Logo image
Logo image

Leucemia eosinofílica crónica: síntomas, diagnóstico y tratamiento

5 minutos
La leucemia eosinofílica crónica no es tan frecuente como otros cánceres, pero es una enfermedad grave. El éxito de su tratamiento depende de su diagnóstico temprano.
Leucemia eosinofílica crónica: síntomas, diagnóstico y tratamiento
María Irene Benavides Guillém

Escrito y verificado por la médica María Irene Benavides Guillém

Última actualización: 10 julio, 2023

La leucemia eosinofílica crónica es una enfermedad neoplásica en la que los eosinófilos se multiplican de forma desmesurada, afectando varios órganos. Incluso, puede conducir a la muerte.

Se caracteriza por la presencia persistente de un número elevado de eosinófilos en la sangre, a lo que se llama «hipereosinofilia».

Su diagnóstico temprano es fundamental para iniciar el tratamiento en forma oportuna y tener mayor éxito. Por eso te contamos cómo se arriba a la confirmación de la enfermedad y cuáles son sus síntomas.

¿Qué son los eosinófilos?

Hay que comenzar por entender qué son los eosinófilos. Se trata de una clase de leucocitos o glóbulos blancos.

Reciben este nombre porque contienen unos gránulos que se tiñen intensamente con un pigmento ácido llamado eosina. En el microscopio, cuando se usa la tinción, estas células aparecen de color rosa-anaranjado.

Tienen un rol importante en el organismo humano. Son parte activa del sistema inmunitario.

Su función más conocida es la capacidad de destruir parásitos con las sustancias que hay en sus gránulos. Pero también participan en la defensa frente a virus, hongos y bacterias.

Asimismo, los eosinófilos intervienen en la respuesta frente a tumores y en el metabolismo. Por otro lado, contribuyen a la reparación y remodelación de los tejidos, por lo que toman parte en la regeneración de la piel, los músculos y el hígado.

No obstante, también puede tener un efecto negativo. La consecuencia de su hiperactividad o de su acción en exceso es el daño de algunos órganos y la persistencia de síntomas molestos.

Es lo que ocurre, por ejemplo, en el asma alérgica. Estas células son unas de las principales responsables de la inflamación prolongada.

Some figure
Los eosinófilos circulan por la sangre y contienen gránulos con sustancias que median la respuesta alérgica.

¿Por qué pueden aumentar los eosinófilos?

Antes de hacer un diagnóstico de leucemia eosinofílica crónica, hay que descartar todas las otras causas de hipereosinofilia.

Partiendo de las funciones de los eosinófilos, se puede deducir qué puede hacer que aumenten. Estos se expandirán como reacción a infecciones parasitarias, enfermedades alérgicas y autoinmunes. También frente a la ingesta de algunos fármacos.

Por ello, si el médico detecta un análisis de sangre con muchos eosinófilos, nos preguntará qué enfermedades padecimos antes, qué medicamentos tomamos o si hemos estado expuestos a situaciones en las que pudimos habernos infectado con parásitos.

A su vez, la eosinofilia puede ser una de las manifestaciones de tumores malignos en diferentes tejidos:


Para saber más: ¿Qué es la eosinofilia?


¿Cómo se diagnostica la leucemia eosinofílica crónica?

La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que, después de excluir rigurosamente la presencia de una eosinofilia reactiva o secundaria, corresponde realizar pruebas diagnósticas especializadas, como la biopsia de médula ósea.

Mediante estudios moleculares y genéticos se detectarán alteraciones que expliquen la proliferación celular desordenada. De esta forma, se determinará si existe un defecto intrínseco o hipereosinofilia primaria.

La OMS advierte que criterios como la duración de los síntomas, el número de eosinófilos o el compromiso de los órganos suelen ser arbitrarios o tardíos. Es decir, su presencia o ausencia no descartan la enfermedad.

Peor aún, pueden considerarse muy tarde en la evolución de la leucemia. Recordemos que es vital el diagnóstico temprano para evitar las complicaciones.

¿Cuáles son los síntomas de la leucemia eosinofílica crónica?

Cabe señalar que la leucemia eosinofílica crónica es más frecuente en varones y en la sexta década de la vida. En estos grupos se sospecha primero.

En cuanto a los síntomas, la Clínica Mayo publicó recientemente las características de un grupo de pacientes con leucemia eosinofílica crónica. Más de la mitad tuvo fatiga.

En segundo lugar de frecuencia están las molestias gastrointestinales, como diarrea, dolor abdominal, náuseas y vómitos. Menor proporción ocupó la pérdida de peso, la tos y los sudores nocturnos.

Las personas con leucemia eosinofílica crónica tienen con frecuencia anemia y bajo recuento de plaquetas. Así que pueden presentar síntomas secundarios a estas alteraciones. Por ejemplo, sufrir infecciones bacterianas y virales a repetición, con difícil recuperación.

Además, pueden afectarse órganos como el corazón y los pulmones, lo que conduce a una emergencia médica que amenaza la vida. De igual forma, el bazo y los ganglios linfáticos pueden estar aumentados de tamaño.

Las lesiones en la piel son comunes, incluyendo dermatitis y urticaria.
Some figure
La fatiga es un síntoma inespecífico, pero su persistencia debe motivar la búsqueda de un diagnóstico.

¿Cuál es el tratamiento de la leucemia eosinofílica crónica?

La leucemia eosinofílica crónica es una enfermedad grave. Si no se trata, los eosinófilos pueden invadir diversos órganos del cuerpo y dañarlos. Corazón y pulmones suelen ser los más afectados, aunque cualquier tejido puede verse comprometido con el paso de las semanas y los meses.

Del mismo modo, la enfermedad puede convertirse en una leucemia aguda. En dicha circunstancia, la evolución se vuelve agresiva y se reduce drásticamente la producción internas de leucocitos, glóbulos rojos y plaquetas.

El objetivo del tratamiento siempre es disminuir el número de eosinófilos circulantes. Esto se hace para prevenir que se invadan los tejidos y se dañen los órganos.

La primera línea de inicio, para luego continuar con el esquema de las guías clínicas, son los corticoides. Estos agentes antiinflamatorios se combinan con hidroxicarbamida, interferón alfa o imatinib.

Algunos pacientes recibirán un trasplante de médula ósea. No es una terapia recomendada para todos los casos. Debido a que varios pacientes son de edad avanzada, en ellos no se pueden esperar resultados favorables al usar células madres hematopoyéticas. De todos modos, se siguen investigando alternativas.

Ahora bien, como muchas personas no mejoran con la quimioterapia y la inmunoterapia, se están explorando posibilidades con genética. Los resultados son prometedores, pero no se hallan disponibles estos abordajes para toda la población diagnosticada.

En todo caso, lo esencial es que estemos atentos ante las señales del cuerpo. Hay que acudir al médico sin demora si presentamos cualquiera de los síntomas que hemos mencionado.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Álvarez-Sánchez, J. G., & Opina-Pérez, A. T. (2020). Eosinofilia en sangre y cáncer de ovario: estudio fase I de pruebas diagnósticas. Ginecología y obstetricia de México88(10), 686-691.
  • Amaru R, Peñaloza R, Navia P, Torres G, Arias A. Leucemia eosinofílica: Reporte de un caso clínico. Cuad. Hosp. Clín. 2000;46(2):72-5.
  • Balanchivadze N, Purtell JP, Anderson J, Guo Y, Dobrosotskaya I. A Case of Chronic Eosinophilic Leukemia in a Patient With Recurrent Cough, Dyspnea, and Eosinophilia. Cureus. 2021;13(1):e12654.
  • de Guevara, Y. C. L. (2022). Eosinofilia y cáncer de pulmón. Informe de un caso. Gaceta Médica Estudiantil3(1), 132.
  • Durán, R. (2015). Fisiopatología del asma: una mirada actual. Revista Colombiana de neumología27(3).
  • Klion AD, Ackerman SJ, Bochner BS. Contributions of Eosinophils to Human Health and Disease. Annu Rev Pathol. 2020;15:179-209.
  • Morsia E, Reichard K, Pardanani A, Tefferi A, Gangat N. WHO defined chronic eosinophilic leukemia, not otherwise specified (CEL, NOS): A contemporary series from the Mayo Clinic. Am J Hematol. 2020;95(7):E172-E174.
  • Pagovich OE, Stiles KM, Camilleri AE, Russo AR, Nag S, Crystal RG. Gene therapy in a murine model of chronic eosinophilic leukemia-not otherwise specified (CEL-NOS). Leukemia. 2022;36(2):525-531.
  • Shomali W, Gotlib J. World Health Organization-defined eosinophilic disorders: 2022 update on diagnosis, risk stratification, and management. Am J Hematol. 2022;97(1):129-148.
  • Torres D, Chandía M. Leucemia eosinofílica crónica con respuesta hematológica sostenida tras tratamiento con bajas dosis de imatinib. Rev. méd. Chile  [Internet]. 2014;142(4):516-520.
  • Wang SA. The Diagnostic Work-Up of Hypereosinophilia. Pathobiology. 2019;86(1):39-52.
  • Wechsler ME, Munitz A, Ackerman SJ, Drake MG, Jackson DJ et al. Eosinophils in Health and Disease: A State-of-the-Art Review. Mayo Clin Proc. 2021;96(10):2694-2707.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.