¿Sabes qué frutas puede comer un bebé?

Tener un bebé es maravilloso, pero a veces puede que como padres tomemos algunas decisiones que los afecten. No pueden comunicar si algo les hace daño ni tienen armas para negarse.

Por ello, en ocasiones nos asaltan dudas sobre qué frutas puede comer un bebé, sin poner al pequeño en peligro en ningún momento. Si quieres saber un poco más sobre el tema, hemos preparado un breve artículo informativo al respecto. ¡Sigue leyendo!

Algunos aspectos básicos

Primero tenemos que saber cuándo comenzar darle fruta a nuestro pequeño. Lo ideal es hacerlo a partir de los 6 meses pues, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se recomienda la lactancia materna exclusiva hasta esa edad.

Así pues, las frutas las tendremos que preparar en zumo o en papilla para dárselas poco a poco. En este sentido, lo más adecuado es iniciar este proceso con zumos, aunque es posible que su primera reacción sea de rechazo.

Pero no debemos preocuparnos; le daremos un sorbito de vez en cuando durante unos días y, si todavía no lo quiere, probaremos con un puré y seguiremos el mismo procedimiento. Poco a poco, el pequeño se adaptará a su sabor y a su textura. Hay que tener en cuenta que, hasta ese instante, solo ha probado la leche; todo necesita su tiempo.

También es conveniente pensar en las alergias. Tal y como señala esta guía de alimentación realizada por profesionales de la Universidad de Lleida, los nuevos alimentos que vayamos incorporando en la dieta de nuestro hijo han de introducirse de uno en uno, y esperar al menos 3 días para introducir el siguiente, vigilando reacciones alérgicas.

Con estas edades, una crisis de este tipo puede ser muy grave, por lo que es conveniente empezar por las frutas que menos riesgo presentan. En este sentido, hay que desechar, por ahora, el kiwi, las fresas, el melón y las frutas tropicales.

Descubre qué frutas puede comer un bebé

Manzana

Además de su sabor dulce, es una de las frutas más suaves, por lo que el riesgo de intolerancia es mínimo. Los beneficios de la manzana para los bebé son muy significativos.

• Para empezar, tiene esa fibra que los niños necesitan tanto en estos momentos. Diversos estudios, como este publicado en la revista Nutrients, han demostrado que la fibra garantiza una salud intestinal óptima y ayuda a prevenir problemas de tránsito. En esta primera época, el sistema digestivo de los bebés se resiente cuando le variamos la dieta, por lo que el estreñimiento es una afección muy frecuente.
• Por otra parte es rica en calcio, hierro y potasio, así como en vitaminas A, B, C y E.
• Además, como todos los alimentos de este tipo, también ofrece el azúcar que necesita el organismo para tener energía.

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Pera, una de las frutas que puede comer un bebé

Al igual que sucede con la manzana, apenas existe la posibilidad de que nuestro bebé tenga una reacción alérgica al consumir una pera.

• Tiene un alto contenido en minerales: potasio, magnesio y calcio.
• Por otro lado, esta fruta aporta un extra de energías con sus hidratos de absorción lenta, al tiempo que ayuda a reforzar su sistema inmunitario con su aporte de vitamina C que, tal y como evidencia esta investigación publicada en el American Journal of Lifestyle Medicine, ayuda a prevenir la aparición del resfriado común.
• Por si esto fuera poco, también contiene ácido fólico y antioxidantes naturales.
• Para terminar, la pera destaca por su contenido de fibra y ácidos grasos poliinsaturados.

La manzana y la pera son la respuesta segura para quienes se preguntan qué frutas puede comer un bebé. Como muestra de su suavidad, basta con darse cuenta de que incluso los adultos optamos por ellas cuando tenemos algún problema estomacal.

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Plátanos

Antes de preparar cualquier receta con plátano, recuerda retirar las hebras que estos suelen tener. Una vez que hayas hecho esto, tienes a tu disposición un gran producto para tu bebé. La forma más sencilla de consumo es la compota o papilla de plátano.

Como sabes, se trata de una fruta que constituye una buena fuente de hidratos de carbono. Por ello, es recomendable para que el pequeño tenga energía y pueda jugar todo lo que quiera. No obstante, es preferible que ingiera esta fruta a a media mañana o en el almuerzo. Así el cuerpo absorberá toda su fibra, potasio y minerales.

Ahora que sabes qué frutas puede comer un bebé, es importante que acostumbremos a nuestros hijos a comerlas desde que son pequeños. No solo para aprovechar sus nutrientes, sino porque les ayudará a evitar otros que pueden ser perjudiciales para ellos.

Las frutas brindan una gran cantidad de azúcares naturales, elemento que el cuerpo demanda. En consecuencia, cuando no comemos fruta, recurrimos a otro tipo de alimentos, como la bollería industrial, que no aportan más que perjuicios al organismo. Por tanto, lo deseable es habituarlos a la fruta y alejarlos de los azúcares refinados para conservar su buena salud.