Minimalismo cálido: qué es y cómo aplicarlo en casa
¿Has escuchado hablar sobre el minimalismo cálido? Se trata de un estilo que combina elementos del minimalismo clásico con ligeras variantes en colores, texturas y materiales que aportan calidez.
Descubre una tendencia que busca generar ambientes acogedores y alegres sin renunciar a la simpleza del «menos es más». Es ideal para aprovechar los espacios con la cantidad justa de adornos, mobiliario e iluminación. Descubre más a continuación.
¿Qué es el minimalismo cálido y cuál es su origen?
Como su nombre lo indica, el minimalismo cálido es una variante del minimalismo, aquella corriente artística, arquitectónica y decorativa iniciada en la década de 1960. En su vertiente clásica, esta tendencia propone reducir la carga de los espacios a lo mínimo y esencial. El fin es generar embellecimiento a partir de ambientes despojados.
Son muchas las corrientes que toman premisas del minimalismo para organizar los interiores de las estancias. En una actualidad, cuando el consumismo excesivo y la sobreestimulación visual se presentan en todo momento, la idea de retornar a lo básico está asociada al orden y al bienestar.
Una publicación de la Revista de Psicología Ambiental sugiere que la sobrecarga de bienes dentro de la estancia impacta de manera negativa debido a que produce sensación de caos.
En este marco, el minimalismo cálido se aferra a los preceptos clásicos, pero con un aporte de colores, texturas y materiales naturales. El fin es reemplazar la frialdad que muchas veces genera la corriente clásica con unos ligeros aportes que buscan sensación de calidez.
Perspectiva ambiental del minimalismo cálido
Este novedoso estilo, cada vez más aplicado en miles de hogares, tiene un costado ecologista que parte desde dos ángulos. Por un lado, desde la reducción del consumo y la posesión de objetos. Según un informe de Greenpeace, el consumismo excesivo tiene un severo impacto sobre el planeta.
La publicación indica que en la actualidad se extraen un 50 % más de recursos naturales que hace 30 años. Muchos de ellos asociados a la acumulación y desecho de bienes innecesarios. Por otro lado, desde la presencia de materiales decorativos de origen natural, como la madera y los tejidos ecológicos.
Cómo aplicar el minimalismo cálido en casa
Generar una estancia ordenada desde lo visual, despojada de lo material y acogedora en su ambientación es una tarea sencilla cuando se aplican algunas premisas del minimalismo cálido. Lo central en esta tendencia es reducir los elementos a lo básico y apelar a la presencia de plantas, mobiliario con líneas curvas y colores en tonos cálidos.
Para eso, también es posible adoptar características del oosouji, antiguo ritual de origen budista que busca purificar los espacios a partir del desprendimiento material. En este sentido, el minimalismo cálido se asemeja al clásico, pero tomándose algunas licencias para producir ambientes más amenos. ¿Cómo implementarlo?
Texturas y textiles de origen natural
Una de las vías para generar calidez en la estancia es a través de textiles de origen natural. Los mismos pueden presentarse en accesorios como cojines, alfombras y cortinas.
La idea es combinar fibras como el algodón, el lino o la lana en materiales clásicos que pueden ser el mármol o el cemento. Hay que tener en cuenta que en el minimalismo cálido se priorizan las superficies lisas sobre los estampados.
Gama de colores cálida
En su variante clásica, esta tendencia utiliza el blanco como color central y la gama de diferentes grises como complemento. Por su parte, el minimalismo cálido incorpora algunas otras tonalidades que aportan calidez a la estancia.
El marrón, el ocre, el beige y las gamas cercanas al color tierra —pero suavizadas— son grandes opciones para favorecer la luminosidad.
Mobiliario y materiales
En cuanto al diseño del mobiliario, la idea es reducir la rigidez visual que producen las líneas rectas del minimalismo. Por lo tanto, es común agregar muebles redondeados. Los mismos pueden encontrar un punto en común con el estilo de decoración nórdico.
El material protagonista es la madera, ya que aporta color y calidez a la estancia. A su vez, es de origen natural, por lo que encaja perfecto con la tendencia. De todas formas, hay que tener presente que se prioriza la calidad sobre la cantidad. La idea es seguir manteniendo los espacios despojados de objetos innecesarios.
Plantas
El aporte natural por excelencia en la decoración son las plantas. Para una tendencia que busca la relajación, la calidez y la vuelta a lo esencial, contar con un grupo de plantas de interior es fundamental. Algunos ejemplares posibles son el árbol de jade, el ficus, la kentia o las kalanchoe.
Iluminación
El ingreso de luz natural es fundamental en el minimalismo cálido. Se deben buscar diferentes maneras de favorecerlo, como instalando cortinas de colores claros y que no obstruyan demasiado los ventanales. Para las horas nocturnas, se recomienda colocar iluminación artificial que aporte calidez en sus tonalidades.
La importancia del orden en el minimalismo cálido
Como has podido notar, este estilo toma características del minimalismo y de la decoración nórdica. Sin embargo, no pierde de vista la centralidad del orden como prioridad visual del espacio. Una estancia ordenada tiene efectos positivos en el estado de ánimo, tal como demuestra el trabajo de Marie Kondo.
Además, si se dispone de los objetos justos y necesarios, es más sencilla la distribución en el espacio y la personalización del mismo. Según un estudio de la Universidad Complutense de Madrid, las personas transmiten información sobre su propia identidad a partir de los objetos presentes en el hogar.
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