Tipos de cepillos dentales: características, beneficios y usos
Escrito y verificado por la odontóloga Vanesa Evangelina Buffa
Para cuidar la salud bucodental es necesario prestar atención a la higiene de dientes, encías y lengua. Por fortuna, existen distintos tipos de cepillos dentales que facilitan la limpieza de la boca según las necesidades de cada persona.
En este artículo te contamos sobre los aspectos importantes que se deben considerar para elegir el cepillo de dientes. Sigue leyendo y entérate sobre la variedad de estos instrumentos y cuáles son los beneficios de cada uno.
Características de los cepillos dentales
Los cepillos dentales son instrumentos de higiene oral que se utilizan para limpiar dientes, encías, paladar y lengua. Su función principal es eliminar los restos de alimentos y bacterias presentes en la boca para evitar su acúmulo y proliferación.
Al desordenar y eliminar la placa bacteriana se actúa sobre la causa de muchas patologías orales. De esta manera, el cepillo dental se entiende como un instrumento fundamental para la prevención de muchas de las enfermedades frecuentes en la boca.
Como ya mencionamos, existen distintos tipos de cepillos dentales y cada uno posee características particulares que los hacen ideales para ciertas situaciones específicas. De todos modos, debes saber que todos estos instrumentos constan de las siguientes partes:
- Mango: es la zona del cepillo diseñada para facilitar su agarre y manipulación. Suelen estar confeccionados de un plástico flexible y antideslizante y tener una forma ergonómica que mejora la sujeción. También existen los fabricados con bambú, pensados para reducir la contaminación ambiental.
- Cabezal: es la porción que sostiene las hileras de cerdas y la que ingresa a la boca para realizar la limpieza. El tamaño y la forma varían en los distintos tipos de cepillos dentales, según la zona específica que se busca higienizar.
- Cerdas: son filamentos sintéticos pequeños que, agrupados, permiten realizar el movimiento de barrido y eliminación de los residuos bucales.
Algunos cepillos, además, poseen un capuchón para cubrir el cabezal y permitir su guardado y transporte sin dañar las cerdas. El diseño con perforaciones permite que los filamentos estén aireados para evitar la proliferación de microorganismos.
Diferentes tipos de cepillos dentales
En el mercado existen muchos tipos de cepillos dentales con diferentes formas y tamaños en los mangos, los cabezales y las cerdas. El diseño particular de cada uno obedece a la búsqueda de una higiene oral precisa y adecuada en el sector de la boca para el que fue pensado.
De todos modos, es necesario saber que más allá de la variedad de cepillo que se utilice, la correcta higiene dental está influenciada por otros aspectos importantes. La técnica empleada, la duración de cada limpieza y la frecuencia con que se realiza el cepillado son mucho más significativos que el tipo de instrumento que se use.
Con el objetivo de prevenir patologías bucodentales se han ido desarrollando diversos tipos de cepillos dentales. Existen clasificaciones según la dureza de sus filamentos, la manera de manipularlos o sus usos.
Según la dureza de las cerdas
Como ya adelantamos, las cerdas son los filamentos que ejercen el movimiento de barrido para eliminar la placa bacteriana de las superficies dentarias. El grosor y la firmeza de las mismas cambia y por eso es posible distinguir las siguientes durezas de cepillos:
- Duros: las cerdas son gruesas, fuertes y rígidas, por lo que se recomiendan solo para bocas sanas, cuidadas y con encías gruesas que no presenten sensibilidad ni sangrado. Se aconseja no ejercer demasiada presión durante el cepillado para no dañar el esmalte ni el tejido gingival. En la actualidad, no son muy utilizados.
- Intermedios: como el nombre lo indica, el grosor de las cerdas es intermedio; ni tan duras ni tan suaves. Se utilizan en bocas con buena salud bucodental, sin sensibilidad, que toleran la firmeza del cepillado.
- Filamentos suaves: son los más utilizados en la actualidad. Ante la duda, son los que se deberían elegir. Las cerdas son blandas y producen menos fricción. Se recomiendan a personas con sensibilidad dentaria, encías frágiles, que sangran o se inflaman con facilidad.
- Con cerdas extra suaves: los filamentos son muy blandos, por lo que están indicados para situaciones en las que el paciente presente mucha sensibilidad. Son aconsejables luego de un tratamiento de ortodoncia, tras un blanqueamiento dental o en casos de retracción gingival, por ejemplo.
Según su funcionamiento
La manera de manipular los cepillos dentales permite separarlos en dos grandes grupos:
- Manuales: son aquellos que necesitan de nuestra energía para realizar los movimientos de limpieza. En este grupo se encuentran los cepillos dentarios convencionales, que se utilizan de manera habitual, y aquellos con diseños especiales que también funcionan operados por el paciente.
- Eléctricos: estos cepillos funcionan a pila o a batería y son capaces de mover las cerdas del cabezal en distintas direcciones de manera automática. Presentan 3 tipos de movimientos (horizontal, vertical y giratorio) que se combinan, haciendo más fácil y completo el proceso de limpieza. Los cepillos dentales eléctricos los puede emplear cualquier persona, pero son especialmente útiles en pacientes niños, con ortodoncia o con problemas motrices.
Según su finalidad
El objetivo común de todos los tipos de cepillos dentales es la eliminación de la placa bacteriana y la limpieza de la boca. De todos modos, algunos presentan características propias que los hacen más oportunos para usar en ciertas situaciones puntuales.
A continuación, mencionamos tipos de cepillos dentales con usos específicos.
Cepillos infantiles
Los cepillos de dientes para niños se caracterizan por tener un tamaño más pequeño, un cabezal más corto y cerdas suaves. Además, el mango suele ser ancho para facilitar el agarre.
Existen distintos tamaños según la edad del pequeño, detallándose en el empaque para qué etapa corresponden. Es común que posean decoraciones atractivas que motiven a los infantes a comprometerse con el cuidado de su boca.
Cepillos interproximales
Los cepillos interproximales se usan para eliminar la placa bacteriana retenida en los espacios interdentarios, es decir, en la zona donde un diente contacta con el que tiene al lado. Se fabrican de distintos tamaños, por lo que es importante elegir el grosor adecuado acorde al espacio entre dientes.
En general, vienen con un mango al que se le pueden colocar distintos cabezales con distintos tamaños, para ir cambiándolos según el tamaño de cada espacio interdentario. La parte activa del cepillo tiene forma de pico de botella o de un penacho de alambre del que salen múltiples filamentos.
En el momento de usarlo, se debe elegir el cabezal que mejor se adapte a la zona entre dientes a limpiar. El mismo debe entrar de manera holgada para que sean los filamentos los que contacten con las superficies dentarias y no el alambre.
El mango suele ser angulado para permitir un fácil acceso a todos los espacios interdentarios de la boca. El movimiento de limpieza ha de ser de adentro hacia afuera y se debe evitar girarlo.
Cepillos periodontales
Estos cepillos dentales, también llamados sulculares o creviculares, tienen la particularidad de poseer un cabezal delgado, con 2 filas de cerdas suaves. El tamaño permite acceder con precisión y suavidad a zonas de difícil acceso.
Se usan en pacientes con gingivitis, retracción gingival, bolsas periodontales y piorrea. También son útiles en pacientes con ortodoncia fija.
Cepillos ortodóncicos
Son cepillos dentales diseñados de manera especial para facilitar la higiene dental de los pacientes que llevan aparatología fija. Pues limpiar entre los brackets, bandas y arcos puede ser muy dificultoso de la manera convencional.
Tienen la particularidad de tener la hilera central de filamentos más corta que el resto. Esto ayuda a limpiar los dientes y los brackets sin desgastar el cepillo ni afectar el aparato.
Cepillos posquirúrgicos
Este tipo de cepillo dental se indica luego de una cirugía bucal, durante el proceso de recuperación y cicatrización de los tejidos. El cabezal es pequeño y posee cerdas muy suaves que permiten hacer una limpieza cuidadosa sin agredir encías ni dientes.
También son útiles para no descuidar la limpieza oral en situaciones en las que el paciente presenta aftas o heridas en la boca.
La elección del cepillo dental
Los cepillos de dientes son una herramienta accesible y fácil de usar que nos ayuda a cuidar la salud bucodental. Su uso adecuado desde edades tempranas y a lo largo de la vida puede prevenir muchas problemáticas orales.
Pero como has comprobado, a la hora de cuidar tu dentadura dispones de diversos tipos de cepillos dentales entre los que elegir. Es recomendable combinarlos según tus necesidades para lograr una limpieza completa y exhaustiva.
Es importante que al momento de comprar un cepillo dental se tengan en cuenta las características propias de la cavidad oral. Evaluar el tamaño bucal, si los dientes están muy encimados entre sí o hay mucho espacio entre ellos, son factores que se deben considerar para elegir la mejor alternativa. También es útil valorar si las encías sangran con facilidad o se sufre de sensibilidad.
Debes recordar que para que la limpieza oral sea efectiva, los cepillos dentales deben renovarse cada 3 meses o antes si están muy desgastados. Disponer de una herramienta en buenas condiciones es fundamental para garantizar una higiene adecuada.
El complemento del cepillado con el uso de pastas dentales con flúor, hilo dental y enjuagues bucales es también de suma importancia. La combinación de estos productos en una limpieza frecuente y con la técnica adecuada ayuda a mantener la boca saludable.
En el caso de que haya dudas respecto a qué tipos de cepillos dentales elegir, lo ideal es consultar con el odontólogo. El profesional podrá indicar las mejores opciones para mantener la boca saludable.
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