.
Descubre las 10 formas del ayuno intermitente
¿Qué pasa durante un mes de ayuno?
Esta forma de ayuno que propone el Ramadán es muy diferente a lo que conocemos como ayuno intermitente. 30 días sin ingesta de sólidos en las horas diurnas es algo serio a considerar.
Lo primero que hará el cuerpo será emplear la glucosa como fuente de energía. Quizás le alcance por 3 o 4 días. Luego deberá recurrir a las grasas y a los ácidos grasos para que funcionen como combustible.
Una vez agotado el recurso graso, el cuerpo podría destruir tejido muscular para obtener la energía. Ese es el punto crítico y no saludable. Y allí hay una diferencia grande entre los atletas de élite y otras personas.
El cuerpo de los deportistas está preparado para trabajar con otro metabolismo basal, con una mayor eficiencia a la hora de producir energía y con una capacidad de respuesta mejorada para responder al estrés físico. Es decir, los futbolistas podrían atravesar el Ramadán sin notar diferencias de rendimiento.
Un estudio de 2009 con futbolistas jóvenes musulmanes demostró que no había cambios significativos en las pruebas físicas mientras practicaban el Ramadán. Aún más importante, la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA) certificó que no había problemas de salud para los futbolistas que hacían el ayuno mensual en un ambiente controlado por sus entrenadores y clubes.
¿Qué es un ambiente controlado para el Ramadán en el fútbol?
Este ambiente controlado que se propone para los futbolistas que respetan el Ramadán tiene que seguir algunas recomendaciones de cuidado. Se trata de sugerencias científicas para disminuir el efecto del ayuno prolongado en el rendimiento atlético.
Uno de los consejos más relevantes y validado por la ciencia médica es el de cambiar el horario del entrenamiento. Se propone que los atletas ubiquen sus sesiones al atardecer, de manera que puedan reponer la hidratación al caer el sol.
Del mismo modo, tienen que disponer de una rutina de sueño que se modifique durante el Ramadán. Tendrán que asegurar las horas suficientes para que el ritmo circadiano no cambie demasiado al estar en ayuno. Esto evitaría que el músculo sea usado como combustible.
El Ramadán no parece mermar a Karim Benzema
Los 3 goles ante el Chelsea lo dicen todo. El Ramadán no está mermando el rendimiento de Karim Benzema.
Pero esto no puede atribuirse a la suerte. El delantero del Real Madrid ha cambiado hace varios años su perspectiva de entrenamiento y de dieta para ser hoy un goleador imparable.
Cuerpo, mente y espíritu están alineados en este hombre que es capaz de respetar sus tradiciones sin afectar a su equipo.
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